Situaciones morbosas

Hay momentos en la vida en que nos sale el instinto animal que llevamos dentro. La llamada de lo salvaje hace que te arrastre por encima de la razón.

Hace una semana fui a visitar a unos primos segundos, a Rota. Allí pasé algunos de los mejores veranos que recuerdo y mi relación con mi prima es casi de hermanas. Hace 20 años salíamos de fiesta y lo arrasabamos todo. Infinidad de ligues, amores de verano y polvos furtivos.

Recuerdo como Dani, mi primo, era un mocoso 10 años menor que nosotras pero ya apuntaba a ser un "macho Alfa". Más de una vez le pillé espiándome mientras me cambiaba en el dormitorio.

Hoy, dos décadas después, ambas estamos casadas y con hijos pero Dani es el típico tipo popular con un atractivo sexual salvaje. Un líder nato, malote y follador.

Yo, que había dejado a mi marido en Valencia, tenía ganas de pasarlo muy bien y desconectar de las tensiones laborales, familiares, matrimoniales... En fin, lo que es una desconexión total. Pero mi prima, mi "hermana", ha evolucionado de distinta manera y llegado el sábado noche fue incapaz de seguirme.

La cosa es que con mis ganas de juerga acabé acompañando a mi primo Dani y sus colegas. Es muy morboso sentir como puedes seguir atrayendo a tíos 10 años más jóvenes. Entre ellos a mi primo, un tipo guapo, alto, fuerte y con fama de muy bien dotado.

A lo largo de la noche me entraron más de 10 tíos. Invitaciones, bailes, piropos. Algunos estaban bastante bien pero mi primo Dani hacia de guardaespaldas y hasta se lo agradecía. Sobre todo porque empecé a sentir una extraña atracción por él. Algo que nacía en mis entrañas y hacia que solo quisiese estar a su lado. Desprendía un extraño magnetismo que fue generando una peligrosa tensión sexual.

No sé cómo sucedió pero todas mis resistencias morales cayeron al mismo tiempo y al salir del último bar acabamos besándonos apasionadamente. No había marcha atrás. Nos metimos en su coche y me avalancé sobre él. Le pedí que se sacará la polla que quiera comérsela.

Comprobé que la leyenda sobre su dotación era cierta. Dani tenía una polla enorme. Larga, de grosor considerable y unas venas marcadas impresionantes. Me incliné sobre su regazo y comencé a mamar como lo hacía, con 20 años, con algún ligue de verano. El pollón de mi primo hacia tope en mi campanilla provocándome arcadas y todavía no me entraba entera.

Llegados a ese punto no había vuelta atrás. Mi primo me llevó a una de las muchas playas del litoral, puso una toalla y me echó el mejor polvo en muchos años. En mi vida me habían metido una polla igual. No podía dejar de gritar sintiendo como aquel Acho de carne duro y caliente se abría paso en mi coño. Y eso que dilato bastante y es muy grande. Pero Dani me llenaba entera mientras me comía las tetas.

La situación era tan morbosa, tan salvaje que ni le pedí que usara goma. Solo quería que me rellenara el coño con una abundante corrida. No tomo anticonceptivas pese a que sigo teniendo la regla. Sentí como me estaba preñando.

Me dejó en casa de su hermana sobre las 9 de la mañana. Mi estado era indisimulable. Despeinada, con el vestido arrugado y el coño totalmente abierto. Sentía como seguía saliendo semen manchando mi tanguita.

El domingo por la tarde volví a Valencia. A Dani no le volví a ver y a Xisco, mi marido, le llevé un regalito.
 
Salimos una noche de fiesta siete amigos, cuatro chicos y tres chicas. Fuimos después de cenar al pub de siempre (dónde ya conté otra historia) . Ahí entre copa y copa hacíamos visitas al servicio de dos en dos ( a buen entendedor pocas palabras...) pues en una de estas visitas entró conmigo una amiga. Yo me puse a preparar el "tema", mientras ella veo que desenrolla papel higiénico y se pone a limpiar la taza del WC, sin cortarse ni un pelo y prácticamente rozándonos porque el servicio era bastante reducido, se baja los pantalones, se baja la bragas ( negras cómo de encaje super sexis) y se pone a mear con toda naturalidad mientras me hablaba tan normal, termina, desenrolla papel, se incorpora y con dos dedos abre sus labios del coño ( sin estar depilado pero totalmente rasurado) y con la otra mano se limpia, como digo sin ningún tipo de pudor. Consumimos el tema y antes de salir, le digo - Espera que yo también voy a mear.
Entre el alcohol y demás yo también estaba deshinibido, me la saqué mientras ella a mi lado seguía hablando y no se cortó a mirar directamente como meaba, y yo al igual que ella me sequé la polla ante su mirada.
Transcurrió la noche y yo estaba cachondísimo por aquella situación. Fuimos a un discoteca y ahí ya pasé al ataque, entre risas y bromas yo no paraba de arrimarme a ella más de la cuenta, a cogerla por las caderas, a bajar más las manos...
Y en una de éstas, que ya era a lo que a día de hoy se le llama acoso, me dice - tío, que me estás sobando el culo. Y mi respuesta fue - y tú te estás dejando hace rato.
Y a partir de ahí empezamos a comernos la boca y a sobarle el culo a saco. Los demás amigos se quedaron flipados.
Íbamos los dos muy calientes, nos despedimos de los demás y nos fuimos. Llevé el coche a una zona apartada de huerta y nos empezamos a enrollar, a sobarle las tetas, a meterle la mano por el pantalón ... ya notaba su coñito mojado.
No tardó en bajarse los pantalones y preguntar si se quitaba las bragas mientras sin esperar respuesta ya lo estaba haciendo. Y ahí la tenía, desnuda de cintura para abajo, separó las piernas se metió un dedo mientras me miraba a los ojos, y se lo llevó a la boca. - Uuufff, dame a mí - dije. Repitió el gesto y le cogí la mano y le chupé los dedos. De ahí me amorré a su coño que sabía a gloria, alternaba levantándome y comiéndole la boca compartiéndo su sabor con ella. Liberé mi polla que aún estaba encerrada y ella se lanzó a comérmela, sobándome muy bien los huevos también. Sin darme cuenta se desnudó totalmente y se puso a horcajadas sobre mí. La putada fue que yo iba bastante pasado y no empalmaba con bastante dureza y se doblaba al meterla ( yo frustrado y ya con vergüenza) . Ella muy salida me dijo que no pasaba nada, le metí dos dedos en el coño y empezó a frotarse, admitía un dedo más incluso otro más, cuatro dedos tenía en su coño y aceptó con la otra mano otro en el culo, mientras le comía las tetas ella se retorcía sobre mí, tengo su imagen toda sudada gimiendo y corriéndose mirándome a los ojos.
Estuvimos un rato aún sin vestirnos, hablando. Al poco , abre la puerta del coche y me dice que iba a mear. Se puso frente a mí y mientras soltaba su meada me miraba y preguntó por qué a los tíos nos excitaba verlas mear. Ahí mi polla dió un respingo y me la meneaba mirándola. Ella terminó, entro y directamente me volvió a mamar la polla, ahora sí, dura. Me pajeaba y mamaba con experiencia, le avisé que me corría y aún apuró bastante hasta sacarla de la boca y ya con la mano me hizo estallar. Pues aún volvió a su asiento y empezó a masturbarse con la mano pringada de mi semen y a pedirme que le dijera guarradas hasta que se corrió mientras yo le comía las tetas.
Aquella experiencia fue increíble, la recuerdo como si fuera ayer. Ahí estuvimos una temporada follando todos los findes. Ya contaré las demás veces con ella porque era puro fuego por parte de ambos.
 
Hace mucho tiempo, cuando jugaba al fútbol semi profesional, conocía a una mujer que tenía miles de historias con los jugadores del club.

Pili era una mujer de armas tomar. Con 30 años y una sexualidad desmedida. Una morenaza de belleza racial, tetas impresionantes y un coño delicioso.

Los viernes, después del último entrenamiento, los futbolistas más jóvenes teniamos costumbre de salir a cenar y después de copas. Pili siempre acababa divirtiéndose con nosotros. Recuerdo que en una ocasión acabé con ella en el asiento trasero de mi coche.

Era un animal sexual, multiorgasmica que sabía perfectamente lo que se hacía. Tengo grabada su cara mientras me agarraba la polla pajeándome, con las impresionantes tetas al aire y diciéndome las ganas que tenía de comermela. Por supuesto aquella noche me la follé de todas las formas posibles y por todos sus agujeros.

En otra ocasión volvíamos de una victoria importante y decidimos celébralo. Éramos 3 los amigos que nos la encontramos y la invitamos a subir a nuestro coche. Acabamos en un descampado follándonosla por turnos. Pili tuvo aguante para los 3. Fue impresionante.

Al inicio de la temporada siguiente llegó un joven jugador muy prometedor. En apenas 6 jornadas se habia convertido en la estrella del equipo. Por supuesto Pili quiso conocerlo. Nico, la joven estrella, quedó enamorado de inmediato de Pili. Él era 6 años menor y desconocía por completo la historia de la mujer.

Nico y Pili comenzaron una relación seria que acabó por retirar a la mujer de su vida lasciva. Y un año después se casaron y todo el equipo estuvo invitado al enlace.

El morbo de saber que la mayoría de los invitados se había pasado por la piedra a la novia, y que el novio se duchaba a diario con todas las pollas que se había comido su pareja es impresionante.
 
Hace mucho tiempo, cuando jugaba al fútbol semi profesional, conocía a una mujer que tenía miles de historias con los jugadores del club.

Pili era una mujer de armas tomar. Con 30 años y una sexualidad desmedida. Una morenaza de belleza racial, tetas impresionantes y un coño delicioso.

Los viernes, después del último entrenamiento, los futbolistas más jóvenes teniamos costumbre de salir a cenar y después de copas. Pili siempre acababa divirtiéndose con nosotros. Recuerdo que en una ocasión acabé con ella en el asiento trasero de mi coche.

Era un animal sexual, multiorgasmica que sabía perfectamente lo que se hacía. Tengo grabada su cara mientras me agarraba la polla pajeándome, con las impresionantes tetas al aire y diciéndome las ganas que tenía de comermela. Por supuesto aquella noche me la follé de todas las formas posibles y por todos sus agujeros.

En otra ocasión volvíamos de una victoria importante y decidimos celébralo. Éramos 3 los amigos que nos la encontramos y la invitamos a subir a nuestro coche. Acabamos en un descampado follándonosla por turnos. Pili tuvo aguante para los 3. Fue impresionante.

Al inicio de la temporada siguiente llegó un joven jugador muy prometedor. En apenas 6 jornadas se habia convertido en la estrella del equipo. Por supuesto Pili quiso conocerlo. Nico, la joven estrella, quedó enamorado de inmediato de Pili. Él era 6 años menor y desconocía por completo la historia de la mujer.

Nico y Pili comenzaron una relación seria que acabó por retirar a la mujer de su vida lasciva. Y un año después se casaron y todo el equipo estuvo invitado al enlace.

El morbo de saber que la mayoría de los invitados se había pasado por la piedra a la novia, y que el novio se duchaba a diario con todas las pollas que se había comido su pareja es impresionante.
Bueno, en ese caso le resultaría todas las pollas familiares, a ambos.
 
Lo que me acaba de pasar. Aprovechando que mi marido madruga y se ha ido a dormir pronto yo me he quedado con mi cuenta secreta de ese foro. Él no sabe que la tengo.

Hace tiempo que fantaseo con un trio con otra pareja. Me da mucho morbo una relación lésbica. Imaginarme comiéndome un coño me pone a mil.

He escrito un privado a una pareja y hemos empezado a morbosear. La cosa ha ido a más y hemos terminado intercambiando fotos de nuestros coños y su polla. Nos hemos corrido (yo varias veces).

Lo mejor es que a la hora de preguntarles de dónde eran me han dicho que son de mi mismo pueblo. Me he quedado helada, yo he mentido y he dicho que soy de Barcelona. Vivimos en un pueblo muy pequeño donde nos conocemos todos.... Ahora pensaré que han sido cualquier vecino con el que me cruce.
 
En mi condición de corneador he tenido muchas experiencias morbosas. Desde cornudos que han acabado llorando de celos viendo cómo me follaba a su mujer hasta tíos que me han pedido chuparme la polla después de correrme dentro de ellas.

Lo último que me ha pasado fue con una pareja a la que llevo corneando varios años. Es una pareja colombiana metida en la treintena, 15 años menos que yo.

Él, Jairo, es un tipo poco agraciado, bajito, con rasgos muy étnicos. Ella, Rosa, es una mujer con curvas y muy muy caliente. Nos conocimos en un local de salsa y conectamos muy rápido. Ahí me comentaron que buscaban a un hombre para hacer cornudo al marido.

Desde hace tiempo hemos tenido varios encuentros al año. Rosa es de piel morena, con unas nalgas impresionantes y unas maravillosas tetas con una aureola muy grande de color marrón muy oscuro. A ella le gustó desde el primer día mi polla. Tengo un capullo gordo y más ancho que el tronco donde se me marcan unas venas de manera exagerada.

En marzo habiamos quedado por última vez. Me comentaron que estaba embarazada de su marido. Para celebrar la buena noticia me la follé en su casa, sin condón. El marido acabó limpiándole mi corrida con una buena comida de coño.

A finales de agosto, estaba de 8 meses y tenías unas ganas de sexo desmesuradas. Pero le pidió a su marido una buena cornada por mi parte. Así que me llamó Jairo para que me follara a su mujer. Me recibió ella en su casa, solamente vestida con unas braguitas negras.

Estaba preciosa, el embarazo le había subido la belleza. Tenía las tetas más grandes y una barriga de embarazada enorme. Le comí la boca delante de su marido mientras el agarraba las tetas a modo de saludo. Ella me cogió de una mano y me llevó a su dormitorio, él nos seguía como un perrito faldero.

Nos tumbamos en su cama de matrimonio. Ella comenzó a bajarme el pantalón para liberar mi polla. Me la estuvo chupando un rato pero antes de correrme paró.

"Quiero que me partas el culo. Quiero que el cornudo de mi marido me vea disfrutar como una puta."

Se puso a 4 patas al filo de la cama. Yo me coloqué detrás y comencé a comerle el culo. Al separar sus nalgas pude ver que tenía hemorroides. Pesé que se las meterías para dentro aunque le dolieran. Su marido me pasó un gel lubricante para facilitar la penetración. Le coloqué el capullo en el ojete y comencé a hacer fuerza. Por fin logré metérsela hasta los cojones.

Rosa gritaba, suplicaba, me insultaba y yo comencé una enculada cada vez más rápido hasta correrme dentro. Le rellené el culo de lefa. Cuando se la saqué hizo un ruido como de descorche. Le había reventado el culo y mi leche salía de dentro con un color marrón rojizo que delataba el destrozo anal.

Jairo, se había pajeado 3 veces mientras me miraba darle por culo. Ella, tumbada en la cama, se palpaba el ano para aliviarse el dolor pero estaba satisfecha.

Anoche fueron padres de una niña. Si desean celebrarlo solo tienen que llamarme.
 
En cuestión de sexo no me puedo quejar. Perdí la virginidad muy pronto y a partir de ahí digamos que me lo he pasado muy bien. Mi primera relación seria la tuve a los 23 años. Fue con Marisa, una mujer de 29 años y bastante experiencia.

Una morenaza espectacular de cuerpo curvilineo donde sus tetas provocaban erecciones a cada paso. Estaba divorciada de un macarra algo peligroso que la había dejado embarazada siendo muy joven. Durante 3 años mantuvimos una relación donde todo giraba en torno al sexo. Marisa era una mujer tremendamente sexual, fogosa y apasionada.

El sexo con ella era increiblemente morboso. Marisa tenía un extraño gusto por ciertas prácticas "dolorosas" en las que la había introducido su exmarido. Así, algunas veces, me pedía que la enculase fuerte, sin lubricación, atada a una columna que teníamos en el salón y con un condón estriado.

Alguna noche, después de llegar de fiesta, con un puntito alcohólico, ella me provocaba insultandome que era lo que usabamos como código para acabar partiendole el culo.

Con ella totalmente desnuda y atada a la columna, yo me situaba a su espalda y, agarradola por las tetas, le metía la polla por el ano muy fuerte con el condón estriado. Ella gritaba como una gata. Después me comentaba que eso de sentirse usada le producía un morbo irresistible. Y un placentero dolor.
 
Posiblemente la situación más morbosa que conozco se dio en mi grupo de amigos.

Hace 10 años llegaron a nuestra urbanización un matrimonio argentino con dos hijos, Fernan de 14 años y Diego de 11. Desde su llegada se integraron perfectamente con el grupo de amigos. Eran unos personajes carismáticos y con el punto morboso de lo "exótico" de ser extranjeros, con ese acento y esa labia irresistible.

Fernan, el mayor, se conviritió en una especie de líder. Diego, el menor era un auténtico galán con mucho éxito entre las chicas. Este comenzó a salir con Laura, una chica menudita de belleza aniñada. Todo lo contrario que su mamá.

Pepi era una auténtica MILF de 43 años casada con un abogado cincuentón cuyo declive físico había comenzado. En cambio ella mantenía un cuerpo trabajado en el gimnasio. Poco a poco había empezado a explotar sus encantos físicos, cara morbosa, tetas operadas, vientre plano, piernas torneadas y nalgas duras. Estaba mucho más buena que su hija Laura.

La cuestión es que seis meses después de empezar a salir Laura con Diego saltó el escándalo. El padre de ella pilló, en su propia cama de matrimonio, a Fernan, el cuñado de su hija, follandose a Pepi, su mujer y madre de la novia de su hermano.

El escándalo en la urbanizaciín fue tremendo. Tanto que Pepi abandonó la casa de su marido y su hija Laura optó por irse con ella. A día de hoy, Pepi sigue con Fernan, pese a la diferencia de edad (19 años). Salen junto al grupo de amigos, entre ellos Laura y Diego. Este verano Pepi nos ha acompañado a la playa y no ha tenido reparos en hacer topless y morrearse con su novio Fernan delante de todos nosotros. También delante de su hija Laura y su yerno y hermano de su novio.
 
Hace años coincidí con una chica por redes sociales, nos conocíamos de vista pero nunca habíamos hablado, una tarde di el paso y charlamos un rato quedando en que íbamos a vernos esa noche para tomar algo.

Al final mareando la perdiz sin saber a donde ir llego el momento de vernos, la recogí en mi coche, ella bajo con una falda corta y un buen escote luciendo su buen par de tetas volviéndome loco.

Decidimos pararnos en un descampado de tierra bastante oscuro para “charlar” de que íbamos a hacer cuando decidimos pasarnos a los asientos de atrás, empezamos a liarnos y ella a intentar dominarme sin dejarme meterla mano ni quitarse nada de ropa.

Me pidió que me quitara la ropa y cerrara los ojos a lo que yo accedí, de repente note una mano bajándome el capuchón de mi polla dura y erecta, seguido de una boca húmeda con una sensación de frio intensa, ya que se había tomado un caramelo para hacerme una mamada de efecto frio.

Después de que se cansara de follarme mi dura polla con su fría garganta me dejo desnudarla y sobarla para ponerla a cuatro patas y follarla el coño empapado sin piedad….. acabamos los dos desnudos fuera del coche y yo follandola duro mientras ella estaba de pie dándome la espalda ofreciéndome su culo de gimnasio tumbada sobre el capo de mi coche.

Cuando ya no pude mas la avise, se arrodillo obediente y me corrí sin piedad en su cara mientras sonreía feliz por haber conseguido su ansiada recompensa…. La deje en su casa y nunca mas volvimos a vernos ni a quedar.
 
Después de una relación bastante tóxica y un tiempo en el que solo saciaba a mi fiel compañero con la compañía de mis manos, decidí volver a abrir mi querida app de citas que tantos momento morbosos y sexuales me había brindado a mi corta edad de 22 años.

Tras echar un vistazo al “genero” conecte con con una chica de 32 años con unas fotos de perfil bastante sexis y muy amable y simpática, tras hablar unos días decidimos quedar para tomar algo y conocernos según ella sin ningún tipo de intención sexual.

Llego la noche de dicho día y nos encontramos donde habíamos acordado, ella era bajita pelirroja, con unos pechos descomunales acompañados de un generoso escote parte de un vestido sexy que hacia que la mayoría de tíos se giraran a verla cuando iba caminando…. Nos dimos dos beso y fuimos a un bar a tomar algo y charlar.

Tras ella unos vinos y unas cuantas cervezas para mi, acompañados de una charla cordial y agradable, ella propuso para mi sorpresa ir a un hotel para seguir conociéndonos y seguir charlando, a lo que yo con el miembro medio empalmado debido a estar toda la cita mirando y deseando sus voluminosas tetas accedí sin dudar.

Cuando empezamos a mirar habitaciones cerca se dio cuenta que no llevaba dinero suficiente y se había dejado la tarjeta en casa, me pidió acompañarla a por ella y pusimos rumbo al metro mas cercano, bajando la escalera mecánica comencé a notar como ella delante de mi empezó a sobarme sutilmente el paquete… ya sentados esperando al metro empezamos a besarnos metiéndonos mano intentando disimular para no ser vistos, al igual que ya en el vagón de camino a su casa.

Ya allí y tras coger lo que iba a buscar para nuestra sorpresa y calentón mutuo no había a esas horas ninguna habitación libre por la zona, así que decidimos quedarnos en su bonita, discreta y oscura urbanización privada y dado que era un día de diario no había nadie por allí y estábamos solos.

Volvimos a empezar a liarnos y a meternos mano, ella metió la mano por dentro de mi pantalón, jugando con el pellejo de mi polla, subiéndolo y bajándolo mientras me la apretaba fuerte y me pajeaba sin piedad, yo empeze a meterle mi mano en su escote agarrando sus tetas que ni mi mano llegaba a abarcar mientras pellizcaba sus pezones, con el calentón ella se arrodillo entre mis piernas y me bajo los pantalones hasta los tobillos, sin mediar palabra se saco las tetas y empezó a chupármela llenándomela de saliva para empezar a hacerme una cubana hasta que no pude aguantar mas del gusto y me corrí en sus tetas salpicando su barbilla y llenándola el pecho.

Tras unos cigarros me dijo que quería sentir mi polla dentro de su coño, así que entramos a su portal, dado que ella vivía con una familia a la cual tenia alquilada una habitación y no la dejaban subir hombres…. Llegamos a la escalera y tras liarnos de nuevo la metí dos dedos en su coño, sintiéndolo caliente y empapado mientras ella me bajaba los pantalones, se dio la vuelta levantándose el vestido y la aparte el tanga a un lado para descubrir mi capullo y sin mediar palabra introducirla mi polla bien dura y erecta en su mojado coño, después de una follada bien dura tapándola la boca para que no la escuchara nadie, volví a arrodillarla y a llenarla las tetas de leche.

Al rato repetimos otra vez en el portal y cuando abrió el metro por la mañana yo me fui a mi casa y ella se subió a la suya ya bien follada, con las tetas pegajosas y el tanga en el bolso.
 
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Una tarde aburrido en casa mirando mi app de citas, me lleve la sorpresa de ver a una vecina de toda la vida en ella, su nombre era un seudónimo, nos conocíamos de vista aunque nunca habíamos hablado mas allá de un hola y adiós con total cortesía y educación, para colmo mi grupo de amigos y el suyo parábamos en el mismo parque todas las tardes, un día después de tiempo pensándolo la di un famoso “match” en la app, el cual ella también me devolvió y asi empezamos a charlar y “vacilarnos” a diario en plan….. “ seguro que te pones morado a follar por aquí…..” “ seguro que los tienes a todos loquitos por aquí……” algo que fue mutuo.

Al tiempo de ir hablando una noche, la conversación empezó a caldearse y ella me dijo que yo estaba muy bien pero que era muy peque para su gusto, que la gustaban mas mayores, me sacaba 10 años de diferencia, a lo que yo la respondí que lo mismo se llevaba una sorpresa y entre bromas la mande una foto de mi polla, la cual la sorprendió, no tengo un tamaño gigante pero esta bastante bien, sobre todo mi capullo que es algo grande, ya que a mi siempre me a puesto el sexting, me pone enseñar mi polla, y que me enseñen a mi también videos y fotos… me da mucho morbo.

Así empezamos a entrar en la rutina de que muchas noches nos escribíamos y nos pasábamos fotos y videos tanto nuestros como de lo que nos gustaba en el porno o teníamos como fantasías y nos pajeábamos a veces también en videollamada poniéndonos muy cachondos ya que acordamos tenerlo en secreto y cuando bajábamos con nuestros amigos por la tarde ya que fue en verano, nos saludábamos como si fuéramos “desconocidos” cosa que nos daba muchísimo morbo…..

Un día ella me dijo que estaba aburrida en casa y que su madre se había ido de viaje y que estaba sola en casa, que la apetecía un masaje, a lo que yo la dije que iba encantado a dárselo pero ella no se lo creyó y pensó que era una broma sin mas, me arme de valor y fui a su casa, cuando la llame al timbre me abrió la puerta y vi su cara de sorpresa, me invito a pasar recibiéndome en ropa interior, me senté en el salón con ella mientras la miraba y notaba como se me hinchaba la polla y la notaba palpitar dentro del pantalón mientras ella se reía y me decía que no pensaba que fuese a atreverme a ir a verla, diciéndome que pasase a su habitación que me la quería enseñar.

Pasamos a su habitación, cerro la puerta y nos lanzamos, empezamos a besarnos y a comernos la boca, nos quitamos la ropa y me empujo a la cama agarro mi polla con fuerza y tiro hacia abajo de ella para dejar mi capullo al descubierto, empezó a jugar con el con la lengua, a lamerlo y a llenarlo de saliva para ya metérselo entero en la boca y empezar a violarlo con su garganta sin parar hasta ponerlo duro como una piedra, cuando ya no puedo mas del calentón se giro dándome la espalda arqueando la espalda a cuatro patas y poniéndome el culo en pompa pidiéndome que me la follara mientras veía como tenia el coño empapado esperando mi dura polla…..

Acerque mi capullo empapado a su coño mojado y lo deslice despacio retorciéndome de pacer escuchando como empezaba a gemir, fui aumentando el ritmo hasta empezar a cabalgarla azotándola mientras gemía hasta que ya no pude mas, la gire y me corrí en sus tetas pequeñas, nos tumbamos en la cama y me dijo que tenia que irse que había quedado con unas amigas, seguimos pajeandonos por el movil y pasándonos porno tanto nuestros como de internet, así como con nuestras videollamadas me dijo que la gustó como follabamos pero que era demasiado duro para su gusto, que ella la gustaba mas rollo romántico.

El tiempo pasó, cada uno hizo su vida y de vez en cuando nos vemos y saludamos sin decirnos nada, sabiendo solo nosotros nuestra aventura secreta.
 
Desde hace años, mi chico me insiste en tener una experiencia morbosa con un desconocido en la playa.

Estuvimos todo el día muy bien pero no se presentaba nadie que me gustara. La mayoría eran parejas muy mayores o gays.

Sobre las 6 de la tarde llegó un tipo interesante. Era un hombre mayor, alrededor de 60 años, atractivo. He de decir que me ponen mucho los hombres mayores. Yo tengo 35 años, 3 menos que mi chico.

El hombre se sentó a unos 20 metros de nosotros. Mi chico comenzó a acariciarme mirando al desconocido. Yo entendí que ese podía ser el momento. Mientras estaba sentada mi chico metió la mano entre mis piernas y me comenzó a masturbar.

Comencé a gemir mirando al tipo. El hombre se puso de pie con una buena erección y se acercó. Mi chico estaba empalmado y comencé a hacerle una paja. Con un gesto de cabeza le indicó al viejo que se podía acercar.

Yo sentía una mezcla entre morbo, vergüenza y vértigo. Mi chico me animó a que se la chupara. Me arrodillé delante de aquel desconocido 30 años mayor que yo y me metí su polla en la boca. Era la primera vez que me comía una polla diferente a la de mi chico. Él ha sido mi única pareja sexual.

Comencé a hacerle una buena mamada, con mucha saliva. Notando como me llegaba bien adentro y succionándole el capullo. Cuando sentí que se iba a correr me la saqué de la boca y seguí con una paja. La situación era increíble. Se la estaba comiendo a un desconocido de 60 años mientras mi chico me miraba y se hacía una paja.

Se corrieron los dos casi al mismo tiempo. El viejo soltó una buena corrida que me golpeó en la cara y en las tetas. También sentí la corrida de mi chico sobre mis nalgas. Yo estaba como una perra en celo.

El desconocido se largó y le pedí a mi chico que me comiera el coño. Fue una experiencia increíble. Creo que repetiremos.
Buena experiencia
 
Siempre he sido muy puta. Me apasiona el sexo y me encantan los tíos. Por eso, cuando mi mejor amiga se separó de su marido mi obsesión era follármelo.

Dani, el ex de mi amiga, tenía fama de estar muy bien dotado, así que aprovechando que mi marido estaba de viaje le llamé para hablar de su ruptura y....

Uuffff, menudo semental. Menudo rabo. Vaya manera de follar. Joderrrrr. Había fantaseado mucho con él pero superó todas las expectativas.

Me lo hizo en todas las posturas, de todas las formas. Me hizo sentir muy mujer. Me trató como a una puta. Estoy deseando repetir.
 
Desde siempre, una de las cosas que más morbo me han dado son los coños con pelos. Supongo que esto viene de ver las fotos de mi tío. Él era uno de esos paparazzis que se dedicaban a vender fotos de famosas desnudas a la revistas.

Desde muy joven yo rebuscaba entre su material para pajearme viendo las fotos de las famosas de turno desnudas y casi todas tenían un coño peludo que me sacaban litros de leche.

Con apenas 18 años me compré una cámara de fotos y me dediqué a robar topless en la playa de mi ciudad. Un día, escondido entre las rocas de una cala vi a una conocida presentadora de TV. Venía acompañada por un tipo alto y fuerte que supuse era su pareja.

La tía estaba buenísima y aquella tarde se decidió a hacer topless. Por supuesto comencé a disparar fotos. Pero a medida que avanzaba la tarde y la playa se vacíaba ellos se ponían más cariñosos.

Se levantaron y se fueron hasta las rocas donde yo me encontraba. Se besaron y comenzaron a desnudarse. Comenzaron a follar delante de mi objetivo. Ella tenía una buena mata de pelo en el coño.

De repente ella me descubrió y gritó. El tipo empezó a dar gritos en inglés. Yo no tenía salida y tuve que bajarme y pasar a su lado. Él me quería pegar pero le amenacé con denunciarle si me tocaba.

Entonces ella me miró y me pidió negociar. Yo sabía que el material que había en mi cámara valía dinero. La presentadora, de unos 30 años entonces, se acercó a mí y con voz melosa me dijo que todo aquello podía solucionarse.

Me agarró el paquete con mi polla empleada y se arrodilló delante de mí. Me pidió que le diera la cámara a su amigo y que me bajara el bañador. Mirándome a los ojos, me descapulló y comenzó una mamada espectacular.

No me podía creer que aquella presentadora buenorra, 12 años mayor que yo, me estuviese dando la mejor mamada de mi vida a cambio del carrete de mi cámara fotográfica. Su amigo lo extrajo de la cámara y lo inutilizó mientras maldecía en inglès. No pude aguantar mucho más antes de correrme. Para entonces ella me pajeaba y dirigía los chorros de lefa a sus tetas.

Cuando solté toda la leche caí de rodillas. El amigo inglés estaba otra vez empalmado y ahora, sin riesgos de ser fotografiado, se folló de nuevo a la presentadora.
 
Cuando una pareja supera los 20 años de matrimonio es inevitable que le alcance la rutina. Es entonces cuando hay que buscar alicientes para mantener la chispa.....

Fue entonces cuando se me ocurrió una de esas ideas tan arriesgadas como morbosas.

Me hice un perfil falso de IG. Lo llené de fotos de un modelo de anuncios americanos nada conocido aquí. Me dediqué a crear un personaje (joven, atlético, deportista) y le pedí amistad a mi mujer.

Ella, a sus 48 años, hace un par de años que empezó a ir al gimnasio y se ha puesto buenísima. Era cuestión de tiempo que ella aceptara la petición de amistad. Y es que no solo a mi me asfixia la rutina matrimonial.

Poco a poco fui ganándome su confianza con pequeños comentarios en sus fotos al principio. Meses después aceptó una conversación por chat.

A partir de ahí la cosa se fue acelerando. Tuvimos conversaciones subidas de tono en horas en las que no estábamos juntos. Alguna vez, en casa, le envié algún mensaje para comprobar su reacción. Inmediatamente cogía el móvil y sonreía antes de irse a otra zona de la casa para contestar.

Por supuesto, llegó un momento en que el intercambio de fotos era inevitable. Me tuve que meter en internet para conseguir fotopollas ya que no podía enviarle la mía....

A ella le costaba más y por eso no quise insistir y dejar que ella marcase el ritmo. Fue en una cena familiar en casa de sus padres cuando comencé a pedirle que fuera un paso más allá.

Viendo que ella había bebido un poco más de la cuenta comencé a pedirle fotos. Ella se levantaba de la mesa y se dirigía al baño. Desde allí me mostró sus preciosas tetas. En otro momento se bajó las bragas y me mostró su coño cubierto por una fina y sensual tirita de vellos negros. Para rematar me decía que se encontraba muy excitada y solo deseaba comerme la polla.

Aquella noche, mi mujer se lanzó a tener sexo conmigo de una manera salvaje. Lo hicimos de varias posturas y hasta se dejó dar por culo. Desde que se mensajea con el perfil falso mi mujer está mucho más activa sexualmente.
 
Me sonó el movil en el trabajo y al mirarlo vi que era un mensaje de una follamiga con la que quedaba normalmente, hacia unas semanas que no hablábamos, me dijo que como no encontraba trabajo había tenido que dejar el piso en el que tenia alquilada una habitación y volver a casa de su padre, que si tomábamos algo a la noche cuando terminara mi jornada, a lo que yo accedí sin problema.

Después de pasar por casa a ducharme y cambiarme me dirigí a su pueblo a verla, a unos 15 min en coche de mi casa, y una vez allí la espere en su portal aparcado en doble fila, la puerta se abrió y ella salió pequeña y con su delantera gigante embutida en un llamativo vestido negro, montó, me dio un pico y nos fuimos a tomar algo a un bar.

Tomamos algo, charlando y riendo poniéndonos al día mientras ella se fumaba un cigarro aliñado de los que la gustaban y bebía cerveza, mientras que yo tomaba refresco dado que tenia que conducir de vuelta a casa…..la conversación empezó a calentarse y se abrió sutilmente de piernas pidiéndome que la tocara por debajo de la mesa revelándome que no llevaba ropa interior a lo que yo aún con la entrepierna totalmente dura debido a las vistas dije que no, dado que al ser verano la terraza del bar estaba con bastante ambiente y me dio cosa el hecho de que alguien nos viera…. A ella no la sentó bien la negativa y decidimos pagar y volver al coche.

Ya en el coche y ambos todavía bastante calientes, empezamos a liarnos mientras ya en la intimidad que nos brindaba la introduje despacio dos dedos en su caliente y mojado coño, moviéndolos de dentro hacia afuera escuchándola gemir y como se la aceleraba su respiración, mientras que con la otra mano la apretaba una de sus grandes tetas…. Sin mediar palabra me apartó mientras sonreía y sin vacilar bajo la cremallera de mi pantalón liberando mi polla dura e hinchada que tanto la gustaba, tras unos minutos haciéndome de rabiar mordiéndose el labio y enseñándome su lengua mientras me hacia una buena paja, termine su juego agarrándola del cuello y acercando su boca a mi duro glande a lo que ella me respondió con una mamada sin compasión, bien salivada y profunda…..tras unos minutos vimos gente acercándose y tuvimos que taparnos, arranque el coche y decidimos movernos a lo que ella me dijo…..”llévame a algún sitio tranquilo que me vas a follar…..”

De camino a un descampado cercano iba metiéndola los dedos en su coño a lo que ella sobaba mi polla por encima del pantalón haciendo que cada vez tuviera mas ganas de follarmela hasta correrme, de camino vimos un parking apartado y decidimos parar un “momento” para que me la chupara un poco mas y follarme un poco sus tetas para calentar mas el ambiente, tras la breve parada llegamos al descampado, aparqué el coche y me dijo” vamos para fuera que estoy deseando que me folles de una vez”

Salimos del coche, fuimos a la parte delantera y se arrodillo ante mi, bajo mis pantalones desabrochados y mi polla salió como una lanza de carne, totalmente empalmada y dura, desenvaino mi glande tirando hacia atrás de la piel y siguió con una de sus partes favoritas, chupar….. mientras yo disfrutaba miraba a mi alrededor y no se escuchaba nada en esa oscuridad en la que no había ni un alma alrededor excepto el sonido de su boca y garganta, succionando y atragantándose con mi dura polla…. Ya saciada se levanto dándome la espalda y se acomodo en el capo de mi coche poniéndome su coño empapado para penetrarlo duramente, la metí mi polla ensalivada y la folle sin parar hasta que no pude aguantar mas avisándola a lo que ella se giró regalándome sus tetones para llenarlos de leche viendo su cara de felicidad….. la deje en casa y quedamos en volver a vernos pronto.

Al día siguiente después de trabajar me dirigí a mi coche para volver a casa, era una tarde soleada y bastante calurosa, cuando me acerque a el para mi sorpresa, pude ver la marca producida por el sudor de mi amiga…. Su silueta marcada en el capó y la marca de sus tetones ahí grabada….. ¿cuantos lo habrían visto en el parking de la empresa?…. Reí fui a lavarlo y a casa a descansar.
 
Después de un aburrido día mi app de citas vibro, un mensaje de una chica joven, 19 años, buen cuerpo, buenas tetas, gafitas y cara de no haber roto un plato en su vida….. yo tenia 27 años, su mensaje decía:

“¿no te acuerdas de mi…?”

Yo perplejo intentaba hacer memoria pero no me sonaba esa chica de nada, sus fotos no eran muchas y muy normales, la dije que no, que lo sentía, que si podía refrescarme la memoria…. Y ella me dijo que yo era el repartidor que la había llevado la cena la noche anterior…. No soy repartidor…..

Tras la charla en la que la explique que se confundió o que si era una “técnica” suya para ligar la dije que si podía pasarme algunas fotos suyas mas, a lo que ella accedió y para mi sorpresa…. Me paso varias fotos de lo que ella decía que era su hobbie… el BDSM, verla con una mordaza, maniatada a la espalda, y en tanga con pinzas en los pezones, hizo que mi polla se hinchara al instante lo cual tuve que aliviar con un poco de lubricante y mis manos, imaginándome como seria follarla mientras estaba sometida con sus juguetes.

Tras varias charlas calenturientas los días siguientes y empezar a hacer sexting, nos encantaba pasarnos videos y fotos de todo tipo y masturbarnos viéndolos para enseñárnoslos luego, decidimos quedar para charlar y conocernos, justo antes de la cita ella me dijo que la había bajado la regla y que si seguía la cita en pie o me importaba a lo que yo accedí sin problema…

Llego la hora y fui a recogerla a la boca de metro en la que habíamos quedado, era bajita, ganaba mas en persona que en foto y tenia una sonrisa y un aspecto de no haber roto un plato en su vida, pero yo sabia lo que la gustaba hacer en su tiempo libre, cosa que me hacia palpitar la polla debajo de mi pantalón…..

Era un día de antes del verano, engañoso en cuanto a temperatura, y decidimos ir a un parque en el charlar y pasar la tarde, después de horas de risas y conocernos mas empezó a hacerse tarde y con lo cual a refrescar un poco y la dije que tenia un poco de frio en las manos, a lo que ella me respondió “ metemelas aquí dentro de la camiseta y te las calientas un poco….”mirándome con su cara inocente y así hice, mientras empece a sobarla las tetas y pellizcarla los pezones….

Empezó a sonrojarse y morderse el labio mientras me decía lo cachonda que estaba hasta que me susurro….” Me estas poniendo cerdísima, te comía la polla aquí en el parque” y la dije de movernos a una parte del parque mas “escondida” sin gente y con los arbustos mas altos, allí ya sentados empezamos a besarnos mientras seguía deleitándome con sus grandes y duros pechos y me saque mi dura polla, a lo que dijo” mmm…. Que ganas y que hambre tenia ya….” Se lanzo a ella y estuvo un rato haciéndome gozar chupándome la polla, tocando con mi glande su campanilla como si fuese a devorármela….escuchamos venir gente y paramos así que decidimos ir a mi casa a por una sudadera.

Tras coger la sudadera y ella esperarme sentada en el rellano de mi portal salí y volvimos a besarnos apasionadamente, mientras sacaba nuevamente mi polla y yo la quitaba la camiseta y el sujetador, volvió a hacer desaparecer mi polla en su garganta a un ritmo y con un ansia que hacia que me temblaran las piernas, cuando ya no podía aguantar mis gemidos me la puso entre sus tetas y comenzó a hacerme una paja entre ellas hasta que la avise que no podía mas y que iba a correrme, a lo que su reacción fue metérsela en la boca y volver a chupar hasta mirarme sonriendo después de haberme sacado hasta la ultima gota…. Tragar y volver a sonreír….

La acompañe de vuelta al metro y quedamos en volver a vernos para rematar la cosa pero el tema se enfrió y no volvimos a quedar, ella se fue de la ciudad y permanece como un caliente recuerdo.
 
Me encantaba ir mirando el “catalogo” de mi app favorita mientras me manoseaba la polla…. Me sorprendió un “me gusta” y entre a ver el perfil y se trataba de una chica de 18 años, con sus curvas, unas tetas bastante grandes y unas gafapasta a l moda que la hacían ver como una secretaria de una película porno…. La devolví el match y empezamos a charlar, la niña era bastante lanzada, conectamos bastante bien y me dijo que la gustaba mucho que aver si quedábamos que sus padres solían viajar mucho los fines de semana yo por esas tenia 26 años y era miércoles…

El viernes por la mañana me sonó el WhatsApp y efectivamente era la niñita lanzada, diciéndome que si tenia algún plan para esa noche a lo que yo la dije que no, y me dijo que a la tarde me avisaba que me lo iba a solucionar…Ya por la tarde me dijo que me preparase que me pasaba a buscar y así me vestí y me duche.

Quedamos cerca de mi casa ya entrando la noche y apareció la niña, en un carro nuevo de ultimo modelo con su musica a todo volumen y paró el coche a mi lado sonriente, me dijo que sus padres estaban fuera todo el fin de semana que si quería ir con ella a su casa a lo que yo obviamente accedí encantado, me subí al coche y nos dirigimos hacia allí charlando y riendo como si nos conociésemos de toda la vida.

Ya en su casa, toda reformada, bien decorada y amueblada… saltaba a la vista que era una familia muy acomodada…. Nos sentamos en el sillón y me lance a su boca, empezamos a besarnos apasionadamente y empecé a sobarle sus grandes tetas, me paró y me dijo que fuéramos a su habitación, que allí la daba vergüenza…..

Entramos y cerro la puerta detrás de mi, nos quitamos la ropa mientras nos besábamos, mientras manoseaba sus tetones, empece a chupar y lamer sus pezones mientras ella gemía, la senté en la cama y empezó a chuparme la polla, ensalivandola bien, dejándome follarla la garganta, de repente se la saco de la boca y mirándome con cara inocente y esas gafas porno de apretó las tetas con los brazos y metió entre ellas mi polla que estaba tan mojada que entro sola…. Cuando ya no podía mas la dije que se pusiera a cuatro patas en la cama, cosa que hizo sin dudar, la metí mi polla dura y mojada despacio, mientras notaba como gemía, su coño era pequeño y muy apretado, notaba como mi polla lo abría a su paso y ella la sentía…. Empece despacio, y mientras ella gemía mas yo aceleraba el ritmo y la apretaba mas fuerte hasta que noté que iba a correrme y la pregunte donde quería mi leche y me dijo que se la echase donde yo quisiera…. La dije que en su cara con las gafas puestas y sin mediar mas palabra se arrodillo desnuda delante de mi, abrió la boca sacando la lengua y yo me masturbe apuntando hacia esa cara “inocente”…. Le llene la cara y las gafas de leche mientras ella sonreía y se relamía…. Fue feliz a lavarse la cara y las gafas al baño y cuando acabó no vestimos y dijo que si quería que me llevara a casa, accedí y así fue, me llevo a casa con los huevos bien descargados.
 
Desde hace años, mi chico me insiste en tener una experiencia morbosa con un desconocido en la playa.

Estuvimos todo el día muy bien pero no se presentaba nadie que me gustara. La mayoría eran parejas muy mayores o gays.

Sobre las 6 de la tarde llegó un tipo interesante. Era un hombre mayor, alrededor de 60 años, atractivo. He de decir que me ponen mucho los hombres mayores. Yo tengo 35 años, 3 menos que mi chico.

El hombre se sentó a unos 20 metros de nosotros. Mi chico comenzó a acariciarme mirando al desconocido. Yo entendí que ese podía ser el momento. Mientras estaba sentada mi chico metió la mano entre mis piernas y me comenzó a masturbar.

Comencé a gemir mirando al tipo. El hombre se puso de pie con una buena erección y se acercó. Mi chico estaba empalmado y comencé a hacerle una paja. Con un gesto de cabeza le indicó al viejo que se podía acercar.

Yo sentía una mezcla entre morbo, vergüenza y vértigo. Mi chico me animó a que se la chupara. Me arrodillé delante de aquel desconocido 30 años mayor que yo y me metí su polla en la boca. Era la primera vez que me comía una polla diferente a la de mi chico. Él ha sido mi única pareja sexual.

Comencé a hacerle una buena mamada, con mucha saliva. Notando como me llegaba bien adentro y succionándole el capullo. Cuando sentí que se iba a correr me la saqué de la boca y seguí con una paja. La situación era increíble. Se la estaba comiendo a un desconocido de 60 años mientras mi chico me miraba y se hacía una paja.

Se corrieron los dos casi al mismo tiempo. El viejo soltó una buena corrida que me golpeó en la cara y en las tetas. También sentí la corrida de mi chico sobre mis nalgas. Yo estaba como una perra en celo.

El desconocido se largó y le pedí a mi chico que me comiera el coño. Fue una experiencia increíble. Creo que repetiremos.
Que morbo. Yo también soy Valenciano. A que playa vas??
 
Hace unos años, mi mujer y yo fuimos a pasar unos días a casa de mi cuñado (su hermano) y su mujer. Ellos viven en un pueblo costero de Barcelona.

La relación entre hermanos es excelente y estuvimos de maravilla. Si a eso unimos que Montse (la mujer de mi cuñado) está buenísima pues mis vacaciones eran perfectas

Esta es una mujer morena de cara morbosa, mirada sensual y cuerpo trabajado. Desde que nos conocimos hubo química y por mi parte más de una fantasía onanista. Y es que en más de una ocasión me he corrido imaginando y recordando sus tetas en topless cuando íbamos a la playa.

Una tarde, durante aquellas vacaciones, yo estaba tumbado en un sofá dormitando una siesta mientras me acariciaba el rabo por dentro del pantalón (esa postura tan masculina).

Mi mujer entró en el salón y vio como se marcaba el bulto de mi entrepierna. Aprovechando que los anfitriones habían salido se acercó a mí y comenzó a gatear desde mis pies. Ronroneando acercó su cabeza a mi paquete y tiró hacia abajo de mi bañador. Mi polla saltó ante su cara. Con sonrisa lasciva me la agarró y se la llevó a la boca.

Durante un rato se empleó a fondo en hacerme una mamada espectacular. Se la tragaba entera y movía la cabeza hasta encajarsela en la garganta. Cómo imaginan acabé corriéndome como un animal mientras ella no dejó escapar ni una gota de lefa.

Luego comenzó a subir por mi torso, lamiéndome, hasta morrearme. Su boca sabía a mi propio semen. Pero ella quería su premio así que siguió hasta sentarse si te mi cara. Agarró la braguita de su bikini por un lateral y lo desplazó dejando su coño sobre mi cara.

He de decir que mi mujer tiene el coño más bonito que he visto nunca. Una rajita perfecta con unos labios de un grosor ideal para cubrir todo el conjunto. Lo suele llevar rasurado aunque a veces le gusta jugar con sus vellos. En aquella ocasión tenía una sensual tirita de vellos negros desde los labios hasta el Monte de Venus.

Mientras yo se lo comía ella había entrado en su habitual estado sexual. Ese en el que se pone muy guarra, usando un lenguaje obsceno. Así me ordenaba con insultos que le comiera el coño. La secuencia era de película porno. Yo, de nuevo empalmado mientras mi mujer se comportaba como una guarra restregandome su coño por la cara.

Me pidió que le metiera los dedos en el culo mientras ella me agarraba la polla y se pellizcaba un pezón. Dio un grito incontrolado cuando le provoqué un orgasmo bestial. Después se acomodó sobre mí para caer sobre mi pecho.

Fue entonces cuando pude ver, en el marco de la puerta, a Montse. Desconozco el tiempo que llevaba presenciando todo el espectáculo. Se había quitado la braguita del bikini y se masturbaba frente a mí. Movía sus dedos contra su coño cubierto de pelos.

Sin dejar que mi mujer se moviera, dirigí mi polla erecta a su coño y la penetré. Montse tenía una visión perfecta del coño de mi mujer abierto por mi polla. Agarré a mi mujer contra mí y comencé a mover la cadera. Ella empezó a gemir y a decir que quería sentir mi corrida dentro.

Así fue como me folle a mi mujer delante de mí cuñada Montse, mirándonos a los ojos...
Una situación muy caliente, me encanta
 
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