Mi madre

Ahí la tenía frente a mí prácticamente desnuda, solo sus bragas blancas tapaban la última parte de su cuerpo que iba a descubrir, quizás la mas sagrada y la más íntima pero a la vez la más excitante su culo y su coño, me volví a sentar en el sofá quería verlo todo cerca, no quería ser yo quien se las bajara quería que fuera ella que se las fuera bajando poco a poco, quería hacerla sentir débil y humillada.
Tenía su coño frente a mí aunque su bragas no eran transparentes sí se notaba algo oscuro en su interior sin duda alguna tenía una tupida capa de pelo alrededor de él, tenía las piernas cerradas por lo tanto no se podía intuir mucho más.
La ordene que se fuera bajando las bragas poco a poco, pasaron unos segundos de tensa espera, se las cogió con ambas manos desde su cadera y comenzó a hacerlo, no había sido mucho el trayecto cuando se empezaron a ver los primeros pelos que le asomaban poco más o menos por debajo de su ombligo, continuó bajándoselas, cuanto más se las bajaba más se inclinaba, poco a poco se fueron deslizando hasta llegar a la mitad de sus muslos en ese momento su cara y la mía estaban prácticamente frente a frente la dije que parara que era suficiente, cuando volvió a colocarse totalmente erguida pude comprobar una estampa que jamás olvidaré, tenía a mi madre de pie totalmente desnuda bueno con sus bragas a medio camino en sus muslos, me llamó la atencion que a pesar de ser blancas estaban limpias, sin duda era una prueba de que su nivel de excitación era nulo.
No quería perderme ningún detalle así que alcé mi mirada y comencé a escanear todo su cuerpo, desde su cara, sus tetas y por supuesto su coño, un matojo de pelos que apenas dejaban intuir lo que escondian, y digo intuir porque en la parte más baja de su coño se podían apreciar que intentaban sobresalir dos labios carnosos y grandes.
Solo faltaba acabar la faena y poder ver la parte de su cuerpo con la que mas pajas me había echo, su CULO, la pedi que se diera la vuelta, cuando lo hizo me quedé como hipnotizado, frente a mí estaba esa partecdecsu cuerpo totalmente desnudo y joder puedo decir que era mucho más hermoso y tentador de lo que nunca imaginé, no pude contenerme y puse mis manos sobre él, mi madre hizo un gesto como de estremecimiento pero seguí pasando mis manos arriba y abajo mientras me preguntaba si era el tercero en tocarselo o habria habido algun otro, mis dos dedos gordos se acercaban cada vez más y más a su raja, de vez en cuando la abría un poco, en uno de esos movimientos pude ver la entrada de su ano perfectamente, un poco mas abajo tambien aprecie sus labios semiabiertos, lo que se avecinaba los siguientes días prometía y mucho.
Estaba a punto de reventar así que decidí ponerme en pie frente a ella, me bajé la cremallera del pantalón, me desabroché el cinto y me quité el botón dejándomelos caer, después me baje los calzoncillos hasta la altura de la rodilla, mi polla salió como si tuviera un muelle, miré la cara de mi madre y su expresión ya no era de temor ni de miedo se acercaba más a la de terror pero yo tenía otra idea para ese día, me agarré la polla con una mano y me empecé a pajearme, ella apartó la mirada no quería ver, no tardé mucho en correrme, apunté hacia su coño llenándolo de lefa , fueron cuatro o cinco chorros, una corrida bestial.
Yo - Hoy hemos terminado pero abra mas, te lo digo para que estes limpia y aseada.
Me subi los calzoncillos y los pantalones y me marche.



CONTINUARA
 

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Ahí la tenía frente a mí prácticamente desnuda, solo sus bragas blancas tapaban la última parte de su cuerpo que iba a descubrir, quizás la mas sagrada y la más íntima pero a la vez la más excitante su culo y su coño, me volví a sentar en el sofá quería verlo todo cerca, no quería ser yo quien se las bajara quería que fuera ella que se las fuera bajando poco a poco, quería hacerla sentir débil y humillada.
Tenía su coño frente a mí aunque su bragas no eran transparentes sí se notaba algo oscuro en su interior sin duda alguna tenía una tupida capa de pelo alrededor de él, tenía las piernas cerradas por lo tanto no se podía intuir mucho más.
La ordene que se fuera bajando las bragas poco a poco, pasaron unos segundos de tensa espera, se las cogió con ambas manos desde su cadera y comenzó a hacerlo, no había sido mucho el trayecto cuando se empezaron a ver los primeros pelos que le asomaban poco más o menos por debajo de su ombligo, continuó bajándoselas, cuanto más se las bajaba más se inclinaba, poco a poco se fueron deslizando hasta llegar a la mitad de sus muslos en ese momento su cara y la mía estaban prácticamente frente a frente la dije que parara que era suficiente, cuando volvió a colocarse totalmente erguida pude comprobar una estampa que jamás olvidaré, tenía a mi madre de pie totalmente desnuda bueno con sus bragas a medio camino en sus muslos, me llamó la atencion que a pesar de ser blancas estaban limpias, sin duda era una prueba de que su nivel de excitación era nulo.
No quería perderme ningún detalle así que alcé mi mirada y comencé a escanear todo su cuerpo, desde su cara, sus tetas y por supuesto su coño, un matojo de pelos que apenas dejaban intuir lo que escondian, y digo intuir porque en la parte más baja de su coño se podían apreciar que intentaban sobresalir dos labios carnosos y grandes.
Solo faltaba acabar la faena y poder ver la parte de su cuerpo con la que mas pajas me había echo, su CULO, la pedi que se diera la vuelta, cuando lo hizo me quedé como hipnotizado, frente a mí estaba esa partecdecsu cuerpo totalmente desnudo y joder puedo decir que era mucho más hermoso y tentador de lo que nunca imaginé, no pude contenerme y puse mis manos sobre él, mi madre hizo un gesto como de estremecimiento pero seguí pasando mis manos arriba y abajo mientras me preguntaba si era el tercero en tocarselo o habria habido algun otro, mis dos dedos gordos se acercaban cada vez más y más a su raja, de vez en cuando la abría un poco, en uno de esos movimientos pude ver la entrada de su ano perfectamente, un poco mas abajo tambien aprecie sus labios semiabiertos, lo que se avecinaba los siguientes días prometía y mucho.
Estaba a punto de reventar así que decidí ponerme en pie frente a ella, me bajé la cremallera del pantalón, me desabroché el cinto y me quité el botón dejándomelos caer, después me baje los calzoncillos hasta la altura de la rodilla, mi polla salió como si tuviera un muelle, miré la cara de mi madre y su expresión ya no era de temor ni de miedo se acercaba más a la de terror pero yo tenía otra idea para ese día, me agarré la polla con una mano y me empecé a pajearme, ella apartó la mirada no quería ver, no tardé mucho en correrme, apunté hacia su coño llenándolo de lefa , fueron cuatro o cinco chorros, una corrida bestial.
Yo - Hoy hemos terminado pero abra mas, te lo digo para que estes limpia y aseada.
Me subi los calzoncillos y los pantalones y me marche.



CONTINUARA
Joder que ganas tengo de que se la metas ya!! Va a gozar....
Ahí la tenía frente a mí prácticamente desnuda, solo sus bragas blancas tapaban la última parte de su cuerpo que iba a descubrir, quizás la mas sagrada y la más íntima pero a la vez la más excitante su culo y su coño, me volví a sentar en el sofá quería verlo todo cerca, no quería ser yo quien se las bajara quería que fuera ella que se las fuera bajando poco a poco, quería hacerla sentir débil y humillada.
Tenía su coño frente a mí aunque su bragas no eran transparentes sí se notaba algo oscuro en su interior sin duda alguna tenía una tupida capa de pelo alrededor de él, tenía las piernas cerradas por lo tanto no se podía intuir mucho más.
La ordene que se fuera bajando las bragas poco a poco, pasaron unos segundos de tensa espera, se las cogió con ambas manos desde su cadera y comenzó a hacerlo, no había sido mucho el trayecto cuando se empezaron a ver los primeros pelos que le asomaban poco más o menos por debajo de su ombligo, continuó bajándoselas, cuanto más se las bajaba más se inclinaba, poco a poco se fueron deslizando hasta llegar a la mitad de sus muslos en ese momento su cara y la mía estaban prácticamente frente a frente la dije que parara que era suficiente, cuando volvió a colocarse totalmente erguida pude comprobar una estampa que jamás olvidaré, tenía a mi madre de pie totalmente desnuda bueno con sus bragas a medio camino en sus muslos, me llamó la atencion que a pesar de ser blancas estaban limpias, sin duda era una prueba de que su nivel de excitación era nulo.
No quería perderme ningún detalle así que alcé mi mirada y comencé a escanear todo su cuerpo, desde su cara, sus tetas y por supuesto su coño, un matojo de pelos que apenas dejaban intuir lo que escondian, y digo intuir porque en la parte más baja de su coño se podían apreciar que intentaban sobresalir dos labios carnosos y grandes.
Solo faltaba acabar la faena y poder ver la parte de su cuerpo con la que mas pajas me había echo, su CULO, la pedi que se diera la vuelta, cuando lo hizo me quedé como hipnotizado, frente a mí estaba esa partecdecsu cuerpo totalmente desnudo y joder puedo decir que era mucho más hermoso y tentador de lo que nunca imaginé, no pude contenerme y puse mis manos sobre él, mi madre hizo un gesto como de estremecimiento pero seguí pasando mis manos arriba y abajo mientras me preguntaba si era el tercero en tocarselo o habria habido algun otro, mis dos dedos gordos se acercaban cada vez más y más a su raja, de vez en cuando la abría un poco, en uno de esos movimientos pude ver la entrada de su ano perfectamente, un poco mas abajo tambien aprecie sus labios semiabiertos, lo que se avecinaba los siguientes días prometía y mucho.
Estaba a punto de reventar así que decidí ponerme en pie frente a ella, me bajé la cremallera del pantalón, me desabroché el cinto y me quité el botón dejándomelos caer, después me baje los calzoncillos hasta la altura de la rodilla, mi polla salió como si tuviera un muelle, miré la cara de mi madre y su expresión ya no era de temor ni de miedo se acercaba más a la de terror pero yo tenía otra idea para ese día, me agarré la polla con una mano y me empecé a pajearme, ella apartó la mirada no quería ver, no tardé mucho en correrme, apunté hacia su coño llenándolo de lefa , fueron cuatro o cinco chorros, una corrida bestial.
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Ahí la tenía frente a mí prácticamente desnuda, solo sus bragas blancas tapaban la última parte de su cuerpo que iba a descubrir, quizás la mas sagrada y la más íntima pero a la vez la más excitante su culo y su coño, me volví a sentar en el sofá quería verlo todo cerca, no quería ser yo quien se las bajara quería que fuera ella que se las fuera bajando poco a poco, quería hacerla sentir débil y humillada.
Tenía su coño frente a mí aunque su bragas no eran transparentes sí se notaba algo oscuro en su interior sin duda alguna tenía una tupida capa de pelo alrededor de él, tenía las piernas cerradas por lo tanto no se podía intuir mucho más.
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Estaba a punto de reventar así que decidí ponerme en pie frente a ella, me bajé la cremallera del pantalón, me desabroché el cinto y me quité el botón dejándomelos caer, después me baje los calzoncillos hasta la altura de la rodilla, mi polla salió como si tuviera un muelle, miré la cara de mi madre y su expresión ya no era de temor ni de miedo se acercaba más a la de terror pero yo tenía otra idea para ese día, me agarré la polla con una mano y me empecé a pajearme, ella apartó la mirada no quería ver, no tardé mucho en correrme, apunté hacia su coño llenándolo de lefa , fueron cuatro o cinco chorros, una corrida bestial.
Yo - Hoy hemos terminado pero abra mas, te lo digo para que estes limpia y aseada.
Me subi los calzoncillos y los pantalones y me marche.



CONTINUARA
Al final a ella le gustará .. no tardes mucho en seguir contando.....
 
Wov, tremendo morbo, sabes si ella después de todo volvió a tener algo con el " amigo " de tu papá ?.
 
Yo tuve una adolescencia bastante excitante a cuenta de una pillada a mi madre, eso marcaria mi futuro a la hora de conocer a la que es hoy mi esposa.
Lo situacion ocurrio entre 1982 y el año siguiente. Mi madre por aquella epoca tenia 39 años, mujer de estatura media, buenas piernas y buenas tetas, la tipica mujer de antes, ama de su casa, criada en un pueblo pequeño de Castilla viniendo al norte a trabajar en una casa de chacha, hasta que conocio a mi padre, se casaron y dejo de trabajar.
Por aquel entonces yo tenia 15 años y siempre vi a mi madre como una señora de buen ver, y porque no decirlo apetecible, cuando estaba solo me gustaba revisar en sus cajones de los sujetadores y sus bragas, (como os imaginareis nada parecido a lo que usan ahora), a veces incluso me ponia alguna de sus bragas y luego las guardaba otra vez, con la idea de que cuando se las pusiera sentiria mi polla en su coño, luego me hacia una buena paja y a la calle.
Siempre vestia con faldas o vestidos, para estar en casa tenia sus batas por debajo de las rodillas, cuando se subia a alguna banqueta a coger algo de alguna estanteria mi mirada se perdia en su figura, podia apreciar la forma de su culo e incluso cuando estiraba algun brazo y se la levntaba la bata ver sus piernas hasta empezar sus muslos, despues de comer siempre limpiaba el suelo de la cocina como solian hacer las mujeres de antes, arrodilladas y pasando un trapo humedo que escurrian en un cubo de agua para limpiarlos, como teniamos la tele en la cocina muchas veces me quedaba a verla esperando a que empezara el fregado. Ella empezaba por la zona de la tele y de espaldas iba acercandose hasta el final de la cocina que era donde estaba yo, ponia el cubo en el suelo y luego se arrodillaba para empezar la labor, cuando se agachaba para pasar el trato se inclinaba hacia delante y podia contemplar sus muslos abiertos, por mas que lo intentaba nunca llegaba a ver sus bragas y agacharme para verselas me daba miedo por si me pillaba, ver esas piernas y su culo en pompa me ponian la polla para estallar, lo unico que podia hacer era irme al baño y hacerme una buena paja.

continuara......
No sé, yo voy muchas veces desnuda por casa y no se me había ocurrido pensar cosas así
 
No sé, yo voy muchas veces desnuda por casa y no se me había ocurrido pensar cosas así
Hola, no sé si tendrás hijos ni de que edad pero te aseguro que si son o han sido adolescentes al principio les dará reparo por ser su madre pero te aseguro que tarde a temprano les aparecen las fantasías lujuriosas, ten en cuenta además que podria ser la primera vez que ven a una mujer con poca ropa o en ropa interior, vamos todo un referente, no lo dudes.
 
Hola, no sé si tendrás hijos ni de que edad pero te aseguro que si son o han sido adolescentes al principio les dará reparo por ser su madre pero te aseguro que tarde a temprano les aparecen las fantasías lujuriosas, ten en cuenta además que podria ser la primera vez que ven a una mujer con poca ropa o en ropa interior, vamos todo un referente, no lo dudes.
Tengo una hija de 9 meses, aunque mí padre me ha visto muchas veces desnuda
 
No sé, yo voy muchas veces desnuda por casa y no se me había ocurrido pensar cosas así

Sin llegar a los extremos de este relato (que aunque morboso y apasionante a veces se me hace un poco perturbador), forma parte del desarrollo sexual satisfacer una pequeña parte de tu curiosidad con tu madre, que es muchas veces la única mujer que has visto desnuda, y a ciertas edades una mujer es una mujer, aunque sea tu madre... luego eso desaparece (a medida que maduras y conoces mujeres), y se convierte en tu madre, con la que nunca se te ocurriría ni pensar (valga redundancia) en tener fantasías. Pero vamos, que ocultamente siempre hay un puntito de eso...
 
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