Reencuentro con Elena

Hola, buenas noches.

Ya sé que en origen el relato tenía tintes de realidad, pero no sé, yo creo que hace mucho que se desvió a un terreno más literario, no?

Saludos y gracias

Hotam
El autor, siempre ha mantenido que la historia está basada en su propia experiencia. Lógicamente la historia estará " adornada ", para que resulte más atractiva al lector. Pero creo que en esencia es bastante realista.
Personalmente, me parece mucho más "literario" el inicio del relato que este último tramo.
Las historias de la familia de Elena, con la forma de proceder de Noelia, Maribel etc... Son bastante surrealistas, aunque puede que fueran ciertas.
Lo que yo he definido en alguna ocasión como " vodevil ", se produce más bien en la primera mitad del relato.
 
Hola a todos.
Ya que éstos días no tendremos relato, se me ha ocurrido sondear vuestra opinión sobre las diferentes posibilidades que se podrían dar en el final de la historia.
Creéis que a día de hoy, Javi/Keranos tendrá pareja?.
Y si así fuera, quién podría ser la afortunada?
Entre las tres candidatas con más opciones: Abby, Elena y Ángela. Quien pensais que podría conquistar el corazón de nuestro héroe?.
Como no pierdo nada voy a hacer la apuesta más difícil ahora mismo: se queda con Elena
 
Un oftalmólogo nada puede hacer frente a la "maldición del pajillero" proclamada desde tiempos inmemoriales por los "científicos" católicos. Solo el Señor, en su infinita misericordia, puede apiadarse de nuestra viciosa alma. Yo he sido bendecido por el Señor, ya que pese a pajearme sin parar gracias a la inspiradora imagen de Abby, aún conservo la vista ¡Doy gracias al Señor! ... y a @Keranos también.
Yo no me confiaría.
Si usas gafas, ya es una señal 🤭🤭
 
Capítulo 889

Al día siguiente me desperté solo en la cama, aunque al poco apareció Abby con una toalla en el pelo y en pijama. Nos quedamos callados, mirándonos sin saber qué decir. Se notaba que ambos estábamos un poco cortados por lo repentino que surgió todo sin que hubiera mucho indicio de la atracción que nos demostramos tener la pasada noche, al menos yo no noté ese tipo de interés en ella.

-Buenos días -dije nervioso.
-Hola.
-Eh... Abby, yo...
-A ver... -dijo sentándose en la cama, cogiéndome las manos- Yo sé tú historia y entiendo que has sufrido mucho y no quieras tener nada con alguien, por eso me quería disculpar.
-Pero...
-Shhh -dijo poniendo su dedo en mis labios-. Déjame acabar. Me quería disculpar, porque ayer quizá me pasé, porque si bien es verdad que fuiste tú el que me besaste, yo fui la que te siguió. Me dejé llevar. No debería haberlo hecho, debería haberte parado. Javi, yo no quiero que sufras más. No me parece justo.
-Abby, no tienes que disculparte. Si te besé es porque no podía aguantarlo más. Últimamente te he empezado a ver de otra manera. Empezamos una bonita amistad hace unas semanas, pero... Me he dado cuenta de que me gustas mucho... No sé, has tenido unos gestos conmigo que me demuestran muchas cosas que llevaba tiempo sin ver, como lo de llevarme a ver a tus padres con lo que te cuesta hacerlo... Has hecho que empiece a sentir cosas por ti. Sé lo que eso significa. No ha sido una noche loca. Llevaba muchísimo sin sentirme así de bien con alguien. Se me olvida todo lo malo cuando estoy contigo. Y el tiempo que paso contigo se me hace muy corto, me gustaría pasar más tiempo junto a ti, disfruto mucho tu compañía.
-Javi, ¿me estás pidiendo salir? -dijo algo nerviosa y sonrojada.
-Eh... Bueno, si te parece bien, pues sí. Me gustaría verte más e intentar tener algo contigo. Ya conoces mi historia y cómo soy con estas cosas, pero te prometo que te voy a dar la mejor versión de mí mismo. Seré totalmente sincero. No quiero hacerte daño, porque eres una de las mejores personas que he conocido en mi vida y no te mereces nada malo. Eres un ángel.
Abby se quedó muy pillada, con sus ojos muy abiertos. Parecía muy nerviosa y como que quería decir algo, pero no terminaba de arrancar. Yo me puse bastante nervioso por miedo a que me rechazara.
-¿Abby?
-Claro que quiero estar contigo, Javi. Tú también me gustas de esta manera, pero es que tenía miedo, porque sé por todo lo que has pasado y no me quería arriesgar a decirte algo y que te pudiera recordar a cosas del pasado. No quiero verte mal.

Abracé a Abby con fuerza, devolviéndome ella el abrazo. Se lo di tan fuerte que hasta se la cayó la toalla de la cabeza, dejándome ver su cabello pelirrojo, más oscuro al estar mojado. Aun así, estaba preciosa, así al natural con su cara despejada de maquillaje.

Tras unos segundos mirándola a los ojos, me acerqué para besarla, fundiéndonos en un largo y sentido beso. No dijimos nada más, tan solo nos dimos varios besos, yéndome a la ducha después y pasando el resto del día juntos, comiendo juntos y estando muy apegados. Así empezamos Abby y yo nuestra relación.

Casi acabando ese domingo me fui a casa para preparar las cosas para una nueva semana y Ángela me llamó al móvil. Sabía de sobra que me lo iba a notar, pero no sabía si contarle lo que había pasado. No porque tuviera dudas o porque no quería que se enterase, pero es que estaba como asustadizo. No sabía muy bien por qué, pensando de primeras que se trataba porque las posibilidades de que Elena se enterara se volverían altas, pero al final no resultaba ser por eso.

Aun así, con ese miedo, por llamarlo de algún modo, le cogí la llamada, y tras preguntarme un poco cómo estaba, me preguntó de inmediato por cómo había ido la celebración de mi cumpleaños, sabiendo de sobra que también estábamos celebrando el de Abby. Le fui honesto, contándole que todo fue muy bien, a lo que ella me preguntó que si lo decía de verdad y fue entonces cuando le dije que demasiado bien.

Ángela no iba mal encaminada al entender que Abby y yo habíamos tenido sexo por lo que dijo después, alegrándose mucho por ello y de ver que había retomado ese tipo de interacción con otras personas, cosa que veía normal después de varios meses fuera y de no haberlo hecho con nadie desde entonces, siendo con ella la última con la que lo hice. Ángela se mostraba muy curiosa al preguntarme si había salido contento con ello, diciéndole yo que mucho, que no esperaba que la cosa fuera tan bien y que me vi sorprendido.

Ángela reía de manera muy alegre y tierna al oírme, preguntándome si pensaba que Abby y yo podríamos volver a vernos de esa manera. Titubeé un poco, pero al final le dije que sí. Y no me pude resistir al decirle que le había pedido salir. Ángela dio un grito tremendo de alegría, volviéndose después su voz más aguda, preguntándome si iba en serio. Iba a responderle, pero no me esperaba que me colgara, aunque fue para hacerme una videollamada.

Mi amiga estaba pletórica, siendo muy visible una vez la vi en la pantalla. Ella me decía que mirara bien a la cámara, dándome hasta vergüenza, pero volvió a dar un grito. Tan exaltada estaba, que su madre fue a su habitación para ver qué pasaba. Le dijo que nada, que todo estaba bien, que andaba hablando conmigo. La madre de Ángela se asomó para saludarme, dejándonos a su hija y a mí solos una vez lo hizo para que pudiéramos seguir hablando.

-¿Cómo ha sido? -preguntaba ella con mucha curiosidad.
-Pfff... Es que me da corte contarte esto, jajaja.
-Venga ya... Jajajaja.
-Pues es que es un cúmulo de cosas...
-Pues cuenta, tengo tiempo. ¿Tú no?
-Sí. Mira, han sido unas semanas en las que hemos estado viéndonos como amigos. Ella ha depositado mucha confianza en mí al contarme los problemas que tiene y ella también ha sabido escucharme. Le he contado toda mi historia desde que empecé con Elena hasta que he venido aquí.
-Al final lo has hecho.
-Sí. Ella me contaba cosas muy fuertes y pensaba que confiaba mucho en mí como para hacerlo. No me costó tanto como me imaginaba que podría hacerlo hablar con ella de estas cosas. Bueno, con ella o con cualquier otra persona. Con ella estoy muy cómodo en general.
-¿Y qué opina ella de todo?
-Ha sido siempre muy empática conmigo. Siempre ha tratado de entender mis posturas, mis decisiones... Hasta mis meteduras de pata, por muy gordas que fueran...
-Vaya... Esa chica vale oro por lo que veo.
-Vale mucho más.
-¿Y ha hecho algún comentario más de todo por lo que has pasado?
-Me ha dicho que he hecho algunas cosas bien y otras que las podría haber hecho mejor. También algunas que me podría haber ahorrado, pero en general, piensa que he estado bastante perdido y que el principal problema ha sido no hablar las cosas cuando debía haberlo hecho.
-¿Y qué piensas tú?
-Pues que lleva toda la razón del mundo.
-Me encanta que hayáis hablado de esto y que te sea tan franca.
-Y me dice las cosas de una manera muy cariñosa, para que no me entre bajón ni nada, ¿sabes?
-Porque le importas. Jo... Qué contenta estoy. ¿Me cuentas cómo ha sido el momento de pedirle salir?
-Empezó por la noche. Bueno, antes en realidad. Ayer pasamos prácticamente todo el día juntos. Comimos en un sitio, luego dimos un paseo, me llevó a donde descansan sus padres... Le cuesta mucho ir a ese sitio.
-Pobre...
-Me demostró mucho al llevarme allí. Ha ido muy pocas veces, porque siempre le vienen muchos recuerdos y se pone muy triste.
-Ay...
-Pero volvimos a su casa, para entregarnos los regalos, aunque antes de dárnoslos nos comimos una pequeña tarta de limón que hizo, que estaba de muerte.
-Jajajaja, te tiene bien cuidado por lo que veo. ¿Qué os habéis regalado?
-Pues ella me ha regalado un par de juegos para la consola. Como a ella también le gusta, hemos hablado mucho del tema. Ya te conté que jugamos juntos y tal.
-Sí.
-Pues me ha regalado dos juegos a los que le tengo ganas. Aunque el regalo que más me ha gustado ha sido cuando me ha llevado a conocer a sus padres, aunque me haya puesto mal cuerpo al verla tan triste como para llorar, pero me refiero al gesto en sí.
-Entiendo lo que me quieres decir. ¿Y qué le has regalado tú?
-Pues una consola con un par de juegos. De hecho, uno de ellos es de los que me ha regalado ella también.
-¡Anda! Te gusta a ti regalar consolas por lo que veo... Jajajaja.
-Buah, si hubieras visto cómo se puso...
-Le ha encantado, ¿no?
-Bueno, le ha costado aceptar el regalo.
-¿Sí?
-Sí. Ella es muy concienzuda con el dinero y le parecía demasiado excesivo como regalo, pero le he dicho que a mí no me importaba el tema del dinero.
-Vaya...
-Al final lo ha aceptado. Ayer no paraba de darme las gracias por ello. Luego por la noche nos pusimos guapos para ir a cenar fuera. Joder... No la había visto nunca arreglada.
-¿Cambia?
-Ella es guapa de por sí. Y atractiva, pero con el vestido que se puso, maquillada y peinada de otra manera... Me puse nervioso.
-Jajajajaja.
-Y eso que no llevaba un vestido provocativo, ¿sabes? Pero...
-Te entiendo.
-Fuimos a cenar al restaurante con vistas al que os llevé. ¿Te acuerdas?
-Claro. ¿Qué le pareció a ella?
-Fantástico, aunque un poco caro, pero le dije que un día es un día y al final se dejó llevar. La pobre no está acostumbrada a celebrar su cumpleaños por lo que me ha contado.
-Desde lo de sus padres, ¿no?
-Ajá. Creo que es también por eso por lo que le costó tanto aceptar el regalo. Pero bueno, al final cenamos y luego fuimos a un sitio a tomarnos algo. Estuvimos poco, tomándonos solo una. Aunque bailamos un poco, pero nos fuimos a uno más tranquilo.
-¿Por?
-Ella es muy tímida y le incomoda mucho los lugares donde hay tanta gente.
-Ya veo.
-No nos marchamos muy tarde. La acompañé a casa y cuando nos despedimos le di un beso. No me pude resistir.
-¿Y qué hizo ella?
-Pues arrastrarme dentro de su casa para liarnos y bueno...
-Genial entonces, ¿no?
-Sí, muy buen. Pero esta mañana se ha disculpado, porque piensa que ha hecho mal en dejarse llevar, porque a lo mejor juntarme con alguien así me trae malos recuerdos o algo y no quiere hacerme pasar por eso.
-Creo que te ha dicho eso por lo que ella experimenta con lo que le pasó. Pienso que, para ella, recordar es lo peor que puede hacer ahora mismo y me figuro que piensa que a ti te puede pasar igual.
-Puede ser. Yo le he dicho que no tiene que disculparse de nada y le he dicho que estoy muy cómodo con ella, que me gusta pasar tiempo a su lado, que me gustaría pasar más y que estoy empezando a sentir cosas por ella.
-Hala... ¿Todo eso? ¿Tú? Jajajaja.
-No te rías, cabrona... Jajajajaja.
-Con lo que te cuesta a ti abrirte de esa manera...
-Pues ya ves. Con ella no ha sido así.
-Eso es porque lo tienes muy claro.
-Pues sí. Lo tengo claro, pero también he tenido algunas dudas.
-Es normal con todo lo que te ha pasado y por haber dejado ir a una persona a la que querías tanto.
-Ya.
-Imagino que le contarás todo esto a los demás, ¿no?
-Claro. Pero quiero pensar cómo hacerlo. Te lo he contado a ti, porque ya sabes que te aprecio mucho. Y a los demás también, pero quiero hacer bien las cosas.
-¿Te da miedo de que Elena se entere?
-No sé, un poco.
-Yo creo que no deberías.
-Me gustaría que se enterara por mí, pero como acabamos regular, pues...
-Dale un poco de tiempo.
-Ya. Pensaré cómo lo hago.
-Oye, me gustaría ver a la chica que te ha hecho sentir estas cosas, que me has hablado de ella, pero aún no le he visto la cara.
-Si por mí fuera, te la habría presentado ya, o te hubiera mandado una foto, pero sé cómo es. Es algo que tengo que hablar con ella primero.
-Lo entiendo, tranquilo.
-Se lo diré, a ver cómo reacciona y a ver qué opina.
-Vale, pero tú sin prisa. No quiero que esto te pueda traer problemas.
-¿Problemas? No veo que algo así me vaya a dar problemas con ella.
-Vale, pues te dejo por aquí, ¿vale? Me ha alegrado mucho enterarme de esto, Javi. De verdad. Te mereces ser feliz y por lo que me cuentas, esta chica es capaz de conseguirlo.
-Muchas gracias, Ángela.​
 
Por qué le da miedo que Elena se entere? Se lo quiere contar él? Pero vamos a ver, Elena no está en tu vida, ni eres la única persona en la vida de Elena. Tú haces lo que quieres y ella hará lo que ella quiera, que parece que también le tienes que pedir permiso.

Gracias por volver Keranos.
 
Hola, quería pediros perdón por estar tan desaparecido durante las fiestas, que no pasé para deciros unas palabras como siempre trato de hacer, pero es que entre las fiestas, las salidas y las entradas, que me puse un poco malo y... ahora que hay una nueva inquilina en casa, pues no he tenido tiempo para nada.

De hecho, por esto último ahora tengo menos tiempo aún, porque requiere mucho de mi atención y necesita mucho muchos mimos. Tenía pensado acabar de escribir el relato en verano y la cosa se me ha alargado hasta ahora, que tenía pensado acabarlo en Navidad, pero con la pequeña es que no puedo ponerme, porque no deja que me concentre. Hasta me costó ayer dejar preparado el capítulo de hoy...

Digo esto, por si algún día veis que no hay capítulo o que si llegado a cierto punto, pasan unos pocos días sin que suba nada. A ver si me puedo poner para rematar la cosa cuando esté durmiendo tranquilamente.

Y para aclarar dudas... No, no es un bebé. Es una pequeña gata adoptada, pero vamos, que casi requiere la misma atención, porque todo es muy nuevo para ella y se tiene que adaptar y demás.
 
Para Javi, Elena es como Messi para el Barcelona. Ya no tienen nada en común, Pero si él manifestara abiertamente que quiere volver, tendría sin duda la puerta abierta. Ya no podría ser como antes, pero de alguna forma lo aceptarían.
Elena siempre tendrá un sitio en el staff técnico de Javier 🤭🤭
 

📢 Webcam con más espectadores ahora 🔥

Atrás
Top Abajo