Topless entre amigos
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Imaginativo
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Dios bendiga a las hippies, marimachos, punkies, perroflautas y todo lo demás que quieras llamarles, las primeras en despelotarse y que encima hacen que sus amigas las sigan
Yo no tengo anécdotas de amigas propias pero sí tengo alguna que he visto de otros grupos, por ejemplo que está relacionado con esto
Veo llegar a la playa a tres mujeres (nada de una cala escondida, fue en la zona de tumbonas al lado del chiringuito), dos jóvenes (unos 24 años) y una mayor, a la que ya conocía de cara de haberla visto con frecuencia en esas tumbonas. Las dos jóvenes llegaron e hicieron topless al instante
La primera cumplía el perfil: muy morena por todo el cuerpo (se veía que hacía topless siempre), tatuajes y piercings incluyendo en el pezón, tanga...
La segunda con pinta más "modosita", con las tetillas blancas que se veía que solo hacía topless por estar con la otra
La mayor era hija de esta segunda, aunque hablaba con mucha cercanía con la primera, igual era una amiga de toda la vida de su hija o algo
El tema es que tras un rato, ¡la madre se lo quita también! Y la vi hablando con total naturalidad con otra habitual de las tumbonas, diciéndole "sí, como sabes yo esto no lo hago, pero bueno por una vez..."
La señora era tirando a feucha (la más guapa era la hija). Pero la mera situación daba un morbo que lo flipas: una señora que veía todos los días, de repente en tetas, porque esta vez había venido con la amiga "rebelde y mala influencia" de su hija
Llega a convencer a la otra señora de las tumbonas de que se lo quitase también y yo creo que exploto en el sitio
Kame Sen'nin
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Mi entonces novia y ahora mi mujer siempre ha hecho topless. Mi mujer mantiene su círculo de amistades de la urbanización donde residía. Cuando vamos a la playa con ellos siempre ha hecho topless sin importarle que el resto de chicas lo hicieran o no. Igual con su familia, su hermana pequeña nunca ha hecho topless, en cambio su madre también saca a pasear las tetas en cuanto pisa la arena de la playa.
Yo nunca he sido muy de playa, y mi circulo de amistades tampoco, pero las circunstancias han hecho que ahora me encante.
Tendría que estar más que acostumbrado después de más de 20 años a que mi mujer esté en tetas con naturalidad en la playa, pero el verano pasado tuve un día especial.
Uno de mis amigos, divorciado desde hace unos años, ahora tiene una nueva pareja a la que le gusta mucho ir a la playa y suelen ir los dos solos. Hablamos muchas veces de que alguna vez tenían que acompañarnos, pero la verdad no se dio la coincidencia hasta,...
Un viernes conseguimos reunirnos los amigos para comer, pero sin nuestras respectivas parejas y tomar luego unas copas. El típico tardeo que se ha puesto de moda. Mi amigo, en un momento dado, dijo que no bebería mucho ya que le tocaba ir a la playa con su pareja al día siguiente y que no era plan de pasar el día con un resacón del quince. Como es normal entre nosotros, le cayó un buen abuso. Como al resto, salvo por mí, la playa en fotos y si puede ser desde lejos. Comentarios del tipo calzonazos, que si no te gusta para que vas, que tiran 2 tetas más que 2 carretas y similares.
Yo aproveché para defender las maravillas de pasar un día de playa con un único argumento. Es el único sitio donde te hartas de ver tetas sin problemas. Todos rieron y corroboraron que por ese lado tenía razón. Mi amigo dijo que el único problema que tenía era no dejarse las gafas de sol para que su pareja no le pillara observando las tetas de las otras. Ahí la conversación degeneró contando situaciones de tetas en la playa. Uno contó que un día le tocó acompañar a su mujer porque había quedado con una compañera suya de trabajo y su marido y que al llegar a la playa, la compañera de trabajo se quedó en tetas sin más. Contó que su mujer pilló un cabreo considerable y que luego en casa no hacía más que ponerla a parir. Mi amigo para picarla, aún le pregunta que para cuando van a quedar con su compañera de trabajo para ir a la playa y se pilla unos rebotes de la hostia.
Ya más entrada la tarde, le comenté a mi amigo, que nosotros también íbamos a ir a la playa y que si quería quedábamos los 4. A mi amigo se le iluminaron los ojos, claramente vio la oportunidad de al menos estar conmigo y no aburrirse. Yo le conté a que playa íbamos y por donde nos poníamos y me dijo que irían. Quedamos que el primero que llegara mandaría ubicación por WhatsApp.
Al llegar a casa, le propuse a mi mujer ir al día siguiente a la playa sin decirle que coincidiríamos con mi amigo y su pareja.
Ya el sábado preparando los bártulos, sombrilla, sillas, nevera, (que ya tenemos una edad), estaba nervioso sabiendo que mi amigo le vería las tetas a mi mujer. Como de costumbre mi mujer ni se llevó la parte de arriba, yo no sabía como introducir que nos encontraríamos con mi amigo y ya en el coche le empecé a contar cosas del día anterior y pude introducir que a mi amigo le tocaba día de playa con su pareja y que yo le dije que si quería se viniese con nosotros, pero bueno, que conociéndole, si se daba la oportunidad intentaría librarse.
Me había salido redondo. Si me mandaba él el mensaje, pues resulta que al final le ha tocado ir a la playa y no se ha librado y si me toca mandárselo a mí, siempre podía decir que me había escrito antes preguntándome por donde estábamos.
Al poco recibo mensaje diciendo que ya habían aparcado y me manda ubicación. Le digo a mi mujer que conteste diciéndole que estábamos de camino. Al rato otro mensaje con la ubicación en la playa. Mi mujer al parecer no le dio ninguna importancia, incluso comentó con naturalidad que ya iba siendo hora de coincidir.
Yo solo pensaba en el momento en que mi mujer que quedaría en tetas delante de mi amigo, no tenía otra opción, ni llevaba la parte de arriba. Mi mujercita lucía un mono de pantalón corto y tirantes con el que era más que evidente que debajo, sus tetitas iban sueltas.
Lo que restaba de trayecto, yo aparente total normalidad sin hacer mención al asunto hasta que mi mujer fue la que sacó el tema.
- Oye, que voy en tetas, no vaya a ser que se molesten, si quieres compramos en algún chiringuito alguna parte de arriba-
Joder, mierda. Tenía que reaccionar rápido y no cagarla-
- Tu misma, ¿si te va a dar vergüenza?, pero igual va a tener un montón de tetas alrededor.
Sabía que el tocar el tema de la vergüenza iba a hacer mella en su orgullo. Sabéis la típica situación con amigotes y 4 copas en cuanto alguno suelta la frase no hay huevos. ¿Qué no hay huevos,...?, pues mi mujer es peor y lo de hacer hincapié y normalizar que la playa iban a estar muchas otras mujeres también en tetas, también ayudó. La verdad es que es una zona donde lo raro es ver alguna con la parte de arriba puesta.
- ¿Vergüenza a esta alturas?. Joder, para nada, ya somos todos mayorcitos, un par de tetas más en la playa no les van a asustar.
Hostias, me había salido redondo. Estábamos sacando las cosas del maletero e iba cachondo perdido. Me fijé que a mi mujer se le notaban bien los pezones duros a través de la tela. Pensé que a lo mejor quizás también le daba morbo que uno de mis amigos fuera a verle las tetas. Le dije que cogiera el móvil y le pusiera que ya habíamos aparcado.
Estábamos caminando por la orilla y los vimos. Yo solo pensé en lo que estaría pensando mi amigo al ver sus pezones marcados y notar el bamboleo de sus tetitas debajo de la prenda y ella que pensaría. Le echaría luego también la bronca como la mujer de nuestro otro amigo.
Nos vieron llegar y se pusieron de pie para recibirnos, ella llevaba el bikini completo, esos pocos metros se me hicieron eternos. Saludos de rigor, también llevaban sombrilla y tumbonas y miramos por donde colocar las cosas, habían creado un hueco con sus toallas para que pudiéramos instalarnos sin problemas. Yo empecé a sacar la sombrilla cuando vi como mi mujer mientras hablaba con la pareja de mí amigo se quitaba el mono dejando sus tetitas morenas con los pezones empitonados a la vista y como su culo apareció con su braguita brasileña bien metida entre sus cachetes al bajarse del todo el mono. Joder no se como no me corrí allí mismo. Mi amigo que me estaba ayudando con la sombrilla y el resto de bártulos, no pudo evitar su cara de asombro aunque aguanto el tipo estoicamente disimulando sin hacer ningún comentario. Mi mujer se giró y se inclinó sobre la bolsa de playa para sacar las toallas y guardar el mono de frente a nosotros. Mi amigo tenía las tetas de mi mujer colgando y agitándose libremente a pocos centímetros, con solo estirar la mano un poco hubiera podido tocarlas. Al incorporarse vi que también, claramente, su coñito totalmente depilado se dibujaba perfectamente sobre la fina tela.
Terminamos de montar el chiringuito mientras nuestras respectivas fueron a refrescarse al agua. Terminamos de colocar las tumbonas debajo de las sombrillas y colocamos las 4 toallas tendidas de frente. Yo me puse a la izquierda, mi amigo a mi derecha, dejamos la toalla de mi mujer a su lado y a continuación la de su pareja.
Contemplamos como salían del agua. Las dos hablaban animadamente al parecer ajenas a nuestro escrutinio. Su pareja también marcaba bien el coñito aunque se disimulaba más al estar su bikini adornado con diferentes motivos. El coñito de mi mujer ahora era si cabe mucho más evidente con la tela mojada y bien pegada a su intimidad. El bamboleo de las tetas de mi mujer con cada paso me pareció hipnótico y eterno hasta que se plantaron ambas de pie frente a nosotros. Estaba sobreexcitado, creo que con solo un par de meneos me hubiera corrido irremediablemente.
Intentaron convencernos para ir un rato al agua, pero no coló. Mi mujer sin más se tumbó en su toalla al lado de mi amigo y su pareja a continuación. Pude ver como con disimulo le pegaba un buen repaso a mi mujer al abrigo de sus gafas de sol. Al rato nos sentamos en corro para hablar entre nosotros con mayor comodidad.
A medida que fue pasando el día, la verdad es que fui normalizando la situación y mi excitación fue disminuyendo, pero esa primera horita con ellos teniendo por primera vez a mi mujer en tetas expuesta frente a mi amigo de la infancia, que pudo contemplar sin perder detalle cada centímetro de su pecho con sus pezones mutando a lo largo del día, ahora bien duritos o ahora relajados y abultados, así como percibir la forma de su coño bien marcado sobre la braguita del bikini ha sido una de las situaciones con más morbo y de las más excitantes de mi vida y eso que estoy más que acostumbrado a tenerla en tetas delante del todo el mundo en la playa, pero nunca habíamos coincidido con mi circulo de amistades.
Al caer la tarde se volvió a alterar mi líbido ya que la pareja de mi amigo propuso abiertamente sacarnos unos fotos para el recuerdo y sin más nos estaba sacando fotos a los 3 juntos y luego ya todos con nuestro móviles nos sacamos diferentes fotos. Para rematar nos las compartimos por WhatsApp y las comentamos alegremente. Joder mi amigo no solo había disfrutado de las tetas de mi mujer durante todo el día si no que también las tenía en fotos para disfrutarlas cuando quisiera.Me dio un subidón de morbo instantáneo.
También ver a su pareja en bikini me alegró el día y una cosa curiosa que hizo al irnos, fue cambiarse de bikini casi sin ningún pudor, así que como recompensa, fugazmente también le vi el coñito y las tetas a la pareja de mi amigo, aunque ni punto de comparación con la excitación de tener a mi mujer en tetas frente a mi amigo.
Para cerrar la anécdota, tengo que decir que mi mujer tampoco fue inmune a la situación y aunque no comentó nada al respecto al llegar a casa prácticamente me violó. Casi sin preliminares directamente me montó, la polla le entró como cuchillo caliente en mantequilla, estaba más que lubricada, se puso a botar frotándose enérgicamente el clítoris y duramos menos y nada.
Ahora cada vez que coincidimos con mi amigo y su pareja no puedo evitar recordar ese día y supongo que a él tampoco se le va a olvidar. Estoy deseando volver a coincidir otro día y repetir la experiencia y a ver si con suerte se apunta algún amigo más. A día de hoy aún me mato a pajas con una de esas fotos donde mi mujer posa entre mi amigo y yo cogiéndola ambos por la cintura.
Yo nunca he sido muy de playa, y mi circulo de amistades tampoco, pero las circunstancias han hecho que ahora me encante.
Tendría que estar más que acostumbrado después de más de 20 años a que mi mujer esté en tetas con naturalidad en la playa, pero el verano pasado tuve un día especial.
Uno de mis amigos, divorciado desde hace unos años, ahora tiene una nueva pareja a la que le gusta mucho ir a la playa y suelen ir los dos solos. Hablamos muchas veces de que alguna vez tenían que acompañarnos, pero la verdad no se dio la coincidencia hasta,...
Un viernes conseguimos reunirnos los amigos para comer, pero sin nuestras respectivas parejas y tomar luego unas copas. El típico tardeo que se ha puesto de moda. Mi amigo, en un momento dado, dijo que no bebería mucho ya que le tocaba ir a la playa con su pareja al día siguiente y que no era plan de pasar el día con un resacón del quince. Como es normal entre nosotros, le cayó un buen abuso. Como al resto, salvo por mí, la playa en fotos y si puede ser desde lejos. Comentarios del tipo calzonazos, que si no te gusta para que vas, que tiran 2 tetas más que 2 carretas y similares.
Yo aproveché para defender las maravillas de pasar un día de playa con un único argumento. Es el único sitio donde te hartas de ver tetas sin problemas. Todos rieron y corroboraron que por ese lado tenía razón. Mi amigo dijo que el único problema que tenía era no dejarse las gafas de sol para que su pareja no le pillara observando las tetas de las otras. Ahí la conversación degeneró contando situaciones de tetas en la playa. Uno contó que un día le tocó acompañar a su mujer porque había quedado con una compañera suya de trabajo y su marido y que al llegar a la playa, la compañera de trabajo se quedó en tetas sin más. Contó que su mujer pilló un cabreo considerable y que luego en casa no hacía más que ponerla a parir. Mi amigo para picarla, aún le pregunta que para cuando van a quedar con su compañera de trabajo para ir a la playa y se pilla unos rebotes de la hostia.
Ya más entrada la tarde, le comenté a mi amigo, que nosotros también íbamos a ir a la playa y que si quería quedábamos los 4. A mi amigo se le iluminaron los ojos, claramente vio la oportunidad de al menos estar conmigo y no aburrirse. Yo le conté a que playa íbamos y por donde nos poníamos y me dijo que irían. Quedamos que el primero que llegara mandaría ubicación por WhatsApp.
Al llegar a casa, le propuse a mi mujer ir al día siguiente a la playa sin decirle que coincidiríamos con mi amigo y su pareja.
Ya el sábado preparando los bártulos, sombrilla, sillas, nevera, (que ya tenemos una edad), estaba nervioso sabiendo que mi amigo le vería las tetas a mi mujer. Como de costumbre mi mujer ni se llevó la parte de arriba, yo no sabía como introducir que nos encontraríamos con mi amigo y ya en el coche le empecé a contar cosas del día anterior y pude introducir que a mi amigo le tocaba día de playa con su pareja y que yo le dije que si quería se viniese con nosotros, pero bueno, que conociéndole, si se daba la oportunidad intentaría librarse.
Me había salido redondo. Si me mandaba él el mensaje, pues resulta que al final le ha tocado ir a la playa y no se ha librado y si me toca mandárselo a mí, siempre podía decir que me había escrito antes preguntándome por donde estábamos.
Al poco recibo mensaje diciendo que ya habían aparcado y me manda ubicación. Le digo a mi mujer que conteste diciéndole que estábamos de camino. Al rato otro mensaje con la ubicación en la playa. Mi mujer al parecer no le dio ninguna importancia, incluso comentó con naturalidad que ya iba siendo hora de coincidir.
Yo solo pensaba en el momento en que mi mujer que quedaría en tetas delante de mi amigo, no tenía otra opción, ni llevaba la parte de arriba. Mi mujercita lucía un mono de pantalón corto y tirantes con el que era más que evidente que debajo, sus tetitas iban sueltas.
Lo que restaba de trayecto, yo aparente total normalidad sin hacer mención al asunto hasta que mi mujer fue la que sacó el tema.
- Oye, que voy en tetas, no vaya a ser que se molesten, si quieres compramos en algún chiringuito alguna parte de arriba-
Joder, mierda. Tenía que reaccionar rápido y no cagarla-
- Tu misma, ¿si te va a dar vergüenza?, pero igual va a tener un montón de tetas alrededor.
Sabía que el tocar el tema de la vergüenza iba a hacer mella en su orgullo. Sabéis la típica situación con amigotes y 4 copas en cuanto alguno suelta la frase no hay huevos. ¿Qué no hay huevos,...?, pues mi mujer es peor y lo de hacer hincapié y normalizar que la playa iban a estar muchas otras mujeres también en tetas, también ayudó. La verdad es que es una zona donde lo raro es ver alguna con la parte de arriba puesta.
- ¿Vergüenza a esta alturas?. Joder, para nada, ya somos todos mayorcitos, un par de tetas más en la playa no les van a asustar.
Hostias, me había salido redondo. Estábamos sacando las cosas del maletero e iba cachondo perdido. Me fijé que a mi mujer se le notaban bien los pezones duros a través de la tela. Pensé que a lo mejor quizás también le daba morbo que uno de mis amigos fuera a verle las tetas. Le dije que cogiera el móvil y le pusiera que ya habíamos aparcado.
Estábamos caminando por la orilla y los vimos. Yo solo pensé en lo que estaría pensando mi amigo al ver sus pezones marcados y notar el bamboleo de sus tetitas debajo de la prenda y ella que pensaría. Le echaría luego también la bronca como la mujer de nuestro otro amigo.
Nos vieron llegar y se pusieron de pie para recibirnos, ella llevaba el bikini completo, esos pocos metros se me hicieron eternos. Saludos de rigor, también llevaban sombrilla y tumbonas y miramos por donde colocar las cosas, habían creado un hueco con sus toallas para que pudiéramos instalarnos sin problemas. Yo empecé a sacar la sombrilla cuando vi como mi mujer mientras hablaba con la pareja de mí amigo se quitaba el mono dejando sus tetitas morenas con los pezones empitonados a la vista y como su culo apareció con su braguita brasileña bien metida entre sus cachetes al bajarse del todo el mono. Joder no se como no me corrí allí mismo. Mi amigo que me estaba ayudando con la sombrilla y el resto de bártulos, no pudo evitar su cara de asombro aunque aguanto el tipo estoicamente disimulando sin hacer ningún comentario. Mi mujer se giró y se inclinó sobre la bolsa de playa para sacar las toallas y guardar el mono de frente a nosotros. Mi amigo tenía las tetas de mi mujer colgando y agitándose libremente a pocos centímetros, con solo estirar la mano un poco hubiera podido tocarlas. Al incorporarse vi que también, claramente, su coñito totalmente depilado se dibujaba perfectamente sobre la fina tela.
Terminamos de montar el chiringuito mientras nuestras respectivas fueron a refrescarse al agua. Terminamos de colocar las tumbonas debajo de las sombrillas y colocamos las 4 toallas tendidas de frente. Yo me puse a la izquierda, mi amigo a mi derecha, dejamos la toalla de mi mujer a su lado y a continuación la de su pareja.
Contemplamos como salían del agua. Las dos hablaban animadamente al parecer ajenas a nuestro escrutinio. Su pareja también marcaba bien el coñito aunque se disimulaba más al estar su bikini adornado con diferentes motivos. El coñito de mi mujer ahora era si cabe mucho más evidente con la tela mojada y bien pegada a su intimidad. El bamboleo de las tetas de mi mujer con cada paso me pareció hipnótico y eterno hasta que se plantaron ambas de pie frente a nosotros. Estaba sobreexcitado, creo que con solo un par de meneos me hubiera corrido irremediablemente.
Intentaron convencernos para ir un rato al agua, pero no coló. Mi mujer sin más se tumbó en su toalla al lado de mi amigo y su pareja a continuación. Pude ver como con disimulo le pegaba un buen repaso a mi mujer al abrigo de sus gafas de sol. Al rato nos sentamos en corro para hablar entre nosotros con mayor comodidad.
A medida que fue pasando el día, la verdad es que fui normalizando la situación y mi excitación fue disminuyendo, pero esa primera horita con ellos teniendo por primera vez a mi mujer en tetas expuesta frente a mi amigo de la infancia, que pudo contemplar sin perder detalle cada centímetro de su pecho con sus pezones mutando a lo largo del día, ahora bien duritos o ahora relajados y abultados, así como percibir la forma de su coño bien marcado sobre la braguita del bikini ha sido una de las situaciones con más morbo y de las más excitantes de mi vida y eso que estoy más que acostumbrado a tenerla en tetas delante del todo el mundo en la playa, pero nunca habíamos coincidido con mi circulo de amistades.
Al caer la tarde se volvió a alterar mi líbido ya que la pareja de mi amigo propuso abiertamente sacarnos unos fotos para el recuerdo y sin más nos estaba sacando fotos a los 3 juntos y luego ya todos con nuestro móviles nos sacamos diferentes fotos. Para rematar nos las compartimos por WhatsApp y las comentamos alegremente. Joder mi amigo no solo había disfrutado de las tetas de mi mujer durante todo el día si no que también las tenía en fotos para disfrutarlas cuando quisiera.Me dio un subidón de morbo instantáneo.
También ver a su pareja en bikini me alegró el día y una cosa curiosa que hizo al irnos, fue cambiarse de bikini casi sin ningún pudor, así que como recompensa, fugazmente también le vi el coñito y las tetas a la pareja de mi amigo, aunque ni punto de comparación con la excitación de tener a mi mujer en tetas frente a mi amigo.
Para cerrar la anécdota, tengo que decir que mi mujer tampoco fue inmune a la situación y aunque no comentó nada al respecto al llegar a casa prácticamente me violó. Casi sin preliminares directamente me montó, la polla le entró como cuchillo caliente en mantequilla, estaba más que lubricada, se puso a botar frotándose enérgicamente el clítoris y duramos menos y nada.
Ahora cada vez que coincidimos con mi amigo y su pareja no puedo evitar recordar ese día y supongo que a él tampoco se le va a olvidar. Estoy deseando volver a coincidir otro día y repetir la experiencia y a ver si con suerte se apunta algún amigo más. A día de hoy aún me mato a pajas con una de esas fotos donde mi mujer posa entre mi amigo y yo cogiéndola ambos por la cintura.
Imaginativo
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La reacción tuya y de tu esposa ya la sabemos... ahora nos falta conocer la de la otra parejita ajajajaj
Por cierto muy fan de la otra compensánsote con un vistazo rapidito. Segundo que no llega a estar en topless la tuya y no lo hace
Kame Sen'nin
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Semanas más tarde, también en una reunión de viernes con comida y copas un amigo no pudo resistirse y me dijo que nuestro amigo un día que yo no estaba les contó el día de playa con mi mujer en tetas. Me imagino la conversación y me pongo burro.
Me pilló un poco desprevenido, si hubiera intuido la conversación la hubiera llevado por otros derroteros pero reaccioné sobre la marcha intentado quitar hierro al asunto.
- Ahhh, si. Siempre hace topless, le da igual.
- ¿y a tí?
- Lo tengo más que asumido, en la playa siempre está en tetas.
- Joder que morbo.
- Son solo unas tetas más en la playa.
- Ya, pero son las de tu mujer.
- Pues cuando quieras vérselas no tienes más que venir a la playa.
- No me hace falta, nos enseñó las fotos.
- Hostias que cabrón.
- ¿Qué pasa, al revés no hubieras hecho lo mismo?
- Jajaja, la verdad es que sí.
- ¿Os las pasó?
- No eso no. No quiso jajaja.
- Pues si quieres tener tu propias fotos te vienes con ...(su mujer).
- Visto así, habría que hacer un esfuerzo jajaja.
- Cuando queráis.
Seguimos la tarde de copas y no volvimos a sacar el tema. El resto de amigos no me dijeron ni mu.
Me pilló un poco desprevenido, si hubiera intuido la conversación la hubiera llevado por otros derroteros pero reaccioné sobre la marcha intentado quitar hierro al asunto.
- Ahhh, si. Siempre hace topless, le da igual.
- ¿y a tí?
- Lo tengo más que asumido, en la playa siempre está en tetas.
- Joder que morbo.
- Son solo unas tetas más en la playa.
- Ya, pero son las de tu mujer.
- Pues cuando quieras vérselas no tienes más que venir a la playa.
- No me hace falta, nos enseñó las fotos.
- Hostias que cabrón.
- ¿Qué pasa, al revés no hubieras hecho lo mismo?
- Jajaja, la verdad es que sí.
- ¿Os las pasó?
- No eso no. No quiso jajaja.
- Pues si quieres tener tu propias fotos te vienes con ...(su mujer).
- Visto así, habría que hacer un esfuerzo jajaja.
- Cuando queráis.
Seguimos la tarde de copas y no volvimos a sacar el tema. El resto de amigos no me dijeron ni mu.
Erdi
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Vaya morbazo de situación. Tu amigo se puso como una moto
justpa
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Eastwood
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Mi mujer dice que no le gusta que la deseen. Cuando le digo que a algún conocido se le nota que la desea dice que eso le da vergüenza pero yo creo que a todo el mundo le gusta est no? Otra cosa son los babosos que eso sí lo entiendo que sea desagradable
Eastwood
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Yo también me desnudé una vez en la playa nudista delante de una amiga. La vi varias veces mirándome la polla pero ella no se quitó nada. Tenía esperanza de que por lo menos hiciera topless pero la situación fue muy morbosa
Eastwood
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A mí también me excita mucho que haga topless mi mujer. Ella también dice que lo hace con naturalidad pero luego se le nota mucho que está más excitada. Alguna vez venía con nosotros alguna amiga suya e incluso su hermana y esos días se le notaba todavía más que estaba excitaba más de lo normal
Kame Sen'nin
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Voy a terminar con las consecuencias de ese día en la playa de mi mujer en topless con mi amigo.
Después de la conversación con el otro amigo que me confesó que habían visto las fotos de mi mujer en topless en la playa, me quedé con la mosca en la oreja, necesitaba que mi grupo de amistades, supiera claramente que hacía topless. Aunque ellos ya lo sabían, quería que todas sus respectivas parejas también lo supieran. Quería que estuviera claro que si alguna vez venían con nosotros a la playa, mi mujer iba a estar en tetas. Tracé un plan, simple la verdad, pero efectivo. La verdad es que me salió redondo.
Al domingo siguiente fuimos a la playa con el grupo habitual y me pase el día sacándole fotos con el móvil. Buscaba una foto donde fuera más que evidente que estaba haciendo topless, pero sin mostrar nada. Al final saqué unas cuantas que me podían servir, pero una me llamó la atención.
Era una que me quedó espectacular. Estaba de espaldas, en perpendicular con el mar de fondo y su pecho asomaba muy sutilmente por el lateral. Al día siguiente le pase a mi mujer una selección de esas fotos, las más artísticas, entre la que se encontraba la elegida. Comentamos que habían sido unas fotos muy chulas. A los pocos días le envió por WhatsApp una de esas fotos a su hermana, no la que elegí yo, era otra, muy similar pero uno de sus pechos se veía perfectamente. Comentaron que era una foto preciosa y con muy buen gusto.
Comentamos esos día mi mujer y yo que había conseguido unas fotos muy chulas y yo hice hincapié que al final no es fácil hacer fotos buenas, que era una selección de las muchas fotos que le hice ese día, le enseñe el resto y coincidimos que aunque había muchas en las que posaba al final las mejores fueron en las que no se dio cuenta que le hacía foto.
Tras estos acontecimientos, ejecuté mi plana, así que me decidí y subí la foto elegida a ******** y la etiqueté. Los comentarios no se hicieron esperar, pero solo por parte de su grupo, tanto de chicas como de chicos. Fotaza!!!, Espectacular, Que guapa, y los que más me gustaron fueron los que hicieron alusión a ese día y que también estaban en la playa, ... que que bien nos lo pasamos, fantástico día, también tengo fotos de ese día, luego te las paso,.. y el mejor el de su hermana, voy a subir la que tengo yo jajaja.
Mi mujer contestó educadamente a todos los comentarios, ... gracias, a que si,... y el mejor al de su hermana, ni se te ocurra!!!. Así que la coña continuó un poco con comentarios de yo quiero ver esa foto, otro, yo también, ¿qué se ve en esa foto?, súbela y su hermana picando en plan, la subo en un rato jajaja, al final mi mujer dio casi por cerrada la conversación diciendo ... no se ve nada que no hayaís visto en directo ese día.
Lo más alucinante que de mi grupo de amistades ni un solo comentario ni un me gusta, nada. Semanas más tarde en una comida en nuestra casa con mis amigos uno comentó la foto y su mujer que no tiene ******** dijo que quería verla. Cuando se la enseñó, puso cara de sorpresa y antes de que dijera nada, mi mujer soltó:
- No hay nada tampoco de que escandalizarse, no se ve nada.
- No que va, salvo que se ve que estás en topless aunque no se vea nada.
- Ya, claro, porque hago topless.
- ¿Siempre?
- Si, claro
Ahí saltó la pareja de nuestro amigo:
- Si que lo hace, fuimos con ellos un día e hizo topless sin problema.
- ¿En serio?
- Ya te he dicho que siempre.
- Ohh, que atrevida.
- Si tu supieras. (Lo dijo con un tono de condescendencia)
- ¿El qué?
- Nada, es igual déjalo.
- ¿Qué?
- Pues si te escandaliza que haga topless, que pensarás si sabes que cuando voy a solas con mi marido, siempre hacemos nudismo.
Todas las miradas de la mesa se dirigieron a mi. Yo solo asentí con una sonrisa picarona. Lo había conseguido, no solo había logrado que todos mis amigos supieran que mi mujer hacía topless, si no que también se despelotaba en la playa. Mejor imposible.
Ahora espero ansioso esta temporada de playa, a ver cuantos se apuntan a acompañarnos a la playa.
Después de la conversación con el otro amigo que me confesó que habían visto las fotos de mi mujer en topless en la playa, me quedé con la mosca en la oreja, necesitaba que mi grupo de amistades, supiera claramente que hacía topless. Aunque ellos ya lo sabían, quería que todas sus respectivas parejas también lo supieran. Quería que estuviera claro que si alguna vez venían con nosotros a la playa, mi mujer iba a estar en tetas. Tracé un plan, simple la verdad, pero efectivo. La verdad es que me salió redondo.
Al domingo siguiente fuimos a la playa con el grupo habitual y me pase el día sacándole fotos con el móvil. Buscaba una foto donde fuera más que evidente que estaba haciendo topless, pero sin mostrar nada. Al final saqué unas cuantas que me podían servir, pero una me llamó la atención.
Era una que me quedó espectacular. Estaba de espaldas, en perpendicular con el mar de fondo y su pecho asomaba muy sutilmente por el lateral. Al día siguiente le pase a mi mujer una selección de esas fotos, las más artísticas, entre la que se encontraba la elegida. Comentamos que habían sido unas fotos muy chulas. A los pocos días le envió por WhatsApp una de esas fotos a su hermana, no la que elegí yo, era otra, muy similar pero uno de sus pechos se veía perfectamente. Comentaron que era una foto preciosa y con muy buen gusto.
Comentamos esos día mi mujer y yo que había conseguido unas fotos muy chulas y yo hice hincapié que al final no es fácil hacer fotos buenas, que era una selección de las muchas fotos que le hice ese día, le enseñe el resto y coincidimos que aunque había muchas en las que posaba al final las mejores fueron en las que no se dio cuenta que le hacía foto.
Tras estos acontecimientos, ejecuté mi plana, así que me decidí y subí la foto elegida a ******** y la etiqueté. Los comentarios no se hicieron esperar, pero solo por parte de su grupo, tanto de chicas como de chicos. Fotaza!!!, Espectacular, Que guapa, y los que más me gustaron fueron los que hicieron alusión a ese día y que también estaban en la playa, ... que que bien nos lo pasamos, fantástico día, también tengo fotos de ese día, luego te las paso,.. y el mejor el de su hermana, voy a subir la que tengo yo jajaja.
Mi mujer contestó educadamente a todos los comentarios, ... gracias, a que si,... y el mejor al de su hermana, ni se te ocurra!!!. Así que la coña continuó un poco con comentarios de yo quiero ver esa foto, otro, yo también, ¿qué se ve en esa foto?, súbela y su hermana picando en plan, la subo en un rato jajaja, al final mi mujer dio casi por cerrada la conversación diciendo ... no se ve nada que no hayaís visto en directo ese día.
Lo más alucinante que de mi grupo de amistades ni un solo comentario ni un me gusta, nada. Semanas más tarde en una comida en nuestra casa con mis amigos uno comentó la foto y su mujer que no tiene ******** dijo que quería verla. Cuando se la enseñó, puso cara de sorpresa y antes de que dijera nada, mi mujer soltó:
- No hay nada tampoco de que escandalizarse, no se ve nada.
- No que va, salvo que se ve que estás en topless aunque no se vea nada.
- Ya, claro, porque hago topless.
- ¿Siempre?
- Si, claro
Ahí saltó la pareja de nuestro amigo:
- Si que lo hace, fuimos con ellos un día e hizo topless sin problema.
- ¿En serio?
- Ya te he dicho que siempre.
- Ohh, que atrevida.
- Si tu supieras. (Lo dijo con un tono de condescendencia)
- ¿El qué?
- Nada, es igual déjalo.
- ¿Qué?
- Pues si te escandaliza que haga topless, que pensarás si sabes que cuando voy a solas con mi marido, siempre hacemos nudismo.
Todas las miradas de la mesa se dirigieron a mi. Yo solo asentí con una sonrisa picarona. Lo había conseguido, no solo había logrado que todos mis amigos supieran que mi mujer hacía topless, si no que también se despelotaba en la playa. Mejor imposible.
Ahora espero ansioso esta temporada de playa, a ver cuantos se apuntan a acompañarnos a la playa.
macallister
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El tema de hablar de nudismo en grupos de amigos/as es divertido. Las caras, los comentarios. Justo el otro día, me decía el hijo pequeño de un amigo, que cuándo van a Cádiz, el padre y él nadan "fresquitos".La madre ruborizada jajaja diciendo que solos ellos, que ella no. Acaba contando que si después del parto no le termina de convencer su cuerpo desnudo, etc. Entonces da pie a enterarte de muchos datos. De una de esas veces acabamos programando un viaje de parejas, con nudismo incluido.
Erdi
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Podrías desarrollar eso? Adoro hacer nudismo con gente conocida
macallister
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Si claro, nada que la mujer de mi amigo, no se desnuda cuando van a playas nudistas, se desnuda el nene y mi amigo. El hecho de que mi mujer, mi hijo y yo lo hagamos, pues la ruboriza en plan, me gustaría hacerlo pero el hecho de cómo me quedó la barriga tras el parto, me desanima. Algo me dice que este verano sí se anima.
Si adoras nudismo entre gente conocida, conté hace un tiempo día nudista con la novia de mi mejor amigo.
boladedan
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mmm te he visto en otro hilo y me he encontrado esto... espero que le dejaras al chavalito del parque meter su pollón ahíClaro
Jazz00
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Son preciosas... En poder escribir privado mándame uno porfaClaro
Bohemio sin fe
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Habíamos ido a la playa de vacaciones mi novia y yo, junto con otra pareja de amigos. Nos llevábamos todos bien, pero las chicas eran amigas desde hacía mucho tiempo.
Alquilamos un apartamento durante unos días. El apartamento era muy nuevo y estaba bien, lo único que podría haber sido más grande. La terraza casi era más grande que el salón y solo tenia un baño.
Lo que os voy a contar, todavía lo recuerdo como si fuera ayer. Ocurrió cuando me desperté durante la madrugada con sed y ganas de hacer pis. Todavía era de noche, pero parecía que pronto iba a amanecer. Estaba adormecido y estuve un ratito en el baño. Luego fui a la cocina intentando hacer el menor ruido posible para beber agua fresquita. Al volver a mi dormitorio para seguir durmiendo, pasé por la puerta de la habitación de nuestros amigos y en ese momento se abrió la puerta y apareció la chica de la otra pareja, llevando puestas unas braguitas como única prenda. Iba con las tetas completamente visibles. Pero al verme a mí, ella parece que se asusta y le da corte que la vea, pues se cubre los pechos con sus brazos.
Paradójicamente, ese mismo día de antes estuvimos en la playa, y ella al igual que mi chica, habían estado en topless, mostrando las tetas sin importarle quien se las veía y mucho menos sin ningún pudor hacia mi.
El primer día estuvieron más tiempo con el bikini puesto, y solo mostraron las tetas por la tarde cuando parecía que había menos gente y estaba la playa más tranquila, pero ya al día siguiente, y supongo que también debido a que nos encontrábamos en otra playa donde había bastantes topless, ellas ya se animaron desde prácticamente al poco de llegar. Permaneciendo todo el día así, bañándose en tetas e incluso pasearon solo con la parte de abajo del bikini.
Las chicas se conocen desde hace tiempo y entre ellas tienen mucha confianza. Yo con el otro chico nos conocemos desde hace menos tiempo, pero también nos llevamos bien. En absoluto me importa que mi chica haga topless, y muchas veces cuando vamos solos, a ella le gusta tomar el sol sin la parte de arriba del bikini, lo que no sabía era si se atrevería delante del chico de la otra pareja, pero parece que eso no fue ningún problema. Lo mejor de esos días, fue que además de ver las tetas a mi novia todo el tiempo, también lo hacía de las de mi amiga.
Lo que no entendía era como esa noche en casa cuando la pillé, se las cubrió rápidamente sin apartar los brazos ni un momento, impidiendo que se las viera, como si no supiera ya como eran. Al día siguiente, cuando llegamos a la playa y volvió a hacer toples, comentamos lo sucedido de forma graciosa. Incluso yo le dije que pensaba que no me iba a volver a dejar ver sus tetas.
También es verdad que a medida que iban pasando los días, se notaba que ganábamos confianza. Aunque en la playa las chicas mostraban las tetas, en casa era otra cosa bien distinta, pero con el paso de los días nos íbamos mostrando de otra forma. Por ejemplo, y debido a que solo había un baño, lo aprovechábamos al máximo y mientras unos nos duchábamos también utilizábamos el espejo del lavabo. Al final yo creo que nos debimos de ver en bolas todos. Otra cosa que fue cambiando fue que cuando follabamos, los primeros días intentábamos que no nos oyera nadie, pero luego ya no nos importaba para nada que la otra pareja supiera lo que estuviéramos haciendo, e incluso si se quedaba la puerta del dormitorio abierta, no nos cortábamos con los gemidos. Al oírnos unos a otros, parecía que nos animábamos a follar. Cuando empezaban unos con los gritos, excitaban a la otra pareja y terminábamos follando también.
Fueron unos días fantásticos. En la playa, me gustaba ese ambiente tan liberal en el que se podía ver de forma tan natural esa parte del cuerpo que tanto me gusta y que en otras condiciones no se encuentra visible. Incluso el poder ver las tetas a nuestra amiga que de no estar ahí, sería imposible que se las viera.
Tras el paso de los años, mi forma de pensar ha evolucionado y no solo me gusta estar ahí para ver a todas las chicas así, sino lo que también me excita el pensar que muchos disfrutan de ver a mi chica paseándose por la playa prácticamente desnuda exhibiéndose sin importarle lo más mínimo quien la mire, incluso que la viera gente conocida como nuestros amigos.
Alquilamos un apartamento durante unos días. El apartamento era muy nuevo y estaba bien, lo único que podría haber sido más grande. La terraza casi era más grande que el salón y solo tenia un baño.
Lo que os voy a contar, todavía lo recuerdo como si fuera ayer. Ocurrió cuando me desperté durante la madrugada con sed y ganas de hacer pis. Todavía era de noche, pero parecía que pronto iba a amanecer. Estaba adormecido y estuve un ratito en el baño. Luego fui a la cocina intentando hacer el menor ruido posible para beber agua fresquita. Al volver a mi dormitorio para seguir durmiendo, pasé por la puerta de la habitación de nuestros amigos y en ese momento se abrió la puerta y apareció la chica de la otra pareja, llevando puestas unas braguitas como única prenda. Iba con las tetas completamente visibles. Pero al verme a mí, ella parece que se asusta y le da corte que la vea, pues se cubre los pechos con sus brazos.
- Había oído ruidos hacia un rato, pero pensaba que ya no había nadie por aquí - dijo mientras se iba hacia el baño y sin quitarse los brazos de sus pechos impidiendo que los pudiera ver.
Paradójicamente, ese mismo día de antes estuvimos en la playa, y ella al igual que mi chica, habían estado en topless, mostrando las tetas sin importarle quien se las veía y mucho menos sin ningún pudor hacia mi.
El primer día estuvieron más tiempo con el bikini puesto, y solo mostraron las tetas por la tarde cuando parecía que había menos gente y estaba la playa más tranquila, pero ya al día siguiente, y supongo que también debido a que nos encontrábamos en otra playa donde había bastantes topless, ellas ya se animaron desde prácticamente al poco de llegar. Permaneciendo todo el día así, bañándose en tetas e incluso pasearon solo con la parte de abajo del bikini.
Las chicas se conocen desde hace tiempo y entre ellas tienen mucha confianza. Yo con el otro chico nos conocemos desde hace menos tiempo, pero también nos llevamos bien. En absoluto me importa que mi chica haga topless, y muchas veces cuando vamos solos, a ella le gusta tomar el sol sin la parte de arriba del bikini, lo que no sabía era si se atrevería delante del chico de la otra pareja, pero parece que eso no fue ningún problema. Lo mejor de esos días, fue que además de ver las tetas a mi novia todo el tiempo, también lo hacía de las de mi amiga.
Lo que no entendía era como esa noche en casa cuando la pillé, se las cubrió rápidamente sin apartar los brazos ni un momento, impidiendo que se las viera, como si no supiera ya como eran. Al día siguiente, cuando llegamos a la playa y volvió a hacer toples, comentamos lo sucedido de forma graciosa. Incluso yo le dije que pensaba que no me iba a volver a dejar ver sus tetas.
También es verdad que a medida que iban pasando los días, se notaba que ganábamos confianza. Aunque en la playa las chicas mostraban las tetas, en casa era otra cosa bien distinta, pero con el paso de los días nos íbamos mostrando de otra forma. Por ejemplo, y debido a que solo había un baño, lo aprovechábamos al máximo y mientras unos nos duchábamos también utilizábamos el espejo del lavabo. Al final yo creo que nos debimos de ver en bolas todos. Otra cosa que fue cambiando fue que cuando follabamos, los primeros días intentábamos que no nos oyera nadie, pero luego ya no nos importaba para nada que la otra pareja supiera lo que estuviéramos haciendo, e incluso si se quedaba la puerta del dormitorio abierta, no nos cortábamos con los gemidos. Al oírnos unos a otros, parecía que nos animábamos a follar. Cuando empezaban unos con los gritos, excitaban a la otra pareja y terminábamos follando también.
Fueron unos días fantásticos. En la playa, me gustaba ese ambiente tan liberal en el que se podía ver de forma tan natural esa parte del cuerpo que tanto me gusta y que en otras condiciones no se encuentra visible. Incluso el poder ver las tetas a nuestra amiga que de no estar ahí, sería imposible que se las viera.
Tras el paso de los años, mi forma de pensar ha evolucionado y no solo me gusta estar ahí para ver a todas las chicas así, sino lo que también me excita el pensar que muchos disfrutan de ver a mi chica paseándose por la playa prácticamente desnuda exhibiéndose sin importarle lo más mínimo quien la mire, incluso que la viera gente conocida como nuestros amigos.
XabiGalicia
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Muy buena anécdota. Hubo alguna situación morbosa en playa , duchas o así?
Bohemio sin fe
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Te podría decir que no, pero tampoco sería del todo cierto, pues las situaciones que vivimos, aunque para nada fueron excepcionales, a nosotros nos gustaban. En la playa, tanto mi amigo como yo, decíamos en voz alta cosas como “por dios, que buena que está”, “menudas tetas” o “es una diosa” sin cortarnos aunque estuvieran nuestras chicas presentes. Pero ellas aprovechaban aquellos momentos y se burlaban diciéndonos cosas como “poneos boca abajo que se os va a poner dura y llamaréis demasiado la atención” o “chicos, vais a tener que haceros unas pajillas, porque nunca llegaréis a estar con chicas como esas”. Ellas, con los tíos buenorros que pasaban, tampoco se quedaban atrás y nos lo restregaban por la cara comentarios más fuertes, como “a este nos lo follariamos entre las dos, ¿verdad?”. Aquel juego que sabíamos que era mentira, y que en parte ellas siempre terminaban humillándonos con los comentarios, nos gustaba.
Luego, fruto de todo aquello, se notaba que estábamos más calientes y los polvos que se repetirían cada noche, eran muy intensos.
Tampoco teníamos ningún reparo en hablar sobre lo bien que nos lo pasábamos cuando nos íbamos cada uno a nuestra habitación. Aunque al principio no ocurría nada de todo esto, pero a medida que pasaban los días, teníamos más confianza y hablábamos del sexo y de lo que hacíamos con nuestras parejas con total naturalidad.
Si lo que esperas es que cuente algo como que follabamos todos juntos o compartíamos nuestras parejas, pues no se produjo nada de todo eso. Concebíamos nuestra relación única y exclusivamente con nuestra pareja y no aspirábamos a nada más.
Sí que es verdad que pudieron haber pasado más cosas, pero entonces éramos jóvenes e inocentes y con ver unas tetas, y unos polvos con nuestras chicas, ya nos conformábamos.
Si hubiera sido ahora, ya te digo yo que no me hubiera conformado y lo que más me hubiera gustado es follarme a mi amiga delante de su novio, o que el se follara a mi chica mientras su novia me la chupaba. O incluso guarrear un poco en la playa ante la mirada de bañistas que quedarán a última hora por allí. Pero todo eso solo es fruto de las fantasías que rondan por mi mente.
Lo más fuerte que sucedió, por contar algo, son situaciones que no son nada fuera de lo normal, pero se me han quedado grabadas con un recuerdo especial. En alguna ocasión después de terminar de follar íbamos al baño o bien para hacer pis o bien para limpiarnos un poco. Una vez recuerdo como a mi novia y a mí nos dio por ducharnos, y cuando todavía nos encontramos dentro, ya teníamos ahí a nuestros amigos esperando completamente desnudos a que termináramos para meterse ellos en la ducha. A él ya se le había bajado un poco la erección y estaba haciendo pis mientras ella nos metía prisa para asearse en la ducha, pues parecía tener evidencias de restos de semen por su rostro y por sus pechos.