Mi fantasía era recurrente....
Le pedía a los compradores de braguitas cuando las recibían, que me hiciesen un pequeño relato de cómo me las quitarían si nos encontráramos en un probador.... No les era difícil imaginar que me tenían delante, al menos por el aroma a sexo concentrado de mis braguitas.
Hay que decir que algunos tenían mucha imaginación. Y también era curioso el que frecuentemente coincidían en algún detalle de su narración.
Muchos fueron los que se ofrecieron a hacer realidad mi fantasía... Pero yo no quería a cualquier desconocido.... Cualquiera te arranca unas bragas y ni se inmuta... Yo quería al DESCONOCIDO, en mayúsculas...
Mis expectativas estaban muy altas y no quería que mi fantasía dejara de serlo sólo por cumplirla con la persona equivocada....
Así que como una profecía cumplida el desconocido apareció... Y fue capaz de acelerarme el pulso de tal forma que pensaba que podían escuchar mi corazón detrás de aquella cortina.
Paseamos por la tienda, un Zara ....y elegí un vestido para probarme...
Nos metimos al probador y me lo probé, no me gustó así que lo deseché y volví a ponerme mi vestido....
No sabía si se atrevería o no.... había gente y se escuchaba todo.
El corazón iba a 100.000 revoluciones y entonces lo hizo...
Tal y como yo había imaginado millones de veces. Puede que incluso mejor...
Sentado delante de mi, acariciando las nalgas y el xoxito....las fue bajando delicadamente para que fuera consciente de cada movimiento. Lentamente... Disfruté de cada centímetro.
Le comí la boquita aunque le hubiera comido cualquier cosa.
Después se las puso en la boca mientras me miraba y me tocaba el xoxito.... joder como me hubiera gustado parar el tiempo!
Entonces le quité el pantalón....no llevaba ropa interior, así que cogí mis braguitas y se las puse. Luego volví a ponerle el pantalón. Y entonces sin esperármelo me subió el vestido y metió su lengua en mi xoxito mmmmm delicioso.
Yo no quería hacer ruido.... sólo una fina cortina de tela nos separaba del mundo real. Pero era muy difícil no gemir de placer.
Fue muy morboso mirar a los diferentes espejos del probador y ver desde distintos ángulos cómo iba sucediendo la escena.
También fue muy morboso que tuviera el detalle de inmortalizar el momento grabándolo con el móvil, para que pueda verlo tantas veces como quiera.
Después me senté con el culito encima de su regazo para llevarlo a la tentación



Sólo Dios y yo sabemos que me lo hubiera follado allí mismo.
Después nos recompusimos y salimos de la tienda como si nada... Yo sin bragas.... alguien las llevaba puestas por y para mi.
Siento el rollo que os he metido, pero para mi fue una situación muy morbosa y me encanta compartirla con vosotros.
También pido disculpas por la calidad de las imágenes, son capturas de un vídeo .
Por muchos probadores







