Lo no tan bueno del mundo swinger

Yo siempre digo que este mundo no es para todos. Puedes tener tus fantasías y si quieres explorar debes ir poco a poco porque algún día puedes dar un paso del que te arrepientas simplemente porque has ido tan rápido que no te has dado cuenta de que no era para ti

Y eso es estupendo, hay parejas que tienen las cosas claras y llegan hasta donde llegan. Porque han sabido ir con cuidado y no engañarse a ellos mismo diciendo que iban a poder soportarlo todo.

Mir ayo tengo un consejo para todos los hombres que quieren que su mujer se acueste con otro: te haces una paja y cuando baje el libido verás como a la mayoria no os hace tanta gracia la idea. Pues eso significa que quizás no es buena idea.

Morbo, juegos, exhibicionismo... todo eos puede ser de sobra para la mayoría pero si se atreve y sale mal hay que saber decir hasta aquí y ya está.

Exacto, el día que empezamos a ir a playas nudistas, ahí, viéndola rodeada de mirones, marqué el límite. Hay que ir subiendo escalón a escalón, y no tropezar en ninguno ni sentir incomodidad hasta llegar al último. He disfrutado de muchas experiencias "bajo control", que para mí han sido "mini cuernos" muy morbosos pero sin consecuencias.
 
El mundo swinger viene siendo muy vanagloriado desde hace un tiempo, pero no todo lo que reluce es oro.

Evidentemente, si accedes a un foro en el que todo el mundo yace con la polla en la mano o si vas a un local swinger, todo el mundo te va a animar a que te tires a la piscina. Que el morbo es increíble y que la vida son dos días. Lo que nadie te dice es que será un antes y un después en tu vida de pareja, que probablemente acabe siendo un nido de inseguridades y desgracias continuadas en el tiempo, y ese morbo de ver como empotraban a tu mujer se convierte finalmente en un martillo que de forma persistente y contundente percute la relación.
Si logras superar toda esa primera amalgama de celos, llegará el día en el que de quedar con otras personas alguien comience a tener ciertos sentimientos y todo se acabe rompiendo, o bien que el 100% de la vida social se resuma a quedar únicamente con parejas del mundillo.

Hemos visto muchas parejas rotas, y en nuestro caso lo tenemos como un simple morbo esporádico más. Sin nada más allá y tan solo hacemos un par de tríos anualmente con chicas, con las que no nos damos ni los teléfonos.

Lo que nos da mucha pena es ver a todas esas personas que se han querido y amado como si no hubiera un mañana y que por ir guiadas por el morbo hayan dinamitado su relación, o casi lo que es peor, que sean adictos/as al propio mundo liberal y todo vaya vinculado a él.
Me parece muy acertado el hilo, por poner mi ejemplo, yo a mi mujer se lo propone y casi me cuesta la relación, estábamos en el mejor momento y todo se en frió, y no ha vuelto a ser igual, creo que está forma de vida no es para todos
 
Mir ayo tengo un consejo para todos los hombres que quieren que su mujer se acueste con otro: te haces una paja y cuando baje el libido verás como a la mayoria no os hace tanta gracia la idea. Pues eso significa que quizás no es buena idea.
El mejor consejo que se puede dar.Totalmente de acuerdo,mejor consejo imposible. (y) (y)
 
Yo puedo decir que nosotros hicimos intercambios de pareja ,, mi mujer muy reacia a empezar ,, pero llegó la primera pareja .. con la que estuvimos como 6 años teniendo ntercambio ,, cada vez que teníamos vacaciones viajamos y nos veíamos los fines de semana .. follariamos con ellos más de 50 veces , nos abrimos a otras parejas y en total fueron 5 parejas ,, llegó la pandemia y paramos ,, mi mujer ya no le apetece hacerlo mas .. pero cuando hablamos de las experencias no se arrepiente de nada .. así que por nuestra parte fue una época dorada ,,
 
El mundo swinger viene siendo muy vanagloriado desde hace un tiempo, pero no todo lo que reluce es oro.

Evidentemente, si accedes a un foro en el que todo el mundo yace con la polla en la mano o si vas a un local swinger, todo el mundo te va a animar a que te tires a la piscina. Que el morbo es increíble y que la vida son dos días. Lo que nadie te dice es que será un antes y un después en tu vida de pareja, que probablemente acabe siendo un nido de inseguridades y desgracias continuadas en el tiempo, y ese morbo de ver como empotraban a tu mujer se convierte finalmente en un martillo que de forma persistente y contundente percute la relación.
Si logras superar toda esa primera amalgama de celos, llegará el día en el que de quedar con otras personas alguien comience a tener ciertos sentimientos y todo se acabe rompiendo, o bien que el 100% de la vida social se resuma a quedar únicamente con parejas del mundillo.

Hemos visto muchas parejas rotas, y en nuestro caso lo tenemos como un simple morbo esporádico más. Sin nada más allá y tan solo hacemos un par de tríos anualmente con chicas, con las que no nos damos ni los teléfonos.

Lo que nos da mucha pena es ver a todas esas personas que se han querido y amado como si no hubiera un mañana y que por ir guiadas por el morbo hayan dinamitado su relación, o casi lo que es peor, que sean adictos/as al propio mundo liberal y todo vaya vinculado a él.
Nosotros hemos ido 2 veces a un club liberal pero no hemos hecho nada con nadie, entre nosotros....eso no es malo . Me gusta ver como follan otras chicas y que me vean a mi . No se está obligado a nada
 
Todas las experiencias tienen sus riesgos y su parte mala y es cierto que habitualmente solo se da visibilidad a la parte morbosa y excitante.
Yo puedo hablar de la parte mala porque la he sufrido y realmente es muy difícil separar lo sexual de lo emocional por mucho que parezca que lo tienes controlado.
Hay que vivirlo y atravesarlo y estoy convencido que aunque estés listo y lo lleves bien, el pellizco interior es imposible de controlar y asaltan las dudas en mayor o menor medida a muchas parejas.
 
No creo que sea vivir sin eso que tanto desean hacer, pero considero que no se queman ciertas etapas que son necesarias para comenzar con otras nuevas.
A día de hoy todo va muy rápido: Compras un móvil por internet y lo tienes en 24h en tu casa, te descargas una app de citas y follas esa misma noche... y en lo que descubrimos algo que nos pueda dar morbo, nos lanzamos a ello. No creo que debiera ser así, creo que hay que morbosear con ciertas ideas hasta que no se les pueda sacar más jugo, ir un paso más allá siendo todo consensuado y disfrutarlo plenamente, y así ir progresando poco a poco. Porque claro, no has visto nunca a tu chica siendo rozada por otro hombre y luego te resulta raro que te impacte viéndola en una doble penetración y chorreando lefa de otros.

Es una opinión personal, puede que impopular, pero es la que tengo. Que a día de hoy se quema todo muy rápido por la sobreexposición a la pornografía, que muchas veces gesta en nosotros una sensación de haber explorado todo y necesitar algo más, motivo por el que mucha gente se tira de cabeza al mundo swinger sin haber valorado tan siquiera el resto de impactos que puede tener en la relación más allá del morbo y la sexualidad.

Y luego vienen las madres mías. Parejas en las que una parte descubre que le flipa el mundillo y a la otra no, comenzar a tener sentimientos por terceras personas, adicción al propio ambiente y a la web que empieza por la O, relacionarse solo con gente del mundo swinger, planear las vacaciones para ir cada noche a un local...

Y precisamente porque somos humanos, no podemos ser esclavos de nuestros deseos más carnales. Debemos usar la razón y ser conscientes de nuestras decisiones a la vez que responsables de sus consecuencias. Y no estoy aquí para decirle a la gente que ha querido probar y les ha gustado o no que no deberían haberlo hecho, sino para aportar una perspectiva que alguien que no ha accedido a todo esto no posee.
Uff lo de ver a tu mujer en una doble penetración o chorreando lefa de otros me ha puesto malo. Casi no me quedaba sangre en la cabeza para seguir leyendo lo demás xDD
 
No creo que sea vivir sin eso que tanto desean hacer, pero considero que no se queman ciertas etapas que son necesarias para comenzar con otras nuevas.
A día de hoy todo va muy rápido: Compras un móvil por internet y lo tienes en 24h en tu casa, te descargas una app de citas y follas esa misma noche... y en lo que descubrimos algo que nos pueda dar morbo, nos lanzamos a ello. No creo que debiera ser así, creo que hay que morbosear con ciertas ideas hasta que no se les pueda sacar más jugo, ir un paso más allá siendo todo consensuado y disfrutarlo plenamente, y así ir progresando poco a poco. Porque claro, no has visto nunca a tu chica siendo rozada por otro hombre y luego te resulta raro que te impacte viéndola en una doble penetración y chorreando lefa de otros.

Es una opinión personal, puede que impopular, pero es la que tengo. Que a día de hoy se quema todo muy rápido por la sobreexposición a la pornografía, que muchas veces gesta en nosotros una sensación de haber explorado todo y necesitar algo más, motivo por el que mucha gente se tira de cabeza al mundo swinger sin haber valorado tan siquiera el resto de impactos que puede tener en la relación más allá del morbo y la sexualidad.

Y luego vienen las madres mías. Parejas en las que una parte descubre que le flipa el mundillo y a la otra no, comenzar a tener sentimientos por terceras personas, adicción al propio ambiente y a la web que empieza por la O, relacionarse solo con gente del mundo swinger, planear las vacaciones para ir cada noche a un local...

Y precisamente porque somos humanos, no podemos ser esclavos de nuestros deseos más carnales. Debemos usar la razón y ser conscientes de nuestras decisiones a la vez que responsables de sus consecuencias. Y no estoy aquí para decirle a la gente que ha querido probar y les ha gustado o no que no deberían haberlo hecho, sino para aportar una perspectiva que alguien que no ha accedido a todo esto no posee.
En parte estoy muy de acuerdo contigo. Llevo muchos años en este mundillo y he visto de todo, y es complicado mantener un morbo o un gusto, y no convertirlo en obsesion. La obsesion es cuando es patologico, no ves el sexo si no es en trios y de esta forma, y eso no es para nadar sano (mi opinion

Despues, hay muchas personas que confunden fantasia, o porno, con realidad. En la fantasia, todo son pollones, superorgasmos, mujeres chorreantes, squirt yu siempre hay ganas. En la vida real, hay olores, hay cansancios, hay el postpolvo, no siempre se pone dura y no siempre se esta con ganas.. y eso hay que entenderlo y tratarlo. Todos tenemos nuestra vida, y todos queremos discrecion y tranqulidad, y poder vivir el morbo desde la seguridad, algo que no siempre es posible.

Pienso que, por parte de muchos aspirantes, hemos hecho un daño enorme a todo este ambiente, tanto por exigencias, como por actitudes, como por no entender que la realidad es muy diferente, y que una pareja que se juega esta opcion, tiene que entrar muy segura y hay que dejarla tranquila, a su ritmo. Y aun asi, es como todo... puede acabar a saber como.. pero esto te puede pasar viviendo el mundo liberal, o cambiando de trabajo y que el chico que se sienta al lado de tu mujer sea super simpatico y le despierte algo.. es parte de la vida...
 
C
El mundo swinger viene siendo muy vanagloriado desde hace un tiempo, pero no todo lo que reluce es oro.

Evidentemente, si accedes a un foro en el que todo el mundo yace con la polla en la mano o si vas a un local swinger, todo el mundo te va a animar a que te tires a la piscina. Que el morbo es increíble y que la vida son dos días. Lo que nadie te dice es que será un antes y un después en tu vida de pareja, que probablemente acabe siendo un nido de inseguridades y desgracias continuadas en el tiempo, y ese morbo de ver como empotraban a tu mujer se convierte finalmente en un martillo que de forma persistente y contundente percute la relación.
Si logras superar toda esa primera amalgama de celos, llegará el día en el que de quedar con otras personas alguien comience a tener ciertos sentimientos y todo se acabe rompiendo, o bien que el 100% de la vida social se resuma a quedar únicamente con parejas del mundillo.

Hemos visto muchas parejas rotas, y en nuestro caso lo tenemos como un simple morbo esporádico más. Sin nada más allá y tan solo hacemos un par de tríos anualmente con chicas, con las que no nos damos ni los teléfonos.

Lo que nos da mucha pena es ver a todas esas personas que se han querido y amado como si no hubiera un mañana y que por ir guiadas por el morbo hayan dinamitado su relación, o casi lo que es peor, que sean adictos/as al propio mundo liberal y todo vaya vinculado a él
Convengamos que todos los dias, hay cientos o miles de parejas y matrimonios "normales" o sea ajenos al mundo SWINGER
que se terminan divorciando, separando o lastimando, y para nada tuvo que ver el universo swinger en esa separación o conflicto
de pareja.
Así, que -a mi modesto entender- las posiblidades de que el ingreso en la cultura swinger pueda afectar negativamente a una
pareja o matrimonio, son las mismas entre parejas SWINGER y las NO SWINGER.
Soy una mujer casada con el hombre de mi vida, y -con mi esposo- fuimos "iniciados" en el intercambio de parejas, por un matrimonio
swinger que conocimos en unas vacaciones en Brasil.
Nos gustó tanto la experiencia que nunca mas paramos, y nuestra búsqueda por nuevos placeres sexuales sigue hasta hoy con mucha
complicidad mutua y una confianza creciente.
Respecto de tu pregunta sobre lo NEGATIVO que podemos encontrar en la cultura swinger, hay muchas cosas, pero -a mi entender-
ninguna resultante de la cultura SW sino de la misma parte "oscura" de la personalidad humana..
1) El mundo swinger no es para pareja en crisis...
Si una pareja en desplome incursiona en el ambiente swinger, eso va a precipitar la crisis y terminaran en separación y divorcio.
Y seguramente van a culpar a la experiencia swinger como la "culpable" de su separación.
2) El mundo swinger no es para personas inseguras.
Un marido inseguro, con celos reprimidos, terminará "pasandole tarifa" a su esposa si ella se mostró liberal por demás en algun
encuentro.
Siempre que un hombre -ajeno al ambiente swinger- me pregunta si estoy segura de que mi marido me ama, le respondo.
"sé que mi marido me ama, y me lo confirma cada vez que me besa, luego de que otro hombre eyaculó en mi boca..."
3) El ambiente swinger no es para parejas con dificultades económicas.
Al margen de que las dificultades económicas, -normalmente- "enfrían" la sexualidad de la pareja, el integrarse a la cultura
swinger exige que un matrimonio o pareja esté dispuesto a invertir algun dinero en profundizar la experiencia.
Hace unos años participé, -con mi esposo- de un crucero exclusivo para parejas swinger, y no era barato.
Es que -lo que yo llamo- el VERDADERO ambiente swinger, no se dá precisamente en los locales SWINGER del tipo
"comercial" donde cualquiera puede concurrir y pagar el ingreso.
El verdadero ambiente swinger transcurre en alejadas casonas rurales, donde concurren parejas seleccionadas y por
exclusiva invitación.
En agosto con mi marido pretendemos visitar Cap d'Agde y somos conscientes de que no es barato.

En mi caso, me encantaría que la CULTURA SWINGER llegara a mas parejas y matrimonios.
Que el acto de COMPARTIR LA ESPOSA fuera parte de la sexualidad NORMAL de todo marido
Así se eliminarían los celos y la violencia que de eso deviene .
 
Tampoco me gusta polemizar, así que apenas voy a exponer mi punto de vista acerca de las causas de la violencia en la pareja.
Estadísticamente la mayor cantidad de feminicidios ( o femicidios ) se producen cuando una mujer decide terminar una relación
con un hombre, ya sea ésta de noviazgo o de matrimonio o union estable.
¿ Porque un hombre querría matar a la compañera de toda su vida ?
¿Porque dañaría a aquella mujer que -hasta ayer- decía amar y vivir para ella?.
La respuesta es, porque no soporta la idea de que esa mujer, ahora comience a acostarse con otro hombre.
Prefiere matarla o destruir su belleza antes que ella duerma con otro.
También -estadísticamente- está comprobado que la mayor causa de violencia intrafamiliar son LOS CELOS
Los celos y los problemas económicos son causa de conflictos de pareja.
Pero como este es un foro sobre temas sexuales, sostengo que de propagarse la CULTURA SWINGER, ese
temor que muchos hombres tienen de aceptar que su mujer se acueste con otro desaparecería.
Y con esa nueva cultura, muchas de las violencias que se producen cuando una pareja se termina serían }
eliminadas.
Y no es apenas una conjetura.
LO VIVO EN MI PROPIO MATRIMONIO
Cuando con mi esposo convenimos eliminar los celos y la posesividad nuestra relación se vió enriquecida
En nuestro caso, a mi esposo no solo no le molesta que yo duerma con otros, sino que hasta lo disfruta.
Creo que el acto de compartir su mujer es un paso en la EVOLUCIÓN del ser humano.
Y por eso veo en los hombres que disfrutan que su mujer duerma con otros, como hombres EVOLUCIONADOS.
Mi objetivo es desterrar lo que yo denomino "MENTALIDAD TALIBÁN" donde los hombres cree que son
"propietarios" de una mujer y pueden disponer de su vida como si de un objeto se tratara.
Cuando hay consentimiento NO HAY ADULTERIO, aunque yo uso la expresión "soy adúltera" para definirme
lo hago para que se entiende mi estilo de vida, aunque siempre aclaro que "soy adultera con la complicidad
de mi esposo"
O sea, mi marido no es un "pelele" ni un "cornudo sumiso", es un HOMBRE con mayúscula y se merece todo
mi amor y mi respeto.
Lo amo, amo a mi marido y con los otros es solamente sexo.
Además, mi esposo disfruta de las mismas libertades que él me dá asi que nuestra relación es libre e
igualitaria.
Créeme que las únicas discusiones que tenemos con mi esposo, es cuando decidimos donde nos iremos
de vacaciones o el color del coche que vamos a escoger cada vez que lo cambiamos por uno mas nuevo.
 
Última edición por un moderador:
El mundo swinger viene siendo muy vanagloriado desde hace un tiempo, pero no todo lo que reluce es oro.

Evidentemente, si accedes a un foro en el que todo el mundo yace con la polla en la mano o si vas a un local swinger, todo el mundo te va a animar a que te tires a la piscina. Que el morbo es increíble y que la vida son dos días. Lo que nadie te dice es que será un antes y un después en tu vida de pareja, que probablemente acabe siendo un nido de inseguridades y desgracias continuadas en el tiempo, y ese morbo de ver como empotraban a tu mujer se convierte finalmente en un martillo que de forma persistente y contundente percute la relación.
Si logras superar toda esa primera amalgama de celos, llegará el día en el que de quedar con otras personas alguien comience a tener ciertos sentimientos y todo se acabe rompiendo, o bien que el 100% de la vida social se resuma a quedar únicamente con parejas del mundillo.

Hemos visto muchas parejas rotas, y en nuestro caso lo tenemos como un simple morbo esporádico más. Sin nada más allá y tan solo hacemos un par de tríos anualmente con chicas, con las que no nos damos ni los teléfonos.

Lo que nos da mucha pena es ver a todas esas personas que se han querido y amado como si no hubiera un mañana y que por ir guiadas por el morbo hayan dinamitado su relación, o casi lo que es peor, que sean adictos/as al propio mundo liberal y todo vaya vinculado a él.
Pero acaso la vida en pareja tradicional no existen riesgos??? yo conozco a muchas parejas rotas y son relacion conservadoras de toda la vida. ahora bien este es un mundo en el que hay que hay que hablar las cosas con tu pareja muy muy bien y tener comunicacion y si no se esta agusto pues nose lleva a cabo y listo, o se puede probar y si no gusta listo.
a mi me pone mucho imaginarme a mi pareja teniendo sexo con otra persona. eso en la cama en un contexto de morbo y de sexo.
en la vida diaria no me pone e incluso me enfadaria que me tratase como un cornudo. ahi esta la clave en hablar las cosas.
 
Pero acaso la vida en pareja tradicional no existen riesgos??? yo conozco a muchas parejas rotas y son relacion conservadoras de toda la vida. ahora bien este es un mundo en el que hay que hay que hablar las cosas con tu pareja muy muy bien y tener comunicacion y si no se esta agusto pues nose lleva a cabo y listo, o se puede probar y si no gusta listo.
a mi me pone mucho imaginarme a mi pareja teniendo sexo con otra persona. eso en la cama en un contexto de morbo y de sexo.
en la vida diaria no me pone e incluso me enfadaria que me tratase como un cornudo. ahi esta la clave en hablar las cosas.
tambien os digo una cosa eso de los locales swinger no me mola y eso que no he ido.
 
Yo podría contaros mi experiencia, pero no se si os interesará. Es un punto de vista distinto porque fui uno de los juguetes de una pareja abierta.
 
Os voy a contar una historia desde otra perspectiva. Aquí es frecuente que las parejas entren y comenten sus experiencias de intercambio, de dogging o de cuernos consentidos. Yo os voy a contar la historia de Juan. Dado que es una historia real, todos los nombres y situaciones los he cambiado, por si alguien pudiera sentirse señalado.

Como decía es la historia de Juan, un tipo de mediana edad que nunca imaginó poder estar envuelto en un tema de cuernos consentidos porque era un tipo tradicional. Idealista, romántico y monógamo. Estaba casado desde hacía mucho tiempo y su pareja tenía muchos problemas, nunca había sentido deseo sexual y en consecuencia afectó a su relación con Juan. Pese a ello tenían dos hijos pero con el tiempo el distanciamiento físico era tal que ya no compartían nada sexual.

Al principio de su relación, consciente Juan de que había un problema entre ellos llegó a entender que quizás el problema residía en él y le propuso a su compañera que se acostara con otros hombres a ver si había alguno que despertara su deseo. Su compañera lo descartó. Ella no sentía deseo sexual por nadie.

Total, que cuando no puedes comer en casa pues tratas de comer fuera. Y así Juan comenzó a entrar en páginas y foros sexuales y encontró a otras personas que buscaban lo mismo que él. Al principio se trataba de mujeres que vivían solas y que tenían necesidades. Lo curioso es que la mayoría no solo buscaban encuentros sexuales sino que también necesitaban de una relación emocional.

Juan es un tipo enamoradizo, quizás porque nunca se ha sentido querido, ni deseado, ni que despertara el interés de las mujeres. No es un tipo especialmente atractivo, más bien es feo, sin llegar a ser desagradable. Pero vamos, no es el hombre por el que una mujer pierda la cabeza; al menos de primeras.

Desde mucho tiempo atrás a Juan le gustaba una compañera de trabajo. La llamaremos Mar, una chica pelirroja, muy atractiva. Ella estaba acostumbrada a llamar la atención y estableció cierta sintonía con Juan al que apreciaba de alguna forma; evidentemente no como a Juan le hubiera gustado.

En cierta ocasión, años después, cuando podían hablar de lo que sentían el uno por el otro, ella le dijo una frase muy bonita: “Tu no eres un hombre que destaque por si físico, pero en cuanto abres la boca y muestras lo que eres, entonces te conviertes en un hombre tremendamente interesante”. Juan lo consideró un halago. Sabía que era un hombre sensible, culto, cariñoso y que sabía estar en cualquier situación que se le exigiera. Pero en el fondo lo que Juan llevaba toda la vida buscando era despertar el interés de una mujer y que se enamorara de él.

Curiosamente le llegó lo que buscaba pero la vida es muy cabrona y por lo general gustas a quien no te gusta y quien te gusta no te corresponde. María era una compañera de trabajo desde hace muchos años, se conocían muy bien y cuando se separó le propuso a Juan irse a vivir juntos. Estaba buena pero a Juan no le gustaba del todo, así que se limitaron a una temporada de polvos, por satisfacer las ganas de ambos.

Luego apareció otra mujer separada que también se conocían del ámbito laboral. Ésta era muy peligrosa porque buscaba un amor romántico y lo que pretendía era adaptar a Juan a la imagen que ella necesitaba de un hombre. Creía conocerle, pero en absoluto y cuando Juan hacía algo que a ella no le encaja le decía siempre: “Tú no eres así”. Con esta no hubo más que un encuentro sexual, apresurado, zafio y desastroso.

Juan compaginaba todas estas experiencias con mujeres desconocidas que encontraba en internet. Una que trabajaba en una línea erótica donde se pasaba la jornada estimulando a tipos para que se pajearan por teléfono con ella. Otra jovencita que estaba harta de los jóvenes y buscaba un maduro que le diera otra visión del sexo. Otra romántica a la que le gustaba escribir y que le gustaba mucho pero nunca pudieron encontrarse. Otra casada, con una crisis brutal pero que no se atrevía a dar el paso de abandonar a un marido tóxico y salir del pueblo que la axfisiaba. Otra recién separada que vivió con un marido de esos torpes, de sexo de los sábados por la noche, misionero, cuatro jadeos y ya está. En cuanto se separó descubrió un mundo sexual que para ella era totalmente desconocido. Con ella pasó dos fines de semana donde folló más que en toda su vida. Era una buena mujer, pero además se sexo también buscaba algo más que no llegó a despertar en Juan. Fueron muchas más, aventuras esporádicas, encuentros sin sexo, encuentros con sexo…

Hasta que en una de esas páginas apareció Raquel. Una mujer casada, con Carlos. Ella era enfermera y él conductor de autobús. Vivían bastante bien en un adosado a las afuera de la ciudad. Eran del mismo pueblo, sus familias se conocían y se llevaban bastante bien. Raquel no era una mujer especialmente atractiva, había que fijarse en ella para descubrir unos bonitos ojos verdes, un cuerpo menudo pero muy equilibrado y una dulzura que era su especial característica. Se trataba de una pareja en la que él disfrutaba exhibiéndola. Les gustaba mucho hacer fotos, les daba mucho morbo y las publicaban en varias páginas de contenido sexual.

A Raquel le gustaba mucho posar desnuda y no tenía el más mínimo inconveniente por despelotarse en el monte, en la playa o donde fuera para hacer fotos. Le daba morbo no solo posar sino que luego otros hombres la vieran y la desearan. A Carlos, su pareja, le gustaban las fotos muy obvias, donde ella se espatarrara y mostrara el coño, el culo, todo bien abierto y a juicio de Juan, muy grosero. Era una pena que una mujer que podía ser tan atractiva se mostrara tan vulgar. Pero esa era la opinión de Juan. Carlos solía publicar las fotos de Raquel y añadía textos del estilo: “¿Os gusta? ¡Cabrones! A que os la follaríais; pero soy yo quien lo hace.” Eso era lo que él buscaba, lo que le excitaba.

A Juan y a Raquel les costó conectar porque Juan no busca vulgaridad, buscaba a alguien especial. Juan buscaba una mujer atractiva, que posara como una modelo, de forma insinuante pero sin mostrarse tan vulgar. Eso le echaba para atrás de ella y por otro lado el cuerpo de Raquel le encantaba porque si bien era una mujer baja tenía unas formas muy delicadas, con unas proporciones correctas y cuando hacía fotos “más artísticas” era fascinante.

Poco a poco, tras muchas charlas e intercambio de fotos, consiguió que Raquel influyera en su marido y le hiciera fotos más “contenidas” y a partir de ese momento comenzó a ganar muchos más seguidores. Juan descubrió en Raquel no solo un cuerpo bonito sino también una mujer sensible, con la que podía hablar de todo y con la que compartía muchas emociones.

La relación entre ambos comenzó a hacerse más fluida y diaria. Se intercambiaron teléfonos y se hablaban con frecuencia. Él le escribía muchos textos y por las noches compartían sesiones de webcam donde a veces hablaban los tres: Carlos, Raquel y Juan si bien el primero estaba poco tiempo y dejaba que Raquel y Juan hablaran y hablaran.

Llegó el inevitable momento donde las palabras ya no son suficientes y Raquel y Juan sintieron la necesidad de verse, de compartir espacio y tiempo. Quedaron en verse un fin de semana en una ciudad a mitad de camino. Raquel estaba ilusionada, Juan estaba sintiendo dependencia emocional de ella y Carlos era cómplice y lo sabía todo, dónde se produciría el encuentro y cuándo.

Raquel decía: “Carlos sabe lo importante que es para mí estar contigo y me facilita la cosa.” Y llegó el día del encuentro. Fue en una visita de trabajo que tuve que hacer a su ciudad. Otro usuario de la página, casualmente, también estaba en la ciudad y quedamos los tres. Nos vimos al final de la tarde, fuimos a cenar, tomamos unas copas y nos despedimos. De camino a mi hotel recibí dos mensajes: uno del compañero que había quedado con nosotros, decía “Suerte, he sentido que estaba de más en esa cita. Vosotros dos tenéis que estar juntos.”

El segundo mensaje era de Raquel: “¡Me estoy arrepintiendo de no haberme ido contigo al hotel!”

Así que fue inevitable organizar otro encuentro. Fue un fin de semana cargado de emociones, una montaña rusa. Constaté que me había enamorado de ella pero ella solo pensaba en mí, palabras textuales: “Como la posibilidad de echar el polvo del año”. De ese fin de semana me llevé una buena colección de frases del estilo: “Nosotros tenemos compartimientos estancos. Mi relación con Carlos es maravillosa y a ti te aprecio pero no influye una cosa en otra.”

A lo largo del fin de semana le llamó por teléfono un par de veces. Yo, prudentemente, me retiraba para que ellos pudieran hablar. Me resultaba muy incómoda aquella situación. No era más que el juguete de una pareja. Podría haber sido distinto si yo hubiera asumido mi rol, pero los sentimientos no me permitían limitarme al papel que me habían asignado en aquella relación.

Volví hecho polvo, destrozado emocionalmente. Me costó mucho recuperarme. Desde nuestro segundo encuentro no hemos vuelto a tener contacto. Rompí aquella relación. Ellos dos estaban dispuestos a seguir con el juego, especialmente ella. Pero yo no podía estar viéndome con alguien por quien sentía algo no correspondido y que me hacía sufrir.

No se si siguen juntos. Si su relación sigue abierta. Lo único cierto es que abandonaron la página donde nos conocimos.

Juan está mejor que en aquellos años, lo cual no quiere decir que sea feliz, que se sienta querido. Lo único que ha conseguido es entender su vida, no la vida en general, sino solamente la suya, lo que ha hecho, lo que ha sentido, lo que ha vivido y lo que ahora es.
 
No, no compro ese relato de mundo feliz de maridos cornudos y dóciles y de estadísticas (la ciencia de la mentira) que demuestran lo que yo defiendo y mi modo de vida. Lo NORMAL, lo inmensamente normal, lo que ocurre siempre, al menos en España, son cientos de miles de, sino millones de separaciones, divorcios y rupturas, sin violencia de ningún tipo. Entre cornudos y no cornudos.
Entiendo porque no lo compras pero no comparto tu opinión por que igual piensas que el ser un cornudo es algo humillante, bochornoso, quizás pienses que es demente o vete tu a saber, pero lo que dice @Mariana1983 no es que sea lo exacto pero si tiene parte de razón.
Veras, la felicidad no se compra, ni se fabrica, la felicidad se vive pero para vivirla antes debes encontrarla y hay muchas formas de encontrarla, en este caso hablamos de cornudos, termino que a mi me gusta poco y no, yo no soy cornudo, me gusta el sexo y me gusta la libertad de poder escoger lo que me gusta sin que nadie se meta en eso que me gusta y/ó comparto.
Tu igual ves ofensivo o traicionero que tu mujer te ponga los cuernos con otro, independientemente de si hay o no consentimiento, pero estoy seguro que no lo verías igual si fueras tu el que lo hicieses con la mujer de otro haya o no dicho consentimiento, aunque apuesto que sentirías mas morbo si existe dicho consentimiento por parte del marido.
Los celos se producen por una inseguridad en las personas y dicha inseguridad en la mayoría de los hombres se manifiesta con la violencia fisica o psíquica, haya o no motivo alguno, las personas con inseguridades se vuelven controladoras, manipuladoras y hasta violentas que las vuelve en contra del respeto y libertades a las personas por la cual son rodeadas, sea la esposa o los hijos que tengan en común y es uno de los motivos por el cual cada vez mas mujeres se separan en España. Hay otros motivos de separaciones en España, pero te puedo asegurar que el que un matrimonio que tenga confianza y comunicación y practiquen la libertad sexual de la forma que ellos vean y consideren correctas no es uno de esos motivos de separación, si no mas bien lo contrario, es una forma de vivir mas unidos y con mayor pasión, aunque eso si, hay que tener las ideas muy claras antes de dar el paso porque la sociedad es muy mezquina y cuando dudamos en realizar estos juegos es mas por el miedo a que pensaran si sale a la luz que de la pareja en si, por supuesto no debe haber fisuras en la relación y ver esto como una posible vía de escape, el morbo nos pone a todos pero con cabeza, y ojo, no quiero ni he querido decir que tu seas un violento o un maltratador, simplemente te quiero hacer ver que igual tu punto de vista no es del todo objetivo y que igual deberías mirar desde otras perspectivas
Yo podría contaros mi experiencia, pero no se si os interesará. Es un punto de vista distinto porque fui uno de los juguetes de una pareja abierta.
No fuiste un juguete, te has sentido un juguete porque desde un primer momento buscabas algo mas que solo sexo y ellos tenían muy claro que para ellos solo era un juego, tu lo confundiste con sentimientos. Las palabras muchas veces hacen las cosas mas bonitas o excitantes, generan morbo y expectativas que pueden a llegar ser falsas y confundirse, pero no tienen que ser ciertas, solamente forman parte de un juego que si no sabes distinguir te puede fastidiar y mucho hasta llegar a la decepción o frustración.

Hay que saber distinguir entre una pelota blanca o una blanca en pelota.
 
En mi opinión y bajo mi experiencia, pienso que tiene que haber mucha complicidad, transparencia y que cuando todo empieza a derrumbarse es cuando uno de los dos o ambos dos, comienzan a querer vivir estas experiencias por su cuenta y sin compartirlas con la otra parte. Esto es el principio del fin. El propio egoísmo, así me lo parece a mi, de vivir ese morbo o situación excitante a costa de cualquier cosa es donde comienzan las desconfianzas, engaños, etc.

Si todo es consensuado, pues no hay ningún problema, pero si me lo monto por mi cuenta para mi propia satisfacción sin contar con mi pareja y empiezo con estos engaños, pues es egoísmo puro y duro.

Si esa confianza se rompe, no se puede recomponer. Mi matrimonio se rompió debido a esto y no se lo recomiendo a nadie. O se está muy seguro o no vale la pena.
 
En mi opinión y bajo mi experiencia, pienso que tiene que haber mucha complicidad, transparencia y que cuando todo empieza a derrumbarse es cuando uno de los dos o ambos dos, comienzan a querer vivir estas experiencias por su cuenta y sin compartirlas con la otra parte. Esto es el principio del fin. El propio egoísmo, así me lo parece a mi, de vivir ese morbo o situación excitante a costa de cualquier cosa es donde comienzan las desconfianzas, engaños, etc.

Si todo es consensuado, pues no hay ningún problema, pero si me lo monto por mi cuenta para mi propia satisfacción sin contar con mi pareja y empiezo con estos engaños, pues es egoísmo puro y duro.

Si esa confianza se rompe, no se puede recomponer. Mi matrimonio se rompió debido a esto y no se lo recomiendo a nadie. O se está muy seguro o no vale la pena.
La culpa no es culpa del mundo cuckold ya sea por parte del hombre o de la mujer, por cierto tamnbien hay mujeres que les excita ver a su pareja con otras chicas, no solo es cosa de hombres, auqnue mayoritariamente es cosa de hombres, y como digo no es culpa del mundillo es culpa de la persona o mejor de las personas que entran ya que no esten preparadas o listas para ello, se necesita mucha comunicacion y mucha humildad por parte de los 2 y de hablar las cosas, y aun asi existe el riesgo de que no vaya bien... pero acaso no conoceis parejas que se han separado y eran tradicionales??? no es problema del mundo si aparecen las inseguridades, si aparecen hay que parar y hablarlo. con respecto a que te ñpuedes enamorar el corneador debe tener metido en la cabeza a sangre QUE ES SOLO SEXO. creeis que si yo y mi pareja que ella por los 30 años y yo tambien, creeis que se va a enamorar si lo hacemos con un chico de mas de 40 años ? LO DUDO MUCHO.
 
La culpa no es culpa del mundo cuckold ya sea por parte del hombre o de la mujer, por cierto tamnbien hay mujeres que les excita ver a su pareja con otras chicas, no solo es cosa de hombres, auqnue mayoritariamente es cosa de hombres, y como digo no es culpa del mundillo es culpa de la persona o mejor de las personas que entran ya que no esten preparadas o listas para ello, se necesita mucha comunicacion y mucha humildad por parte de los 2 y de hablar las cosas, y aun asi existe el riesgo de que no vaya bien... pero acaso no conoceis parejas que se han separado y eran tradicionales??? no es problema del mundo si aparecen las inseguridades, si aparecen hay que parar y hablarlo. con respecto a que te ñpuedes enamorar el corneador debe tener metido en la cabeza a sangre QUE ES SOLO SEXO. creeis que si yo y mi pareja que ella por los 30 años y yo tambien, creeis que se va a enamorar si lo hacemos con un chico de mas de 40 años ? LO DUDO MUCHO.
Eso nunca se sabe, por mucho que ahora se vea improbable, en un momento determinado puede ser lo que dinamite una relación, sea del tipo que sea, sea hombre o mujer, sea del mundillo que sea.

Ahora, desde que pasó aquello, pongo mucho más cuidado en eso y aún así puede pasar y con mi pareja actual procuramos no pasar los límites que pueden afectarnos en ese sentido. El riesgo siempre está ahí, somos nosotros quienes elegimos con quien y de qué manera vivir nuestra sexualidad y disfrutarla como nos plazca, pero siempre desde el respeto.
 
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