¿Soy adicta al sexo con mis 26 años o simplemente estoy enferma de deseo?

Desde los 14 mi vida gira alrededor del sexo. No es solo pensar en ello, es vivirlo de forma obsesiva. Me masturbo cada día, varias veces, y con mi marido nunca tengo bastante: cuando él se queda sin fuerzas, yo sigo encendida.

El problema es que con el tiempo lo normal dejó de llenarme. He buscado experiencias cada vez más extremas, me he metido en sitios y situaciones que jamás pensé que probaría… y sí, incluso he cruzado líneas que rompieron mi matrimonio más de una vez.

He estado en lugares donde se juega con el anonimato, he tenido encuentros pagados solo por la adrenalina de probar algo distinto, y lo peor es que mientras lo hacía sentía que no podía detenerme. Es como si mi cuerpo mandara más que mi cabeza.

Ya no sé si esto es solo tener un deseo inagotable o si lo mío tiene nombre: ¿adicción al sexo?”
Bienvenida al club, somos muchos así 😜
 
Desde los 14 mi vida gira alrededor del sexo. No es solo pensar en ello, es vivirlo de forma obsesiva. Me masturbo cada día, varias veces, y con mi marido nunca tengo bastante: cuando él se queda sin fuerzas, yo sigo encendida.

El problema es que con el tiempo lo normal dejó de llenarme. He buscado experiencias cada vez más extremas, me he metido en sitios y situaciones que jamás pensé que probaría… y sí, incluso he cruzado líneas que rompieron mi matrimonio más de una vez.

He estado en lugares donde se juega con el anonimato, he tenido encuentros pagados solo por la adrenalina de probar algo distinto, y lo peor es que mientras lo hacía sentía que no podía detenerme. Es como si mi cuerpo mandara más que mi cabeza.

Ya no sé si esto es solo tener un deseo inagotable o si lo mío tiene nombre: ¿adicción al sexo?”
Te entiendo perfectamente
 
Desde los 14 mi vida gira alrededor del sexo. No es solo pensar en ello, es vivirlo de forma obsesiva. Me masturbo cada día, varias veces, y con mi marido nunca tengo bastante: cuando él se queda sin fuerzas, yo sigo encendida.

El problema es que con el tiempo lo normal dejó de llenarme. He buscado experiencias cada vez más extremas, me he metido en sitios y situaciones que jamás pensé que probaría… y sí, incluso he cruzado líneas que rompieron mi matrimonio más de una vez.

He estado en lugares donde se juega con el anonimato, he tenido encuentros pagados solo por la adrenalina de probar algo distinto, y lo peor es que mientras lo hacía sentía que no podía detenerme. Es como si mi cuerpo mandara más que mi cabeza.

Ya no sé si esto es solo tener un deseo inagotable o si lo mío tiene nombre: ¿adicción al sexo?”
Si alguna vez te pilla sola y te gusta jugar puedes contar conmigo. Háblame al privado si quieres.
 
Desde los 14 mi vida gira alrededor del sexo. No es solo pensar en ello, es vivirlo de forma obsesiva. Me masturbo cada día, varias veces, y con mi marido nunca tengo bastante: cuando él se queda sin fuerzas, yo sigo encendida.

El problema es que con el tiempo lo normal dejó de llenarme. He buscado experiencias cada vez más extremas, me he metido en sitios y situaciones que jamás pensé que probaría… y sí, incluso he cruzado líneas que rompieron mi matrimonio más de una vez.

He estado en lugares donde se juega con el anonimato, he tenido encuentros pagados solo por la adrenalina de probar algo distinto, y lo peor es que mientras lo hacía sentía que no podía detenerme. Es como si mi cuerpo mandara más que mi cabeza.

Ya no sé si esto es solo tener un deseo inagotable o si lo mío tiene nombre: ¿adicción al sexo?”
El sexo puede ser muy adictivo. Ir innovando dentro de las prácticas sexuales incrementa la excitación.

A mí también me pasa. Siempre estoy pensando en masturbarme, en exhibirme, etc.
 
Desde los 14 mi vida gira alrededor del sexo. No es solo pensar en ello, es vivirlo de forma obsesiva. Me masturbo cada día, varias veces, y con mi marido nunca tengo bastante: cuando él se queda sin fuerzas, yo sigo encendida.

El problema es que con el tiempo lo normal dejó de llenarme. He buscado experiencias cada vez más extremas, me he metido en sitios y situaciones que jamás pensé que probaría… y sí, incluso he cruzado líneas que rompieron mi matrimonio más de una vez.

He estado en lugares donde se juega con el anonimato, he tenido encuentros pagados solo por la adrenalina de probar algo distinto, y lo peor es que mientras lo hacía sentía que no podía detenerme. Es como si mi cuerpo mandara más que mi cabeza.

Ya no sé si esto es solo tener un deseo inagotable o si lo mío tiene nombre: ¿adicción al sexo?”
No veo mal amar tanto el sexo. Pero creo que a ti te está haciendo un problema.
 
Desde los 14 mi vida gira alrededor del sexo. No es solo pensar en ello, es vivirlo de forma obsesiva. Me masturbo cada día, varias veces, y con mi marido nunca tengo bastante: cuando él se queda sin fuerzas, yo sigo encendida.

El problema es que con el tiempo lo normal dejó de llenarme. He buscado experiencias cada vez más extremas, me he metido en sitios y situaciones que jamás pensé que probaría… y sí, incluso he cruzado líneas que rompieron mi matrimonio más de una vez.

He estado en lugares donde se juega con el anonimato, he tenido encuentros pagados solo por la adrenalina de probar algo distinto, y lo peor es que mientras lo hacía sentía que no podía detenerme. Es como si mi cuerpo mandara más que mi cabeza.

Ya no sé si esto es solo tener un deseo inagotable o si lo mío tiene nombre: ¿adicción al sexo?”
Hay que disfrutar... Si te gusta el sexo tienes que disfrutarlo y hablarlo con tu marido.... Adicción es si no lo controlas.. Si lo controlas pero te encanta no veo problema en que te guste probar cosas nuevas exitantes
 
Atrás
Top Abajo