Reencuentro con Elena

Que yo recuerde, cuando Javi estaba con Elena, Ángela había desaparecido y ahora no creo que esté haciendo nada. Si está celosa Elena, es su problema.
 
Angela podrá ser muy bella por dentro y por fuera, pero no podemos negar los datos, y es que Elena tiene algo de razón en desconfiar de ella por justamente haber querido dañar su relación y después no haberle importado los cuernos de la otra novia de Javi.

Simplemente es ponernos en su lugar y ver que nuestra novia se siga viendo con un tipo de iguales características, y te diga que lo aceptes. Es difícil, a que si?
Pero vamos a ver, Willy Fogg.
Te podría molestar si tú novia hace algo que no debe hacer con ese amigo, pero es que el no está haciendo nada con Ángela 🤷
 
Capítulo 843

-Javi, ¿qué ha pasado? He estado todo el día fuera y me ha llamado varias veces Irene, pero no me he dado cuenta hasta tarde. Me ha contado un poco... ¿Cómo estás?
-Pues... Te lo puedes imaginar.
-¿Enfadado?
-Es una mezcla extraña entre enfado y tristeza.
-¿Tristeza?
-Sí.
-Em... Si estás triste imagino que la cosa está peor de lo que pensaba.
-Pues sí. No sé si Irene te habrá contado...
-No me ha contado mucho, lo justo para decirme que la conversación que habéis tenido tú y Elena ha salido mal. Si es que acabo de hablar con ella. Me ha pedido que te llamara cuanto antes, por eso no hemos hablado casi nada.
-Pues sí, ha salido mal. Muy mal de hecho.
-¿Por qué? -decía con pena.
-No ha querido que probemos la ayuda que yo pensaba que nos vendría bien.
-No me digas...
-Sí. Piensa que no necesitamos eso.
-¿Entonces? ¿Ha propuesto ella algo?
-Sí. Y no me ha gustado nada. De hecho, no he cedido, ni voy a ceder. Eso lo tengo clarísimo.
-¿Pero qué te ha dicho?
-Me ha dicho que si quiero que ella y yo nos sigamos viendo, que te tengo que sacar de mi vida.
-¿A mí? -preguntaba impresionada.
-Sí. A ti.
-¿Por qué?
-Pues lo de siempre, piensa que tú buscas algo más que una amistad en mí y cree que si engañé a Valentina contigo, pues que va a pasar lo mismo si decimos de volver a intentarlo al volver a ser una pareja.
-Pero eso no es así.
-Estoy harto de decírselo. Ya le he expuesto las razones de por qué hice aquello en su día y por qué no lo voy a hacer esta vez.
-Joder, cómo está el patio...
-Me lo ha soltado así tan de sopetón que me he quedado un poco... Y ella se ha ido. He estado pensando unos minutos, tratando de buscar una explicación a todo lo que estaba pasando, porque la actitud que ha tenido cuando ha venido ha sido una mierda. Me ha llegado a hacer dudar de que todo esto de la terapia era una buena idea, pero es que lo es. La he llamado al poco de irse y hemos discutido. Nos hemos echado muchas cosas en cara, muchos reproches y me ha vuelto a mencionar que tú eres el problema, poniéndome otra vez el ultimátum. Y le he dicho que no, que el problema son sus celos, cosa que podemos tratar con terapia.
-¿Y por eso estás triste?
-Que no quiera que vayamos a terapia es una consecuencia de lo que me pone triste.
-No te sigo.
-Lo que me entristece es ver que ella no tiene interés en mí. O muy poco. Me he parado a pensar y me he dado cuenta de que casi siempre era yo el que la buscaba para que tuviéramos contacto. Otra cosa ha sido recordar las conversaciones que hemos tenido. Sobre todo al principio, que yo siempre le preguntaba cómo le iba en el trabajo y demás y ella no me preguntaba a mí. Y si lo hacía fue mucho después de las primeras llamadas y tal.
-Entiendo.
-Ha habido más detalles, como alguna vez que otra que cuando estábamos con los amigos, no nos sentábamos juntos, o cuando paseábamos con ellos por la calle, íbamos muy separados, o con otra pareja entre ella y yo. No sé, son pequeñas cosas que van sumando y sumando...
-Ya, sé lo que me quieres decir.
-Y la verdad es que la quiero. La he querido como no he querido a nadie en mi vida antes, pero aún tengo el suficiente amor propio para darme cuenta de que no quiero estar con una persona que no me quiere, porque ella no me quiere. Me lo ha estado demostrando todas estas semanas que nos hemos estado viendo después de que me dejara. Y si lo hace, pues me quiere mal.
-Pero entonces, ¿las veces que habéis estado bien?
-Lo he pensado también. Se me ha ocurrido que es por nostalgia, o también porque algo de ganas de que volviéramos sí que tenía, pero claramente sus celos las han matado. También puede ser que por llevarme tan bien con su prima Paula se haya ablandado por momentos, pero qué va...
-Pues vaya...
-He estado hablando con Irene y al contarle todo esto se ha puesto como nerviosa.
-¿Por qué?
-Creo que le ha dado miedo ver que estoy tirando la toalla.
-Ahora después la llamo para hablar con ella.
-También han venido Sofía y Hugo por casa. Estaban por aquí y por lo visto Irene los ha llamado para contarle lo que ha pasado y tal. He tenido la misma conversación con ellos.
-También la llamaré a ella. Creo que les vendrá bien charlar un poco para que lo suelten también, porque te aseguro que ellas también tienen que estar pasándolo mal.
-¿Y tú?
-Pues también.
-¿Qué piensas de todo lo que está pasando?
-Yo, es que...
-¿Qué pasa?
-Es que no te quiero dar mi opinión por si te da por pensar que Elena lleva razón o algo así.
-No voy a dejarme llevar por las tonterías que ha dicho por sus celos. Cuéntame.
-Es que, Irene y Sofía...
-Ángela, te estoy pidiendo tu opinión. No la de Irene, o la de Sofía.
-Pienso que Elena tiene un comportamiento bastante tóxico. Creo que está siendo egoísta y que te malquiere, como has dicho tú.
-Vale. ¿Algo más?
-Pues no mucho...
-¿Qué harías tú si estuvieras en mi lugar?
-Pues no seguiría intentándolo. Creo que has hecho lo que has podido para que saliera bien y ella no lo está teniendo en cuenta. Yo creo que lo has hecho bien en general, pero se ve que para ella no es suficiente. Pienso que te mereces ser tratado mejor de lo que ella lo ha hecho hasta ahora, sobre todo con todo lo que me estás diciendo que te ha dicho en esta última conversación que habéis tenido. Es que no te quería decir todo esto, porque parece que le estoy dando la razón a Elena con eso de que busco algo más que una amistad en ti, como si al decir esto te estuviera persuadiendo para que no lo intentes más con ella y yo pueda meter mano, ¿sabes?
-Pero yo sé que no es así. Sé que nosotros somos amigos y hasta ahí, ¿verdad?
-Claro. Ya sabes que yo no estoy mucho para parejas después de lo que me han hecho, aunque ya haya pasado un tiempo y haya tenido algo de tonteo también, pero no busco eso en ti, especialmente cuando has andado tan enamorado de alguien. Es verdad que lo hemos pasado bien al reencontrarnos, pero no ha sido como para llegar a ese punto.
-Bien. Es justo lo que pensaba.
-Javi, me encantaría que todo fuera de otra forma y que Elena estuviera más abierta a todo, como tú quieres, pero la realidad es muy distinta. Veo que tiene problemas que necesita tratar y la verdad es que a ella tampoco le está haciendo bien todo esto. Creo que tenéis que distanciaros y recuperaros bien de todo lo malo que os ha pasado hasta ahora. Solo podréis volver a hablar con normalidad y puede que también daros otra oportunidad cuando sanéis como es debido. Mientras tanto solo os vais a hacer daño. Quién sabe... El tiempo dirá lo que tenga que ser.
-Creo que llevas razón. Es lo más lógico y lo más adecuado viendo la situación en la que estamos.
-La verdad es que desde primera hora pensaba que esto se podría dar, pero no te quería decir mucho porque te veía muy ilusionado y lo cierto es que ahora estoy sorprendida al verte tan entero.
-Bueno, estoy bastante triste, no te voy a engañar, pero si es verdad que al darme cuenta de todos esos detalles que te he ido contando, me he desencantado bastante. Creo que lo empecé a hacer hace tiempo en realidad, pero me aferraba a la idea de poder arreglarlo de una manera o de otra. Ya he abierto los ojos y creo que va siendo hora de hacerse a un lado para que los dos podamos recuperarnos bien, como tú has dicho.
-Javi, no sabes cuánto me alegro de que lo veas así y no de otra manera.
-No quiero hacer la típica, no quiero volver a esa situación de cuando me dejó, que estuve semanas en la cama, sin salir de ahí para nada, deprimido a más no poder. Quiero seguir adelante, aunque sé que no va a ser fácil.
-No lo va a ser, pero me tienes a mí para lo que necesites. Y estoy segura de que también tienes a los demás.
-Sí. Me lo han dicho también.
-¿Te apetece que nos veamos mañana para comer y así se te hace más llevadero?
-Como quieras, pero si te viene mal por el trabajo o lo que sea, no quiero ser una carga.
-No lo eres. Nunca lo has sido. Mañana nos vemos y comemos juntos. Si quieres podemos hablar de esto, o no. Lo que tú quieras.
-Gracias, Ángela. Eres la mejor.
Mañana polvo polvete... Y después a Natalia por el culete, que le iba la fiesta... Como a Javi!!!

Y ahora Javi, lo q que debería hacer es no marear más la perdiz, y nunca mais, marcar el número de Elena. A ver si ella es capaz de aguantar sin tener a un perrito tirado a sus pies
 
Javi despues de romper con la pobre Elena se acosto con la hermana, la madre, irene sola y en trio con el amigo, sofia sola y en grupo, la madre de Sofia, la psicologa, la de los tatuajes, la tatuadora, la del gimnasio, la que se suicido y la amiga, Valentina y la amiga, la sobrina de Valentina, la compañera de casa, la loca, Angela y la hermana. me debo olvidar de alguien. y el problema son los celos de la chica?
 
Bueno, pues ya ha abierto los ojos. Ojalá con el tiempo se de cuenta y vea a Ángela con otros ojos, porque yo no creo que Ángela no sienta nada por Javi, más bien todo lo contrario, pero también entiendo su postura y querrá que se dé cuenta él y no sufrir como le pasó en el pasado
Yo creo que Javi y Ángela van a acabar juntos.
No sé... Es probable, pero tampoco creo que ella quiera ser pareja de Javi, en segunda opción.
 
Ambos son volubles, no son sinceros y no saben lo que quieren.

Hasta hace no mucho, Javi le iba a pedir a Angela ser novios. No sé a que juega con esas conversaciones tan vacías.

La toxicidad ha estado en todos lados desde el comienzo.

Si Javi va a empezar algo con alguien, tiene que hacer un giro completo en su percepción del mundo, que lamentablemente, su entorno tampoco ayuda.
Creo que desde que Elena ha vuelto a la cabeza de Javi, nuestro protagonista, ha sido claro en cuanto a asuntos amatorios. Ha podido liarse con unas cuantas. Y no se ha desviado del guión que se había marcado a sí mismo. Antes del reencuentro... Veleta, inmaduro, pichalegre... es poco, para lo que se le puede decir. Por eso, lo que ocurra después, nadie lo sabe. Y él el que menos.
 
Yo creo que Javi y Ángela sienten algo el uno por el otro, pero entre que uno no lo ve y Ángela no da el paso, así están.
Ángela creo que sí sabe lo que quiere. Pero, quiere a Javi en plenitud. Y nunca lo ha conseguido sentir así. Javi tuvo la oportunidad de lanzarse, justo antes de su viaje a Francia. Después, quizás tarde.
 
¡Ajajá! La villana ya se ha desenmascarado ... por fin Ángela empieza a mostrar su verdadera cara, y el ciego de Javier no lo ve. Ahora que cree que su presa está herida de muerte, ahora empieza a echar el veneno que le queda sobre ella.
Pobre e inocente Javier. Primero se ganó su confianza, después consiguió hacerlo dependiente de ella, hasta para elegir qué ropa ponerse. Ahora que se debería haber alejado de él por un tiempo, si es que de verdad quería que lo suyo con Elena prosperase, pues ahora resulta que estaba cada vez más presente en su vida, sabiendo que eso iba a ser intolerable para Elena ¡Qué lista es! Ha puesto el dedo en la llaga de Elena y esta ha acabado saltando ¡Qué lista, pero qué lista es!
Yo no veo que Ángela esté actuando para que esa relación, no fructifique. Pudiera haber hecho más por cazar a Javi, antes de que nuestro amigo viese a su ex en la cena de Navidad. Y hasta tuvo la última oportunidad de hacer algo más en el polvo de despedida. Ese fue el momento crucial en un antes y un después para ambos ...
 
Bueno, al menos hay señas de que nuestro Javier está creciendo.

Además no es tan terrible el desamor, si yo me logré desenamorar de Irene, perfectamente él lo podrá hacer de Elena. :oops:;)
Es que el sexo y el guarrerio tiene un nombre: Irene.

Pero yo prefiero el guarrerio de Natalia. Ese es incluso más intenso, pero en 4 polvos te manda a la mierda.
 
Javi despues de romper con la pobre Elena se acosto con la hermana, la madre, irene sola y en trio con el amigo, sofia sola y en grupo, la madre de Sofia, la psicologa, la de los tatuajes, la tatuadora, la del gimnasio, la que se suicido y la amiga, Valentina y la amiga, la sobrina de Valentina, la compañera de casa, la loca, Angela y la hermana. me debo olvidar de alguien. y el problema son los celos de la chica?
Es que uno, mata a un perro y le llaman mataperros...

Sí. Falta Daniela. Creo.
 
Última edición:
¡Ajajá! Al tonto ya se le ha caído el velo ... por fin Javier empieza a ver cómo es Elena en realidad, sin los filtros del enamoramiento. Ahora que creía que Elena iba a valorar su esfuerzo por hacer las cosas bien, ahora descubre que ella eso nunca lo valorará porque es egoísta y posesiva.
Pobre, inocente y tonto Javier. ¡Cómo le nublo en entendimiento su enamoramiento! Primero se sintió el hombre más afortunado del mundo al lado de Elena y creía que era él quien le hacía descubrir nuevos límites del placer, después estuvo dispuesto a pagar cualquier precio para seguir explorando esos límites del placer con Elena. Ahora que todo debería ser felicidad por recuperar aquello tan bonito que vivió enamorado, pues ahora se da cuenta de que no todo era tan bonito, basta con mirar los mismos acontecimientos sin el velo del enamoramiento. Como con Valentina, que un polvo le quitó el velo con que miraba su relación, ahora, gracias de nuevo a "la lista" Ángela, por fin ve la auténtica realidad y a la tirana Elena ¡Qué tonto fue! Se le ha caído el velo y ha acabado viendo lo que realmente tenía ante sus narices y no veía ¡Qué tonto, pero qué tonto fue!
Corramos un estúpido velo
 
Si Javier no fuera como es y no hubiera pasado lo que pasó con Noelia, seguirían juntos. Pero esto ya está visto para sentencia y lo mejor es que cada uno siga su camino.
Yo creo que si bien, todo el reencuentro viene influenciado por lo que es, una segunda oportunidad, o un "to be continued", y así va la cosa, que no nos ciegue el dedo el sol. Elena es Elena. Monjita, dulce y hasta con apariencia cándida... pero con personalidad marcada, trepadora y manipuladora. No dudó en marchar a otra ciudad, sabía que Javi, iba a ir tras ella cual perrito sumiso. O cuando qué mal estoy, vuélvete de la semana de trabajo en el extranjero...
 
Capítulo 844

Efectivamente, no empecé la semana derrochando ánimo, porque estaba apagado, como sin energía, cosa que tenía mucho que ver con que hubiera dormido mal, pero también era por la tristeza. Por suerte, en el trabajo no tenía clases con niños o con adolescentes, pues por las mañanas iban personas más mayores para sacarse sus cursos, así que podía permitirme no estar tan animado, aunque trataba de no descuidar lo que tenía que hacer.

Solía usar los ratos de los listening para ir corrigiendo exámenes y redacciones que me traían, pero pensé que sería mejor dejarlo todo para llevármelo a casa y tener así algo más con lo que entretenerme para tratar de tener ratos muertos en menor medida de lo posible y evitar así empezar a darle vueltas a la cabeza.

Fue algo que pensé ese día y que pondría en práctica durante bastante tiempo, porque la verdad es que me venía bastante bien para lo que yo tenía pensado, además de que podía corregir con más calma y poner algún que otro apunte en los márgenes para que lo tuvieran en cuenta, que ya era algo que les mencionaba al darles la corrección, pero así era mejor, porque se quedaba por escrito.

Por suerte, Ángela me hizo mucho más llevadero el rato del almuerzo, en donde se esforzaba tremendamente por mantenerme distraído, buscando tema de conversación a cada poco, aunque antes de todo eso, me recogió cuando salí de la academia, dándome un abrazo enorme, acompañándome a casa para dejar lo que me llevé de la academia, a la vez que ella dejó una pequeña mochila en la que me dijo que traía algo de ropa por si acaso, porque ya le había pasado lo de quedarse alguna noche sin tener ropa y tener que llevar la misma.

También traía su portátil, por si se quedaba por la tarde, para poder trabajar desde ahí. Ella me preguntó qué era lo que estaba dejando encima de la mesa que tenía frente al sofá, explicándole yo que eran exámenes y redacciones que me había traído para corregir y tener algo más de distracción, cosa que le pareció interesante.

Me preguntó qué íbamos a hacer para comer, si salir por ahí o pedir algo, aunque yo le sugerí preparar algo entre los dos, cosa que le pareció bien. Así que nos lavamos las manos y nos pusimos a ello, dándome ella bastante charla y evadiendo el tema de Elena, cosa que en realidad prefería.

Estuvo bastante bien todo ese rato, como la comida en sí, saliéndonos muy bien y siendo muy ameno para mí. Tras eso, nos sentamos en el sofá para reposar un poco la comida, aunque me puse a corregir un par de exámenes en lo que ella me contaba sus cosas y también ponía atención a cómo hacía yo aquello, sonriéndome cuando la miraba, diciéndome que le gusta verme concentrado, que hacía tiempo que no me veía así, añadiendo que le gustaba cómo lo hacía.

Le pregunté qué plan tenía para la tarde, diciendo que iba a ir a ver su hermana, porque no se dejaba ver mucho por casa, teniendo en mente pasar la tarde con ella, además de trabajar ahí un poco. Le dije que se podía quedar en casa si quería, pero era algo que ya habían hablado, aunque me dijo que podíamos vernos para cenar si me parecía bien.

Obviamente le dije que me parecía perfecto, ofreciéndole que se quedara a dormir si quería para no marcharse tan tarde a casa o por si a la compañera de piso de su hermana le podía molestar. Me dijo que ya lo veríamos después de cenar. Así que recogí lo mío para marcharme, dándonos un abrazo antes de salir de casa y dándole yo las gracias por haber tenido ese detalle de venir para hacerme compañía, diciendo ella que no era nada, siempre con una sonrisa en su cara.

Nos volvimos a dar otro abrazo antes de que yo entrara a la academia, marchándose ella a casa de su hermana. La tarde no se dio tan regular como esperaba. La visita de Ángela me había levantado mucho el ánimo y fue como un chute de energía para sobrellevar bien la tarde con los más pequeños y revoltosos, teniendo que impartir más materias a la que más estaba acostumbrado. Pero no hubo ningún percance ni nada, encontrándola de nuevo a las puertas de la academia cuando me tocaba volver a casa.

Me esperaba con una de sus preciosas sonrisas, sugiriendo después de saludarnos que fuéramos a cenar fuera. Acabamos en un sitio al que ya habíamos ido un par de veces, de estas que venía a verme, justo como en ese momento. Nos gustó bastante aquel sitio al ser simple y al tener tan buena comida y servicio, por lo que se le ocurrió ir allí.

Fue una buena decisión, porque todo seguía igual de bien por allí y la presencia de mi amiga no hacía más que enaltecer lo bueno de aquel lugar. Mientras cenábamos estuvimos charlando de varías cosas, interesándome yo cómo había ido la cosa con su hermana y si había podido trabajar.

Me dijo que había ido bien, y que habían compartido tiempo juntas, estando ella con sus cosas de la universidad mientras ella trabajaba. Y también se encontraba con ellas su compañera de piso, comentándome que era un amor de chica.

Me dio recuerdos de parte de su hermana, porque sabía que había venido a verme. Le pregunté si le había comentado algo de lo que me había pasado, aunque yo ya sabía la respuesta. Efectivamente, algo le comentó, pero me dijo que podía estar tranquilo, que había sido muy por encima y sin dar detalles.

En realidad, no me importaba, porque no tenía prácticamente relación con ella como para que me trajera problemas o para que se metiera conmigo por eso, como le gustaba hacer con su hermana. Ya en casa sí que hablamos un poco más de Elena y de sus celos. Estábamos sentados en el sofá, viendo la tele, con ella acurrucada a mí y con una manta por encima.

Me decía que se sentía mal por ser ella el centro de atención de sus celos y que ojalá no los hubiera tenido nunca para que nos pudiera haber ido mejor, aunque le dije que ella no tenía la culpa en realidad, que si no era por ella, iba a ser por otra. Además de que sus celos no eran nada nuevo y ya los tenía desde antes de que empezáramos a salir, quizá justificados por lo que le hacía su ex.

Ángela se abrazó a mi brazo y me empezó a hablar de otros temas, contándome que había cosas que echaba de menos de Francia, preguntándole yo si se trataba de esa chica con la que se veía de vez en cuando, diciendo que sí, que la echaba un poco de menos y que le gustaría poder verse con ella, pero tal vez haría un viaje en verano para ir a verla.

También me comentaba que echaba de menos cuando alguien con cierta notoriedad se acercaba a las oficinas en las que trabaja, o alguna sesión de fotos esporádica que le pudieran proponer, habiendo hecho dos mientras estuvo allí.

De hecho, se puso a enseñarme las fotos de dichas sesiones, estando muy bien, habiendo alguna en la que salía muy sexy. Le dije que debía estar en su salsa con lo que le gustaba a ella todo el tema de maquillarse como lo estaba en esas fotos, la ropa y echarse fotos frente al espejo posando. Me reconoció que sí, que le gustaba mucho hacer eso, pasando a reír.

Le pregunté si quería dormir en mi cama, aunque ella me dijo que se apañaba bien en la de invitados, por lo que le dejé una sudadera y nos marchamos a dormir, dándonos las buenas noches con un buen abrazo y un beso en la mejilla por su parte. Di unas cuantas vueltas en la cama, pero conseguí dormir finalmente, no escuchando nada por su parte en toda la noche.

Al día siguiente tampoco fui al gimnasio pese a levantarme muy temprano y tener tiempo de sobra, pero no quería dejar a Ángela sola para cuando se levantara, sobre todo si lo hacía justo cuando yo no estaba y se marchaba sin que nos despidiéramos.

Así que me dediqué a seguir corrigiendo tranquilamente todo lo que me traje a casa el día anterior, levantándose Ángela y viendo que estaba en ello, aunque ella me dedicó una sonrisa, con una cara de dormida muy marcada.

Me preguntó si me importaba que se diera una ducha, diciéndole yo que estaba en su casa, así que se marchó al baño para darse una, preparando yo mientras el desayuno para los dos, dándome las gracias por haberlo preparado y poniéndonos los dos a desayunar.

Me estuvo explicando lo que iba a hacer a lo largo del día una vez volviera a casa, cayendo yo en que la pasada noche podría haber ido con sus amigos, aunque ella me dijo que le daba igual y que prefería estar conmigo.

Esas palabras me hicieron sentir muy bien, pero era hora de irse, tanto para ella como para mí, así que me acompañó una vez más a la academia para despedirse allí de mí con un fuerte abrazo, diciéndome que me llamaría todos los días para ver cómo estaba y para charlar, que pensaba que me hacía mucho bien por lo que pudo intuir el día anterior, confirmándoselo yo.

Al haberse ido Ángela, mi ánimo se vino un poco abajo, pero lo cierto es que no estaba tan triste como esperaba estar. Desde luego, y por suerte, no fue como cuando Elena me dejó, que me costó la vida levantar cabeza. Esta vez era algo mucho más normal y llevadero, aunque eran varias las veces que pensaba en ella, y más que lo iba a hacer al volver a casa ya cuando se acabó el día de trabajo, llamándome Valentina no mucho después de que llegara a casa.
 
Puffff... otra vez Valentina. Javi le puso los cuernos, le dijo en su cara que no la quiere y ella sigue detrás. Tiene 40, que llame a su exesposo en vez de estar jugando y poniéndose al nivel de veinteañeros con complejo de adolescentes.

Espero que tome sólo unas cuantas líneas y desaparezca.
 

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