Pienso igual que tu,
A mi también me gusta o no me importa que se sepa que soy "cornudo" pero hasta ahora solo se sabe o intuye que lo soy en los sitios donde he estado con mi esposa y nuestro compañero y lógicamente no nos conocen. Momento claros por ejemplo; nos citamos en un punto en la calle y llevas gente cerca que nos ha visto besarnos a mi esposa y a mi, nos encontramos con nuestro compañero y tras darme la mano para saludarme, el y mi esposa se funden en un beso interminable y a partir de ahí ya van ellos de la mano o de la cintura de ella como si fueran ellos la pareja y yo un buen amigo.
También en el mismo hotel donde nos alojamos nos miran un poco extrañados y claro... los comentarios entre los presentes en voz baja
El decirlo en un entorno cercano a dia de hoy.....ni se me ocurrirá!!! y a mi mujer ni siquiera se le pasaría por la cabeza
HAY DEMASIADOS PERJUICIOS!!!
Lo que si dejo caer mucho en mi entorno es que las parejas que viven así son más felices que la mayoría y el sexo también mucho mejor, que la incomprensión por parte del resto una vez se ha enterado ese entorno y el familiar hace que se tambaleen y puedan romper. Lo cuento desde mi visión de "corneador, que lo fui" a unos poquitos, a los de mayor confianza y que es una posición que no está mal vista, almenos entre hombres. El resto, si sale la conversación les digo que es desde mi punto de vista personal
Mira, eso que comentas de ser conocidos en un sitio, en un hotel....es lo más morboso.
Es algo que mi mujer y yo practicamos mucho en otros tiempos, cuando éramos más jóvenes.
Ella iba en aquel tiempo a cierto hotelito, a una distancia prudencial de nuestra ciudad, al que solía acudir con sus "amigos" (o folladores, para hablar claro)
Ella ya era conocida allí, claro, de tanto ir, y cuando fuimos juntos por primera vez me hice el tonto y comenté en voz alta ante el recepcionista...."así que es aquí donde te alojas cuando vienes por trabajo".
Y claro, ver la sonrisa irónica del tipo fue una cosa.....en fin, difícil de explicar para quien no disfruta de esto ni lo entiende. Lógicamente, no tardó nada en correrse la voz entre el resto de empleados a juzgar por la manera en que me miraban.
Ella siguió yendo por allí con sus "amigos" y una vez más fuimos juntos.....antes de ir acompañados por uno de ellos al que ya conocían, lógicamente, de haber estado con ella.
En fin, que hicimos todo lo posible por que se notara, por si cabía alguna duda, de que el marido era yo y el otro el amante. Y que ellos subían solos a la habitación, por ejemplo, y él o ella me decían delante de la recepción que me fuera "a dar una vuelta" y que los esperara en el bar de al lado.
Y luego, el colmo de la humillación, a la hora de pagar la cuenta, pagar yo las dos habitaciones mientras ellos se abrazaban delante de mí y de los empleados del mostrador. A veces era una mujer la que nos atendía y no sé si su mirada era de conmiseración hacia mí, de admiración hacia ella, de respeto hacia el corneador, o simplemente de asombro ante la situación..ja, ja, ja..... aunque en un hotel supongo que están acostumbrados a ver de todo.
Claro que esto no lo puedes hacer ante todo el mundo, pero por eso digo que sería maravilloso que así fuera porque es una sensación maravillosa sentirse cornudo y que otros lo sepan y se sonrían por lo bajini a tu costa. Claro que....si fuera lo habitual tampoco tendría gracia, ¿No,?