NO HAY COLOR...
Bon día, parella...
Recoso del hechizo de vuestra publicación, con el dulce placer todavía dibujado en mis retinas, tengo que decir que ni la ingenua creatividad del atrevido y descarado Toulouse-Lautrec, expresada a través de sus vertiginosos pinceles, podría imaginar plasmar en sus óleos la elegancia seductora de una musa como la que aquí se exhibe, siempre tan virtuosa, impetuosa, perseverante... brillante.
Seguramente citado maestro, amante de la seducción y los atributos de la feminidad, rendiría culto a los muchos encantos a los que esta hermosa mujer nos tiene acostumbrados, y de los que nunca me canso. Culto que venero a través de mis palabras y la admiración de mis sueños distantes y arrolladores que, como un vertiginoso torrente de emociones y aguas revueltas..., que me arrastran a los suburbios de aquel París de finales del siglo XXI y encienden los mismos deseos que él acostumbraba a admirar y pintar.
Con la pasión que el maestro puso en sus obras, mis palabras, dictadas por la fascinación que me provocan los hermosos atributos de esta maravillosa mujer y el cuidadoso deseo que me empuja a describir lo que hace latir esa delicada parte de mí, que en este sentido de fotos aparece decorando tu vientre, a modo de bello adorno de ese elegante liguero, envuelto a tu delicada y suave cintura..., te elogian, te halagan, te veneran. Y es que, enfermo como el artista, en este "delirium" que supone la abstinencia de ti, martirizo mis sueños, flagelo mis palabras, grito en silencio, te admiro a ciegas, sueño incluso despierto...
Algún día quizás, tenga mi homenaje como ha recibido hoy el artista y me sienta privilegiado de saber que es de locos vivir soñando sin miedos... ¡Bendita l

cura!
No encuentro musa mejor, merecedora de mis delirios, que se haya ganado mis deseos y a quien deba la admiración que profeso. La elegancia de tus publicaciones, que te caracteriza, tu sinuosa belleza y los hermosos encantos que luces con tanto arte y seducción, tu manera virtuosa de posar para la cámara, sabiendo de los muchos sentimientos que despiertas, tu sofisticada osadía capaz de inspirar deseo y pasión, creatividad y lujuria..., todo ello son razones suficientes para hacerme creer que, como el mismísimo Henri, puedo plasmar ese momento en mi colección de arte de mis recuerdos, aquellos que me hablan de ti.
Sé que estoy a años luz de ser un artista a tu medida, no hay color en mi obra ni virtud en mí que pueda recompensar tu sublime contribución a este foro y a mis sueños, pero no puedo sino intentar agradecer los buenos momentos que cada vez me regalas.
Lleno de sueños de ti y de deseos...
Tu ferviente e iluso Soñad

r.
Pd: gracias al fotógrafo por retratar una vez más, desde la elegancia y la seducción, los muchos encantos de esta irresistible mujer. Con estas palabras regreso a mi delirio...

Mai deixeu de somiar i inspirar somnis