S1978
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Espectacular
S1978
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untrio
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Esperando la narración
Pues yo no he dado con ninguna. Lo he probado pero después de insistir mucho y ponerme cabezón
Pues cuenta con pelos y señales
A la mía le gusta de vez en cuando, le encanta que se la meta poco a poco y haciendo círculos. Dice que siente diferente que por el coño, una mezcla de dolor que gusta y mucho morbo.
Antes me pedía que me corriera dentro pero ahora me dice que no porque luego le va saliendo y la molesta.
Antes me pedía que me corriera dentro pero ahora me dice que no porque luego le va saliendo y la molesta.
Gringo1980
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Sí y sí
Gringo1980
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Sanitaria
Gringo1980
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No, dentro del culo no le gusta la corrida. Dice que no es como en el coño, que al rato va saliendo la corrida. En el culo dice que se le queda dentro y la va perdiendo a lo mejor poco a poco y no le agrada tanto.
Apuré hasta el final y un par de segundos antes de correrme la saqué de su ojete y me la meneé dejándole la corrida sobre el ojete y las nalgas.
La mía dice exactamente lo mismo…
esponfebierzo
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Cuando yo tenía 23 estaba con una chica de 17 , parecía mayor y era bastante zorrita , me contó que hizo su primera mamada con 14 , era un espectáculo de cuerpo y de cara , niña de papá mimada y ultra pija de gastos carísimos , cuando yo la pille ya no era virgen obvio pero eso sí su culo aún lo era , a día de hoy aún recuerdo como en la habitación de sus padres con un poco de lubricante que usaban ellos ( a su padre le molaba el Strapon pero eso lo contaré otro día ) le estrené el culo tras convencerla , me corrí dentro después de bombearle el ojete un minuto o menos , más de 20 años después aún recuerdo como le salía todo el semen del culito mientras le decía que la quería jajajajajaja, ahora ni me habla y me odia pero cada vez que la veo me viene a la cabeza que yo fui el primero en estrenarle ese culo maravilloso
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Stonehenge
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Llevaba todo el fin de semana con ganas de darle por el chiquitín, la verdad. No lo hacemos tan a menudo como me gustaría, aunque yo siempre pruebo y tanteo y juego con sus nalgas y su ojete con los dedos, porque reconozco que su culo me hace volar la cabeza, y encima ella no hace nada por no provocarme. Se pasea desnuda por casa, se me frota en cuanto me descuido, y me suele obsequiar con "calvos" mostrando el culo a la menor oportunidad.
Ayer llegó de currar y la dejé ducharse, antes de que bajáramos al local que tenemos junto a casa y que utilizamos como sala de juegos y refugio para estar más a nuestro aire, porque es más grande que nuestro piso.
Hay que admitir que venía con ganas, porque enseguida con unos besos y unos arrumacos se bajó con todo a comerme la polla. Lo hace de puta madre, tiene un boca glotona y unos labios carnosos y le gusta mamar cosa mala, creo que eso sí lo hacemos a diario. Me gusta mucho porque me aprieta los huevos despacito, y aunque no se la llega a tragar entera si se mete un buen trozo, y mueve con mucho vicio la lengua cuando sube y baja por la polla, y siempre me chupa muy rico la cabeza, lamiéndola bien con la punta de la lengua por toda esa zona donde se ensancha que no sé cómo se llama, como si fuera un caramelo o un helado.
Todavía estaba vestida y todo. La dejé chupar un buen rato y decirme algunas guarradas (yo no suelo hablar durante el sexo, me da como corte, aunque a veces sí me he dejado llevar), pero yo tenía entre ceja y ceja su culazo, si que la levanté y la lllevé delante mía del sofá a la cama que tenemos al fondo del local, que está hecha una pena pero si hablase contaría auténticas maravillas, y la fui desnudando paso a paso hasta dejarla en pelotas, y la empecé a magrear con ganas, pellizcando sus tetas desde atrás y frotando mi polla contra su culo, besando su cuello, mordisqueando su oreja, y empujándola despacio pasito a pasito hasta la cama.
Allí la puse de pie, inclinada apoyada con las manos en el colchón, las piernas bien abiertas, y me arrodillé para comerle el coño y el culo despacio pero con algo de ansias, lo reconozco. Yo creo que ella ya se imaginaba como iba a ir la cosa, porque meneaba las caderas y casi ronroneaba como una gatita.
Un poco de lubricante y un dedo juguetón hicieron la labor de preparar el terreno, y está vez gracias a Dios ella no me dijo nada ni me frenó las intenciones como el viernes, así que me unté bien la polla con el durex transparente y se la coloqué justo en centro de su culo.
Creo que ya he dicho que lo tiene super estrecho. Tengo que ir con cuidado, porque si le duele demasiado me corta las alas rápido, así que hay que cruzar los dedos y contenerse un poco, porque si por mi fuera se la endiñaba a saco. Así que empujo siempre despacio, pero firme, agarrando la polla, si empujo sin ganas o con mucha suavidad le resbala hacia arriba o hacia su coño, y no quería eso tampoco. Hay que ir con convicción, pero sin arrebatos.
Entrar entró bien la cabeza, fue hacer un poco de fuerza y su culo se la tragó en un momento, pero como ella me dijo un "ay papiiii" así en voz alta, pues me quedé quieto. Después de cuatro años y de haberle sido yo el que le desvirgó el culete, sé leer las señales como si la hubiese parido, y había que dejarla un poco a su aire que se fuera acomodando y dejando ir. Le acaricié la espalda, aunque intentaba no moverme nada nada, y después de un ratito, no sé, medio minuto? noté que se relajaba y me atreví a empujar un poco más.
No fue ni muy fácil ni muy difícil está vez, pero puede meterla y sacarla sin prisas, dejando que ella fuese marcándome las pausas con suspiros o con algún gemidito más largo, y relativamente pronto me pude ir yo aliviando y ajustando a mi placer, gozando como un puto berraco de lo caliente y apretado y a la vez suave que estaba este culo precioso que gasta mi putita.
Ella lo disfrutó bastante también, y me dijo algunas cositas guarras, y le pude dar bastante duro (para lo que acostumbramos), me puede desahogar bastante. Me corrí dentro, algo que tampoco consigo siempre porque a veces me frena antes y me dice que no aguanta más, está vez sí que conseguir descargar mis huevos y llenarle el culo bien de lefa caliente. No llegó a tener un orgasmo anal brutal de los suyos, pero me dijo que le había gustado mucho.
No manchó mi polla (a veces sí), pero me encantó que los dos nos sentamos en el sofá a hacernos mimos y llevé el olor de su culo en mi polla hasta que subimos a casa a ducharnos, y un hormigueo rico como si la tuviese irritada, me encanta saber que es por haberla sodomizado a gusto. Me habría encantado que me la limpiase con la boca, pero eso no lo hace.
Y fin.