No es de majaderos comparar Mi Judit con PDMD del mismo Emsibi o LCDI de ASeneka, así como varios otros relatos que usan la misma estructura y pertenecen a un mismo universo de situaciones, para nada pierde valor por muy parecidos que sean sus personajes.
Lo he dicho, me encantan este tipo de historias de infidelidad no consentida, plagadas de situaciones que parecen ser sin llegar a confirmarse, cubiertas de una nube de incertidumbres y sospechas que nos llenan de grises haciéndonos dudar de nuestro propio criterio, con una lenta y morbosa evolución en el comportamiento de su pareja protagonista, que da paso a una marcada desigualdad de opciones, de ella por aspirar a más, y de él por no perderla.
Comparto varias opiniones que he leído, para empezar el desaliento al ver que quedan muy pocos capítulos para dar tiempo a que la tragedia final de paso a algún tipo de revancha de Agus, sería en verdad decepcionante que no sufra consecuencias cada uno de los responsables, lo otro que tampoco lo veo siendo infiel antes que ella, oportunidades ha tenido y las ha salvado bien.
Entendamos que ni Jud ni Dutch necesitaban este juego ni ningún otro para traicionar a Agus, si no lo han hecho, no es el estilo de Dutch, que prefiere no enterar a las parejas de sus conquistas y menos siendo tan entrañable su supuesta amistad, es lo que más me causa extrañeza de su comportamiento en los últimos días, en ocasiones ha perdido su máscara de lealtad aprovechando lo bien que conoce sus inseguridades, vimos como en el juego bien pudo cambiar de tarjeta para evitar tocar los pechos de su Jud, prefirió hacerlo en su cara.
Sería posible que como ha sucedido en alguna historia que he leído, creo como en "Hay una zorra en ti" de Abel Santos, que nunca Jud llegue a follar para consumar la infidelidad, y no pase de muchas situaciones muy reprochables y comprometedoras, sin ser irreparables.
Bien lo ha hecho Emsibi, espero que no se aparte de esta línea de relatos, que son una inagotable fuente de morbo e intriga erótica.
