Sexshop con cabinas

Por qué es mejor? Te creo, es solo por curiosidad y saberlo bien antes de ir
Bueno eso ya depende de cada uno....si no has ido porque te da corte, o como quieras llamarlo,.....es mejor ir solo
Si quedas con alguien y quieres ir ahí porque te da morbo la oscuridad....los Glory.......vete acompañado....jajaja
 
No he ido porque no me he atrevido aún, pero creo que me daría bastante morbo la situación.

Creo que me daría igual ir solo o acompañado, pero si que prefiero que no sea nadie conocidon
Yo fui 2 veces solo y 1 acompañado .....y disfrute de las 2 formas.
Tal vez más cuando fui solo...jajaj
 
Por qué es mejor? Te creo, es solo por curiosidad y saberlo bien antes de ir
Si no has ido nunca y quieres ir, uno de los motivos es la discreción. No quieres que te vea nadie por miedo a que te juzguen. Mejor ir solo.
Otro es la vergüenza. Si te da vergüenza ir,con alguien te va a dar mas. Mejor ir solo.
Además, si te ven salir o entrar de un lugar de este estilo,es mas facil d explicar si estás solo.
Y si quieres irte,te vas cuando quieras. No cuando quiera la otra persona. Mejor sin ningún compromiso.
 
Si no has ido nunca y quieres ir, uno de los motivos es la discreción. No quieres que te vea nadie por miedo a que te juzguen. Mejor ir solo.
Otro es la vergüenza. Si te da vergüenza ir,con alguien te va a dar mas. Mejor ir solo.
Además, si te ven salir o entrar de un lugar de este estilo,es mas facil d explicar si estás solo.
Y si quieres irte,te vas cuando quieras. No cuando quiera la otra persona. Mejor sin ningún compromiso.
Muchas gracias por la respuesta, muy bien explicado y me has convencido, iré solo jajajaja
Muchas gracias 👍🏼
 
En Zaragoza hay tres, dos por el centro y uno cerca de la estación intermodal. Si me lo permitís os voy a relatar algunas experiencias.

Los hay más limpios e higiénicos, y otros que son más oscuros y sórdidos.

Uno de los que hay por el centro está ubicado en plena zona de tapeo y a mí personalmente me daba muchísimo corte entrar o salir de allí porque a según qué horas por esas calles deambula mucha gente, y yo prefería algo más de discreción. Pero reconozco que cada vez que pasaba por la puerta se me despertaban el morbo y las ganas. Como tienen ventanas de cristal es posible ver el escaparate y parte del interior, y luego la fantasía necesita poco para dispararse, además me suena que allí hay glory holes pero en el sótano. Así que siempre me quedó pendiente armarme de valor para entrar y conocerlo.

En otra ocasión fui al que queda cerca de la estación intermodal, pero igualmente está en una avenida amplia y justo hay un semáforo en la puerta, entonces me daba muchísima vergüenza pensar que justo al salir hubiese parado en el semáforo un autobús y me imaginaba a todos los pasajeros observándome al salir por la puerta... Jajajaja Pero una de las veces que no había apenas tráfico y que yo estaba bastante excitado, me animé a entrar y pregunté cómo funcionaba lo de las cabinas, me explicaron que accedías al interior y podías ir echando monedas para que se siguiese visionando la película que hubiese. Aquella vez que estuve entré en una cabina, había varias a través de un pasillo, se veía todo muy limpio, el asiento era muy cómodo y la pared tenía una ventanita que se podía abrir y cerrar con una pequeña puerta. Al cabo de un rato llegó un chaval y se puso en la cabina de al lado, fue excitante echar un vistazo a través del agujero y ver cómo se despelotaba, se excitaba y se empezaba a masturbar y se le ponía el rabo duro. Que mi vecino tuviese un cuerpo fibrado y aspecto juvenil me animó a querer compartir con él esa experiencia. Nos hicimos una señal a través del agujero y él me mostró su rabo y yo le mostré el mío. Pero en ese momento me sentía como un remolino de emociones, por un lado estaba excitado pero por otro lado me palpitaba el pecho y me sentía el pulso acelerado por la situación en sí, así que no permanecí mucho rato allí y a los pocos minutos me marché.

También he ido al otro que hay por el centro, aunque éste es mucho más oscuro y sórdido. Tienen unas pocas cabinas arriba y otras tantas abajo en el sótano. Mientras me acercaba a la puerta del sex shop sentía cómo se me aceleraba el pulso, además en ese momento no pasaba apenas gente por esa calle porque era a media mañana, y al llegar a la puerta observo que tenían un timbre. No era posible ver el interior porque algunos cristales eran traslúcidos y otros opacos. Llamé al timbre, esperé apenas un par de segundos que se me hicieron eternos, y enseguida me abrieron. Cuando entré aproveché para mirar qué cosas tenían por allí, había muchos juguetes y algunas películas y revistas, aunque al cabo de un rato vi el cartel donde se explicaba cómo funcionaba el glory hole, así que le expliqué al encargado cuánto tiempo me apetecía estar y pagué. El encargado me dio acceso a una de las cabinas en el sótano. Recuerdo que había un glory hole a cada lado de la pared de mi cabina. Me intenté poner cómodo, me puse la película, me bajé los pantalones y me empecé a acariciar el rabo. Así pasaron algunos minutos mientras me acomodaba y observaba los detalles de la estancia: el pulsador para avanzar las películas, una papelera y un cenicero.

Al cabo de un rato escuché que tocaban el timbre y que otro cliente bajaba las escaleras y se situaba en una de las cabinas que había al lado de la mía. En ese momento, al observar por el agujero que se encendía el televisor de la cabina de al lado y al intuir la silueta de otro tío dentro de esa cabina, sentándose y poniéndose cómodo, me empecé a excitar aún más. A los pocos minutos volvió a sonar el timbre, entró otro cliente que también bajo las escaleras y le dieron otra cabina diferente.

En ese momento yo me sentía bastante cortado. Me temblaba el cuerpo de la excitación. A través del agujero observé que mi vecino empezó a interactuar con su otro vecino, agachándose mientras el otro vecino insertaba su rabo a través del glory hole. Yo estaba fascinado con esa visión, medio en penumbra, apenas alumbrado por las ráfagas de luz del televisor. Cada una de las tres películas que estábamos viendo cada uno emitían gemidos y sonidos de placer que se entremezclaban en esa pequeña estancia despertando aún más el deseo. Mi vecino no dudó en saborear aquel capullo y a mí casi me estalla la cabeza al escuchar los chasquidos que hizo con esa espectacular mamada, al principio suave y de cadencia lenta, pero después mucho más enérgica e intensa precipitando al abismo del orgasmo al hombre que había asomado el rabo a través del agujerito.

Me consta que los juegos en un glory hole pueden ir hasta los límites que tú mismo dibujes. Si solamente quieres curiosear y ver cipotes o escenas de sexo explícito; si te mueres de ganas por acariciar un rabo y masturbarlo o sentir cómo te lo hacen a ti; si lo que prefieres es acercar tus labios, tus mejillas o tu nariz a un rabo; si quieres dar placer o disfrutar de una buena mamada; si prefieres introducir tu polla por el agujero dejando que tu vecino te demuestre su destreza con la lengua, los labios y el sexo oral; si quieres observar cómo otro tío derrama su leche o incluso si prefieres sentir en tu interior un rabo o disfrutar penetrando a otro tío; los hay que para lo uno o lo otro y ante el desconocimiento y el anonimato del vecino se ponen goma y los hay más atrevidos amantes del riesgo que prefieren hacerlo a pelo. En mi caso, una de las cosas que también me turban y preocupan un poco es precisamente esa, no saber si la persona que está al otro lado del agujero puede tener una infección sexual o no, quizá ese miedo me paraliza a veces y me hace pensármelo dos veces y ser prudente, porque aunque el deseo y el morbo me quieren empujar a transitar por un camino, la prudencia y el miedo me conducen por otro.

Pero a veces la experiencia en un glory hole se transforma en una espera infructuosa, pasa el tiempo y compruebas con cierta desilusión que quizás esa hora, ese momento del día, no es el más concurrido, y no encuentras un compañero de aventuras que llegue a la cabina de al lado. Así que también hay que estar preparado para esa pequeña frustración. Al menos puedes disfrutar de un buen pajote viendo porno, en un abanico amplio de canales que a veces recuerdan a las películas amateur de nuestros padres.
 
yo tampoco pero me da morbo probar
Yo he ido muchas veces a un sexshop y una a una sauna, si lo que quieres es chafardear pelis, juguetes y cualquier producto sexual el sexshop te vale, pero si lo que te apetece es ver sexo en vivo y en directo, probar o tener sexo, para mi lo mejor es una sauna, es verdad que en Bcn haycsexshops con zona cruising, con sus reservados, sus camastros y su cine, pero puestos a dar el paso hacia el sexo con otro me gusta más la sauna, hay habitaciones, te puedes duchar, zonas para relajarse, en fin, unacserie de comodidades que no tiene el sexshop y economicamente no son tan diferentes.
Otra cosa es que sea tu primera vez, entonces empezar por una sauna es demasiado, el sexshop es más light. Lo de ir acompañado, pues no sabria decirte, yo siempre he ido solo, pero si se tercia no me importaria ir acompañado.
 
Yo he ido muchas veces a un sexshop y una a una sauna, si lo que quieres es chafardear pelis, juguetes y cualquier producto sexual el sexshop te vale, pero si lo que te apetece es ver sexo en vivo y en directo, probar o tener sexo, para mi lo mejor es una sauna, es verdad que en Bcn haycsexshops con zona cruising, con sus reservados, sus camastros y su cine, pero puestos a dar el paso hacia el sexo con otro me gusta más la sauna, hay habitaciones, te puedes duchar, zonas para relajarse, en fin, unacserie de comodidades que no tiene el sexshop y economicamente no son tan diferentes.
Otra cosa es que sea tu primera vez, entonces empezar por una sauna es demasiado, el sexshop es más light. Lo de ir acompañado, pues no sabria decirte, yo siempre he ido solo, pero si se tercia no me importaria ir acompañado.
muchas gracias por la infooo
 
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