Os cuento una experiencia vidida este año y que cada vez que la recuerdo me sirve para pajearme:
Nos despertamos por la mañana en una de las múltiples estaciones para autocaravanas del sur de la península. Al ser época calurosa durmió con braguitas y camiseta suelta. Y ya empece yo a provocar un poco, subiendo la camiseta, moviendo hacia un lado la braguita, etc. Ella se revolvía un poco, pero se que en el fondo le gustaba.
Posteriormente nos fuimos a la playa, donde al ser una zona donde nadie nos puede conocer hizo topless y ya aproveche para seguir calentando con caricias, besos, etc, pero tampoco mucho más al ser una playa con gente a media distancia.
Llegó la hora de irnos, y primero se metió ella en la camper, que estaba aparcada en los tipicos aparcamientos junto a la playa, a cambiarse la parte de abajo, haciendolo sin cerrar ventanas ni tapar nada.
Después entre yo, y en cuanto me vio desnudo y ella venir caliente de la playa, me dijo que me tumbara y que me tocara un poco para ella, cosa que hice con mucho gusto, tocandole las tetas y el coño y dejandoselos al descubierto. Ella cada vez se iba calentando más viéndome, y empezó a chuparmela, aunque pare un poco el juego porque no quise que terminara tan pronto
Me puse el bañador y ella el bikini además de una minifalda.
Arrancamos el viaje por un camino sin tráfico y ahí empecé a tocarle un poco el coño, que estaba ya tremendamente mojado, al igual que mi polla.
Y llego el momento de salir a carretera. Estaba ya tan caliente que le pedí que se quitara la braga y se tocará para mi mientras yo conducia, cosa que hizo sin rechistar. Hacia tiempo que no la veía tan excitada, así que aproveche para decirle que se abriera bien de piernas cada vez que nos cruzábamos con alguna furgoneta o camión, que les enseñara bien el coño, lo que provocó que se corriera rápidamente y a mí me quedará una imagen grabada de sus piernas y coño abierto para mucho tiempo.
Lo recuerdo y me sigo poniendo a mil.
